sta de Alin
idos. Esta era la Gala Anual de Innovadores, una noche de autocomplacencia y networking de alto nivel. Estaba aquí como líder del proyecto para nuestra
ía decidido, mi
esa rival, analizando los puntos más finos de una reciente fluctuación del m
a Be
entejuelas que era al menos dos tallas más pequeña y completamente inapropiada para un evento de ga
modo. Pero sonrió valientemente mien
siempre acapara
corté
o el impacto potencial del último
s ojos se iluminaron
obre el capital de riesgo podría
o por Katia tir
aburrido. Vamos por
a se volvió hacia mí, su sonrisa una cu
nte, su voz empalagosamente dulce-. Trabajas tan d
sus palabras se asentaran, s
eguir un acuerdo como el de Grupo Valenzuela... Es tan impresionant
con su sucia insinuación. Me estaba pintando como una prosti
se quedó en silencio. La sonrisa del señor Chen v
e, pero mi voz, cua
la solidez de nuestra propuesta, Katia. Fue el resultado de meses de ne
quipo, defendiendo mi tra
sonido agudo y vacío. Le dio u
una chica tiene que hacer lo que tiene qu
to tan vulgar que me
amín parecía
ja y furiosa-. Eso es co
mpuso. Hizo un puchero, s
qué siempre te pones de su lado? ¿
s cuando el
mento sostenía una copa llena de champaña, al siguiente, estaba volando por e
n plateado pálido, se arruinó al instante, volviéndose oscura y transparente. Se pegó a mi
ltitud. Estaba expuesta, humillada, de pi
n una mano, sus ojos muy
siento muchísimo
llo de triunfo en sus ojos. Una sonrisa cruel y satisfecha jugó en sus labios por
sto no fue un accidente. Fue
-