Mi CEO, mi Deseo

ir a un bar

ca declaración de mi compa

n. siempre lo he hecho lo consideraba parte de su encanto. "Estoy seguro

el suelo de nuestra nueva sala

za y mostró su sonrisa g

era un hombre que rara vez era absolutamente deslumbrante, sin importar cuán puede ser el día de su v

, insistió. "Sólo una co

r y llegar a la

er en el tiempo". Señalé

stada. "Después de cronometrar la caminata pa

rápido". La ceja arqueada pe

lares. Algún día aparecerá en vallas publicitarias y revistas de mod

ofrecí como reemplazo. "Si logro pas

Voy a cenar a

alegrías de Cary, pero no era u

nemos un cocina por la que la mayoría de los restaurante

ar una conversación sobre la cocina. Tomando el ascen

calle con u

me abrazaron y me llamaron. para explorar. No estaba a

nitamente templado y sensualmente perezoso, el otro lleno de vida y energía frenét

vivo conmigo, habría estado miserablemente solo en este extenso apartament

sombrero. "Buenas noc

s, Pablo". Me balanceé sobre los tacones

a cam

co más tranquilo desde esta

vechar el clima de junio ant

nsejo, señor

rno voladizo de la entrada de

dad del edificio y sus vecinos, a

bullicio del tráfico en Broadway. Algún día pron

yorquino fraudulento. Tenía l

metro y tenía dificult

é no d

straído, pero fue difícil. Hab

vendedores ambulantes, los gritos de los vendedores ambulantes se mezclaban con el música de artistas callejeros, la impresionante

se parecían a nada qu

bulancia, patrulla o

ento. Me impresionaron los pesados camiones de basura que circulaban por las pequeñas calles de sentido único y

por la ciudad es tan cómoda y tan familiar como su par de zapa

omántico y no tienen Parpadeó cuando el suelo vibr

amor. Tenía ojos estrellados y se notaba. Así que tuve que esforzarme mucho para mantener la calma mientras me dirigía

méritos y eso significaba un

yo sería el asistente d

Leaman

grandes de Estados Unidos.

cuando acepté este puesto, s

ajado para uno de sus amigos y cos

dre", dijo. "Tomará una et

iantiles con el sal

portante y mi padre no

a sea,

yes cuando Stanton le dijo había hecho la oferta. Yo respeta

o mismo había luchado por pagar los préstamos... y había pe

pero nunca renunció a su d

nojarse por viejas frustraciones, concentrado en ponerse

Así que quedé encantado para llegar al edificio Crossfire, que

y seguí la línea del edificio

mis entrevistas anteriores, que el interior al otro lado del puertas giratorias adornadas con marcos de cobre era igualmente

identificación del bolsill

estidos de negro en la oficin

stido, pero luego me dejar

el piso veinte, tenía un horario general para

sores cuando una morena es

quete y lo derribó, derrama

esquiva el caos y continúa como si no lo viera. Hice una mueca de simpatía y me aga

dándome una rápid

sa. "No hay problem

er una moneda de cinco centavo

apartara de mi camino y cuando no lo hice, arqueé el cuello hacia atrás para permitir que mi campo de visión levantarse. El traje de tres pieza

atractiva que fuera

ad, no fue

o del hombre y

impleme

por toda esta exquisita masculinidad a la altura

ambió en el air

cambió... como si un escudo

s pulmones. Magnetismo intenso que desprendía creció en fuerza, convir

r instinto, retrocedí. Y

as noté el dolor. Estaba demasiado preocupado mirando, pegado al hombre de enf

stru

una boca firmemente grabada, unaLa nariz puntiaguda y los i

rbata hacía juego. perfectamente con esos iris brillantes. Sus ojos discernían y evaluaban, y Me aburrí. Mi ritmo cardí

ampú. De cualquier manera,

ándome unos gemelos de ó

su agarre se hacía más fuerte. Su contacto fue eléctrico, enviando una descarga a

espacio entre sus cejas

tás