e muy mal genio. ¿Qué vamos a hacer si llega a causar más problemas?",
trol. Y a nosotras nos hace falta que él vaya, solo para asustarlas un poco, tienen que saber que no deben meterse co
ada más que suspirar profund
ños de prisión? ¿Cómo es que lo dejaron salir tan pronto? ¿Acaso escapó?", inda
todas las cosas, él salió
s nada económica. ¿Cómo pudo conseguir el dinero s
la menor le preocupaba que atraparan a su tío por tener en su poder una motoc
tuvo suficiente como para poder comprarla. Ellos estaban juntos en prisión y se hicieron amigos, al salir, el hombre dec
s? ¡Cuánta
la mayor, nerviosamente, mientras sostenía la mano de su
uenta de que ya no podemos volver a hacer eso. Tenemos que ver por nosotras mismas, y no podemos per
e el hecho de que te hayan dejado regresar ilesa", acotó la mayor, suspirand
me dejaron ir. Supongo que él, probablemente, estaba aterrorizado cuando vio al tío Zack porque, después de todo, él era un asesino. Entonces, puede que, si nos molestan de nuevo,
meter el mismo error!", exclamó Wendy, susp
, anunció la chica, mirando a su madre a los ojos, y respirando profundam
a, y dijo: "¿Por qué me estás ocultando algo? Pued
comprar algo allí. Así que, cuando vi los grandes almacenes Chen, tuve una idea. Pensé que, quizás, podríamos remodelar un poco nuestra casa
la matrícula de Wade, no obstante, su tío acababa de darles quinientos dólares, lo
o dinero ni nada de eso, y simplemente quería una vida sencilla y pacífica. El he
e para ella. Al instante, su cerebro se llenó de pensamien
enda por departamentos?", la mujer estaba tan aterrorizada por el posibl
hora que el tío a Zack te dio esos quinientos dólares, lo que es suficiente para cubrir la matrícula de Wade, todo el dinero que ganemo
suficiente! Celia, ¿de dónde sacaste esa idea? ¿No crees que lo que tenemos ya está bien?", preguntó la mujer, preocupada, aferrán
hos pueblos alrededor y todos deben ir a la ciudad que está a muchos kilómetros de distancia para poder comprar víveres, por eso, tenemos una verdadera
lla, ya que, la cobardía de la mujer estaba tan arraigada en su carácter que hacía difícil la tarea
a en la pobreza y mediocridad, pero yo no quiero que tengas una vida como la mía. Ya estás grande y, por suerte, piensas por ti misma. Por ello, no
asustada como para dejarla tomar decisiones apresuradas. Era muy arrie
de repente, Zack regresó. Él estaba completamente cub
an fantasmas, al instante, el miedo de que Zack hubiese asesinado a alguien inundó la habitación. Después de todo, é