de su hija. Sin embargo, volvieron a sentirse nerviosos cuando llegó la hora de comer. Soren ordenó algo que le gustara a todos, y el almuerzo se llevó a cabo de manera a
dió tomarle la mano por debajo de la mesa y la encont
lizarlo. Luego tomó sus palillos para coger un poco d
reaccionó dejando los palillos de repente y tapándose la boca con la mano. Su ro
, preguntaron Zed y Mia, intercambia
y Johnson también dejaron de come
mó la mano de Elsa con fuerza y dijo: "Nos conocimos el año pasado, y llev
res de Elsa. Soren podía entender que la chica no quisiera que sus padres se preocuparan por
erentes en ese momento, pero para sus familias, esto parecía un interludio
hizo su mayor esfuerzo para actuar como el yerno perfecto frente a los padres de Elsa, mientras que ella se acercó a los invitados
da; sin embargo, era tan educada y considerada que siempre sabía qué decir bajo cualquier circunstancia. Los rostros de Zed y Mia s
s gritaba: "¡Felicidades, Elsa! Debería haber venido antes para ayudarte, pero
la ya parecía lista para emborracharse. De todos s
n se abalanzaba sobre ella y decía con su voz tie
o ternura a Elsa y, acariciando su cabeci
tu guardarropa y convertirlo en el de una vieja solterona, ¿no podías esperar hasta después de tu boda? Vamos
í que lo olvidé. Me cambiaré antes de que empiece la cena. En realidad, no será algo muy formal; solo queríamos cenar juntos para co
erdad debiste haberte cambiado antes. Vamos, te acompaño. Mie
Soren, quien se acercó a ellas mientras hablaban. Elsa se volvió hacia él diciendo: "
ponerte? ¿De qué color?",
heongsam. Rojo, por su
iero que la gente piense que no nos pusimos de acuerdo.
isa blanca, mientras que Soren vestía de manera informal. Nadie pensaría que se trataba de la joven pareja que anunciaba su co
n brazo por los hombros, haciendo que su rostro se ruborizara de
or ti, ¿de acuerdo?". Los ojos del hombre estaban tan car
n y lo tomó de la mano. "Este es mi ahijado,
uvo de acuerdo, y el rostro de Elsa se pu
escrita en su rostro. "Elsa, ¿qué haces? ¿Quién es este hombre tan
menzó a contarle todo lo que había sucedido. "Por favor, no le digas nada a mis padres.
tratara de un sueño. Jane extendió una mano para rascarle ligeramente el cuello, y como su amiga era muy delicada, de repente se echó a reír con tanta fuerza
se tomó un tiempo para calmarse y luego volteó a verla con una e
mente grave: "¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan pr
enos una cosa buena en todo esto?
que Greenwood. Es decir, mira su nariz y sus ojos, ¡y
n mi vida!". Elsa miró a su amiga loca por los hombres y rechinó los di
ír. Luego entró en la habitación que había reservado para sus padres, sacó la ropa que había preparado y se sentó frente a la cómoda, esperando que Jane la ayudara. Su amiga era muy hábil para este tipo de tareas ta
finalmente se habían convertido en pareja, lo trajiste para que lo conociera. En ese momento, hablamos de comprar un helado, pero él seguía diciendo que era alérgico o que no l
incluso tomar un taxi era un gasto innecesario. En retrospectiva, se preguntó por qué estaba tan segura de querer c
igo, ¡pero tuvo el descaro de intentar meterse en tu cama! Lo bueno fue que tomó la tarjeta de la habitación equivocada. Si realmente hubiera te
ren le pateó
puntos, entonces
ne habría estado en peligro también. Ella dijo con cuidado: "Te invité al hotel ese día, pero Little Bun m
espondió Jane evasivamente des
diez años de amistad, Elsa podía notar en cuestión de
les. Para celebrar que escapaste del infierno que hubiera sido una
onrió y suplicó: "¡No! No lo hagas, que tendré que devolverte el
e se pusieron rojos ante sus palabras. Luego le dedicó a su amiga una sonrisa y dijo con seriedad: "Janie, sabes que te daría todo lo que poseo para c
oda", bromeó Jane mientras le aplicaba algo de color a los labios de su amiga. De repente, la abrazó
puerta bruscamente, interru
tó diciendo:
rta y Soren entró
traba su hermosa figura a la perfección. El traje parecía hecho a medida y le quedaba impecablemente. En comparación