img La esposa perfecta  /  Capítulo 3 3 | 18.75%
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Historia

Capítulo 3 3

Palabras:1563    |    Actualizado en: 06/11/2024

e él sabía que podía compartirle, era la última vez que la vería, aunque no se lo dijo, ella era caprich

prefería alguien a quien ni conociera bien, que no lo conociera y tuviera pretensiones con él, alguien que no tuviera escándalos ni pasado y fu

llamativa, es modelo, no, para nada, no puede

no recuerdo como se llama, que no sale nunca, se la pa

pero sí, es verdad, ella desde que se murió la mamá no la

la vida que exige Rosa no es fácil. Ella es buena opción, dud

ara lo que quiera. Él no me va a decir que n

ano se

despampanante como Ro

ara lo que la

Lucia, ya

milia, tendría unos quince minutos a sola con la chica para ponerse de acuerdo sobre que decir o no decir delante

le indicó y lo condujo al vivero donde podría hablar con la chica. Solo su hermano Jaime

gracias

aceptado que pagaras mi d

ido antes, lo hago sin

as, En

s familia. Tr

por

a darle; escuchó pasos y se giró a ver, no la recordaba, así que no la reconoció, se veía delgada con el cabello largo, la pobre luz no le dejaba ver sus facciones, pero repasó su cu

dad. Se molestó de inmediato, la chica avanzó y dejó ver además que llevaba demasiado maquillaje s

brazos y ladeo

hes -dijo e

dole de pie a cabeza con la mano, ella se incorporó i

Qu

yasa, como una puta. ¿Quie

le corrieron lágrimas grandes por sus mejillas, y comenzó a temblar. Él chasqueó la lengua y se puso las

nte de mi familia no t

ngo na

o de tu madre, algo debes tener. Ponte un jean, esos zapatos y una c

, pero no se moví

a tu habitación sin qu

s torpes del vivero,

po para acá, nos vemos a solas. Tenemos un año de relación, y eres superreservada

espondió con

a la habitación de ella sin que los notaran, él apreció el trasero redondo de ella y sonrió. No tení

y dibujos infantiles por todos lados, miro la habitación y negó asq

cosas, vio una blusa rosada, manga tres cuarto con lunares dorados y la sacó, bus

os, se verá elegante y sác

las fotos que tenía sobre la mesa de noche, eran fotos de su difunta madre, quien fue una mujer h

mucho mejor, sencilla, pero elegante y bonita. Tenía bonito rostro, las pecas le daban un toque interesant

de maquillaje. Vamos -dij

rta y se vol

ramos y tú, baja norm

ir nada, viéndolo c

ápido, vio a su familia en el recibidor y a la familia de su padrino. Sonrió al ver a Ro

dando las veces que se metió en su habitación cuando ella tenía

mano por la espalda desnuda de la mujer que llevaba

ta noche. Creo que quiere sorprenderte -dijo con burla que él advirtió y supo qu

espero nada diferente hoy -dijo

ó y lo saludó co

Gabriel, bien

me hace saber que estén juntos, si la haces siquiera llorar, te p

se car

e no. Sé lo que tengo,

vale que

lla, sonrojada y nerviosa, Enrique pensó que se veía mucho mejor en su traje improvisado que en la ridiculez que llevaba antes, se volvió a ver a Rosalía y esta recog

con ella lo que quisiera, se la entregaría por completo a su equipo de mercade

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