e concentró en el centro de mi cuerpo. Mi corazón no dejab
o-. No fue mi intención preguntarle algo como eso. Lo siento tanto. Eso no era l
o seguro terminaré di
jé la cabeza, sintiendo la
¿o sí? - dio un paso atrás-. La curiosidad hay q
a sonrisa maliciosa que me dedicó me p
a íntima - mordí mis labios-. ¿Le parece si continuamos? Olvidemos es
deos que siempre estaré abierto a contarle mis más secretas intimidades. Le aseguro que para su inv
señ
ción. Es como si tuviéramos los mismos pensamientos. Ethan y los chicos quitaron toda la baldosa del sótano, por lo que el día me pareció muy productivo. Es el primer día y ya hemos avanzado bastante. No voy a negar que, recordar las palabras y mi estupidez me po
ze - me despedí, salie
s cercano, ordenando café y varios cruasanes
eguntó de un momento para otro-. Es que, hacer u
mbros, restándo
ien con sus locuras y manías. Si es lo que le gusta
apretando mi cachete derecho-. Tu inocencia es muy curiosa, Carol. Esos l
sepa muchas de las cosas que existan en e
Carol - zanjó-. Hago este trabajo porque es el primero que nos salió y tú lo aceptaste sin pensarlo, después de a
meses atrás trabajamos para un obsesivo por las ratas. Remodela
la vez que le cayó encima el nido de
e, Carol - resopló-. No m
No le des tanta vuelta; logramos lo que tanto queríamos, ¿acaso no estás feliz? Porque yo sí
encio. ¿Por qué se está comportando de esa manera? Debería e
a el mal humor, ¿n
cuerdes, que suficiente tengo con pens
familia adinerada. Bien podríamos sacar provecho de ello, pidiéndole que nos recomiende, pero para lograr reputación y más clientes debemos
ten cu
endo su actitud, si cuando le comenté del trabajo estaba realmente feliz y no dejaba de
ablando en serio, con eso de querer mostrarme cuál de los dos roles asume en el sexo? Y si fuera cierto, ¿cómo me demostraría el papel que jue