, las barreras que Ethan había levantado comenzaban a desmoronarse lentamente. Cada vez que sus miradas se cruzaban, había una chi
ado por la manera en que Adrien gesticulaba al hablar, su cabello ligeramente despeina
iar tu empresa -dijo Adrien, mientras daba un sorbo a su vino-. Una fusió
atando de sonar indiferente
en su silla, cru
o podamos tra
ener que compartir un espacio de trabajo con Adrien le causaba
ofesional, Moreau. Pero nuestras p
ceja, divertido-. A veces siento
el juego que estaban jugando esta
decir lo qu
hacia adelante, ac
decir, Ethan? ¿Que en el fond
cia, la adrenalina de cada encuentro, y ahora, esa tensión palpable entre ellos.
có, más brusco de
reír, un sonido
ero está bien. Te daré tiemp
avanzar en su carrera y el temor de lo que eso podría significar para su
*
s calles. Ethan se sentía más claro y, a la vez, más confuso que nunca. La fusión era una idea tentadora, pero al m
ien, acercándose mient
runció
sario. Teng
ivertida-. No puedo dejar que te vayas
a mezcla de irritación y un
no digas que no te a
en s
brumadora. Cada vez que sus brazos se rozaban, un escalofrío recorría la espalda de Etha
ó en el asiento, mirando a Ethan con una e
obre nuestra char
tratando de pensar con claridad mientra
e-. Pero no puedo dejar de pensar en l
a mí? -preguntó Adrien, su tono volviénd
decuadas-. También significa que tendríamos que lid
ó, mirando po
lo que más tememos es
alabras. Había un trasfondo en lo que dec
el edificio de apartamentos de Etha
ompiendo el silencio-. Sien
intensa que siempre lo dejaba sin aliento-. ¿Y si nos encontráramos en un
un nudo en
rries
a buscando las palabras correctas-. Pero quizás deberíamos dejar
o. No solo era un desafío profesional. Era algo más pers
se volvió
sito
su tono más suave-. Pero no olvides que tamb
coche y se despidió con
envolvía por completo. Tenía la impresión de que estaba a punto de tomar una