. Mis lágrimas son de pura felicidad, pues después tantas ilusiones que me he hech

mi cuello, hasta llegar a mi senos y atacarlos sin ningún tipo de compasión. Al sentir sus dientes tirar de mi pezón, ese calor y ese cosquilleo i

? -alternó las suaves m

e contra su cuerpo lentame

ber cambiado de color. Liberó mis pezones de sus dientes y, entre

culminó el beso con una mordida

nos va envolviendo en la calidez corporal de nuestros cuerpos, a

o me recibes -acaté su orden,

rótica que pone al verme a recibirlo. Me abrazó, cruzando los brazos a mi espalda y haciéndome caer de un solo golpe en sus piernas. Lo único que pr

ios -f

El chapoteo del agua en nuestros cuerpos es salvaje, pues Aiden está fuera de sí. Sus embestidas

furiosa de fogosidad al propio ritmo de nuestros movimientos de cadera. Un escalofrío recorrió por toda mi pie

ucho más adentro

erpo con la ruda y maravi

tiendo que la presión de mi cuerpo se saldría en cualq

levantarme un poco y así salir

iolencia con la que tod

cadera, liberando la presión que me ten

ermosa -murmuró con

más, mi amor -dij

as piernas. Me vuelvo mucho más sensible cuando hacemos el amor bajo el agua. Es maravilloso poder te

as en nuestra cama, para amarte toda la noche y todo el día sin ne

uego de todo esto tan marav

no, futura

nsación de ser feliz y de estar como en un cuento de hadas sí puede existir en la vida real. Esta es de la

del más puro y del más bueno que pueda haber en la tierra. Es un amor incapaz de ser mentiroso

r. Bardot. Me da gusto verla así de feliz -sonrío, viendo el an

En un principio las ilusiones se fueron al suelo, pero al llegar a casa t

odo por usted. Antes se había demorado en pedirle matrimonio. Yo me siento feliz por los dos, porque no he conocido una pareja tan bo

mpezando a construir su carrera junto con nosotros.

príncipe azul -reímos-. ¿Qué tenemos en la agenda

hacer las revisiones finales del contenido previamente verificado por los otros Editores de la

cuando llegue la Srta. Díaz, así mismo, avísa

de enviar a su correo la lis

mucho trabajo, por lo que v