do en el pasado, en todas las personas que me hicieron daño, en el d
onó sin siquiera saberlo, prefirió hacer
primer lugar no es su dolor el
ar, una vez al
y mucho menos tú familia; ni siquiera tus padres y hermanos están obligados a quererte. Al igual que tú, n
es una obligación, es una elección. Y
voz de Elli me saca
sma facultad, así q
poniéndome
ses? Dios eres ins
n, ya sabes lo
rá una fiesta está noche, y p
será? -p
Matías tiene casa llena; sus primos
salir o si no van a empezar a agobiarm
uedo terminar antes el trabaj
a el ensayo de filosofía y sali
que le acabo de decir está bien; sé que tengo me
*
tiembre,
Lucía, Elli y Matía
sin siquiera mirar atrás. Mi a
asa me arrepentí
doscientas pers
lantada en el asiento. Lu se acercó a m
i pasa algo, por favor, ¿me
uila, no pasa nada,
a Elli y Matías y, al entrar en serio, me sentí morir. El aire estaba muy dens
fresco. Empiezo a caminar buscando un lugar c
; no aguanto estar con
n el borde de las escaleras; cuando
ado. Las únicas personas visibles acá arriba son una p
puerta. Está vacía, gra
nos estantes de libros y un sofá. Este parece un despacho
os cuantos chicos,
y, cuando me dispongo a salir para bajar con los demás, me encuentro c
unta tirando las cenizas en la a
te mi nombre si nunca lo he visto? - ¿Eres el dueño? El chico apaga el cigarrillo y se acerca a mí. Cada
ómo salg
Román, ¿te s
eguntó desconcertada, de dónde
í? -me renuevo incómoda tratando de salir del espacio, pero no me lo permite-. Creo que es mejor que te vayas ahora, Nella. Si tu hermano te ve aquí se te va a armar una grande -dice rozando el lób
llegamos al borde de las escaleras. Me detiene: -Puedes calmarte y dejar de corre
ano no le gustará que tengas tu
ría, y hasta que llegó a la curva de mis caderas me tenía suje
ba que dejaras de correr, ni s
ningún lado. No te conozco, así que gra
-pregunta cruzando los
s que me lleve, si no pedir
ace una seña con la mano, para q
cuenta de que mi hermano está con ellos. Me quedo plan
no se pued
negros que tengo enfrente que me mira como s
-dice mirando sobre mi hombro. ¿Ahora qué
e Nella, ¿será qu
bien,
hí, píd
er a qué se refiere ahora-.
me. ¿Por favor, me p
ilipollas, ¿q
vo hacia mis amigos para ver si ya mi hermano
r, salvar de mi hermano y llevarme a casa
pero el nuevo no estuvo tan
rupo de chicos que vi por el balcón. Ojitos negros, me deja a unos metros de sus amigos y va a
interior de la casa, evitando a mi hermano. Vamos por la
a moto y miró al chico intentando ver una señal de que esto es
toy inmóvil. Me saca de mi trance
ube, ¿a q
no pienso subi
rme su móvil suen
no va a salir por esa puerta en menos de cinco minutos y tú no pu
a asustada: esto no
uentre aquí tampoco es
hora en
embre de 20
lo que hacía me puse en
arrepenti