haber en su ser. Su cabeza martilleaba poniéndolo de más mal humor del
pedirme en la cara que cuide a tu hija así sin más. Acaso ella no es ma
notaba tenso y nervioso. Vincet chasqueó la lengua ante la reacción de ella totalmente diferente a la que estaba acostumbrado y más p
son 20 años- Liliana le quitaba interés al
mis amigos, me hicieras pasar la vergüenza del siglo y ahora vienes simplemente con tu cara y sonrisa para que cuida a quien, a u
a ella sin embargo mantuvo el silencio. Su madre estaba cerca y la había
ue estaré de viaje de trabajo. Como vez mi hija tiene retraso mental, no puede quedarse sola, necesita un tutor que
a, no es nada mío, nosotros solo tuvimos sexo una vez y el condón no se rompió
so no viene al tema. No puedo dejarla sola, y no tengo a nadie que me ayude. Tú er
zó un
puedo mandar a buscar ahora mismo, aunque de seguro mi secretari
amente negó c
a, incluso su tono de voz había cambiado- o acaso se te olvidó cuando tuve que soportar el desprecio de tu familia cuando me hiciste pa
et se tensó ante
l futuro. Para eso estoy aquí. No te estoy pidiendo dinero, ni propiedades, ni que te hagas responsable de nada de mi persona,
n los dientes apretados- Vienes a m
reportaje de mi historia. Estoy segura que mucha gente está interesada
azules la
enías todo
ta ya sabes lo que debes hacer, pero si no accedes a mi petición sabes también lo que haré
lo fuerte que su corazón palpitaba tanto de la rabia como d
, ponerle la mano encima a una mujer que no fuera para hacerla gemir de placer, estafa fuera de su c
buscado Liliana con sus
acha. El cabello le hacía sombra en el rostro hasta que lo alzó un poco mirando por donde se hab
in nada serio, solo porque tenía un plan en mente, pero acaso su madre se había preocupado realmente por ella. No era algo que pudiera decir
Liliana no era la única inteligente y mientras las dos personas discutían en la habitación de al lado ella repasó toda la estan
a revista. Su rostro tenía las fracciones bien ubicadas, sus labios en una línea recta lo hacía parecer más serio de lo normal, pómulos altos, ojos azules rodeados de esp
zos gruesos, los pectorales duros asó como su abdomen definido hasta el borde del pantalón a la cadera. La imagen la había hecho tragar en seco pues
quellas paredes. Algo que estaba segura que perdería en lo
et estaba completamente helado mientras el de Liliana no mostraba que estaba realment
si necesitas algo- Liliana se acercó a ella y le dio un beso rápido en la
ó con una l
idado Vincet, es
on los brazos cruzados sobre su pecho y notab
na, con la mente más despejada pen
a salida. Cuando la puerta se cerró dejando solo a las dos personas dentro el ambiente se vo
la de la chica entre sus dedos y alzar su rostro. Los orbes color avell
ando te vaya a hablar mírame