tiempo para escu
nció el ceño y siguió hablando. Marcia se estaba volviendo cada vez más ridícula.
e a él, Rubí. Déjame decirte, nuestros padres ya han decidido nuestro compromiso. Estar
quedó
an compro
ión. Suficientemente cierto, la familia Gibson necesitaba fondos para pagar su deuda. Necesitaban estar vinculados con la familia Thomson
dolía el corazón. Sin embargo, nunca estuvieron realmente relacionados de
taciones entonces!- Ru
gustado por ti. ¡También te será imposible casarte en el futuro!- Al otro lado de la llamada, Marcia continuó con gran satisfacción. -Oh, es
dad la abrumó y Rubí n
jo que nunca tendrías un hijo. Por lo tanto... ella me eligió a mí como sustituta de ti. ¡Continuaré con el linaje de la familia Thomson! Ella quería cance
l. Ya que piensas tan bien de ti misma, observa a tu hombre como es debido-, dijo Rubí en voz baj
ejar este lugar lo antes posible. Canalizó todas sus fuerzas para abrir la puerta. Presa
e de mí-, la voz indolente de un hombre sonó detrás de ella. Ella lo escuchó continuar diciendo:
sudor rodaban por su frente. ¿Cuándo había salido
se rió entre dientes con ironía antes de dar
. ¿Puedo molestarlo para que me abra la puerta? ¡Quiero ir a casa! -Rubí se obligó a calmarse antes de p
ío. Comenzó a imaginar todas las diferentes formas en que se encontraría con la muerte como consecuencia de hacerse pasar
ntamente. La masculinidad del hombre era abrumadora cuando su olor invadió lent
piadado? ¿Por qué estaba... ta
cabeza y le s
e han co
fueron extremadamente íntimas y el rostro de Rubí se sonrojó inst
s de ella se ab
s ahora mismo. Te vas a mudar a la Re
con calma. Se podía ver una
o le importaba la a
atada? Obviamente, no había hecho nada en este momento. Además, ¿no decían que Marcus detesta
conmigo ahora? ¿Hm? -lev
gó un bocado de saliva. Sonr
o intenciones de aceptar est
te, ¿verdad? -La expresión de Marcus se oscureci
tió con l
obre psicología i
te rechaza mis ofertas -an
para contratar a alguien que se especialice en el cuidado de niños. No hago esto porque no pueda diferenciar entre
s de todo, los rumores decían que Marcus era una persona despiadada. Ella era, sin saberlo, simplem
netrantes parecían percibir todos sus
a Marcus no se disipó en absol
recuperar a la
Rubí estaba atónita por sus pa
etra. Sin embargo... no importa cuán capaz sea usted, probablemente no esté informado sobre algunos asuntos. Ya corté mis relaciones con
a mujer que lo había rechazado. Una mujer que rechazó una herencia familiar. ¡Qué interesante! Esta era la primera vez que conocía a u
alió de la oficina. Bajó en ascensor desde el piso
a única allí, paseando de un lado a otro en la entrada del edificio ya que el guardia de seguridad le había negado la entrad
e ibas a pertenecer a la familia Santoro. Lo dijo de una man
í. Todos sabían que Marcus valía miles de millones y que era una persona des
restaurantes a solo unos pasos del edificio. Sin embargo, había demasiadas grandes empresas ejecutivas en los alrededore
edo de Emily comenzó a temblar cuando señaló a Rubí. Tú, tú, tú... ¿Por qué lo rechazaste? Rubí Gibson, ¡estás loca! Este trabajo paga veinte mil dólares a
an la espalda y la cintura. Se ma
oblemas cuando trato a ese Pequeño... Definitivamente tendría una muerte trágica. Sería mej
ja. Ella asintió co
Rubí, ¿por qué
ra. Después de pensarl
estar comprome
ertos sobre la mesa. La notic
con amargura
ersona muy amable. En un momento, la traté como a un
ganó el afecto y el amor de tus padres. Ahora que ha logrado eso,
Emily con una sonrisa amarg
sidad y verduras frescas. Una vez que Rubí regresó a casa, hicieron planes para encontrarse al día siguiente y
uera, Número Uno acababa de hablar con un médico p
queño Dylan... ¿quién se en
o no está bien! El Pequeño Dylan parecía haber comido todo lo que la señorita Gibson le había dado... No se resistió en absoluto. Qué extraño. El Pequeño Dylan había sido diagnosticado con una forma grav
posible