y seguridad, aunque tengamos nuestros problemas nunca me ha dejado sola, es una guerrera que a pesar de las dificultades sigue batallan
n, la chica se cuestiona en voz alta-. 'Nah... hay que sobrevivir, en
el número de su padre, ya que no quería echarse para
a efusiva, -¿Cómo está mi ratoncita?, ha pasad
blanco, 'Papá siempre dice eso no sé por qué, si me comunico con él cas
dre, -De aquí a pequín esos es un tiempo, ya qu
s graciosísimo, por más que le digo que no tienen sentido y no causan risa, sigue con esa manía, sin impo
en un tono serio, -Te he dicho que
n tono compungido, -Sabes que te amo, mi raton
los, entonces el segundo, es lo dramático, es un rey del drama, a veces pienso que mi padre es
s a una videollamada?, quiero ver tu
te apodada Maya-, le digo mientras cambio a una videollamada, -Entonces mi amado padre, ¿podría dejar de ll
-, me dijo con
sea su hija, es un hombre delgado y alto, su nariz, es muy prominente y sus labios delgados, sus cejas son largas y afiladas,
omo llegó a laboral para ayudar a otros, fue fácil un día estaba viendo un documental, donde pasaban la situación en la que vivían muchas personas sin techo, que eran ayudados por una
a mamá, no es así, me siento orgullosa de las obras que hace por otros, y a pesar de la distancia, siempre llama todas las noches para saber que hemos hecho en el día. Lo más gracioso de esto es que cada vez que me quieren reprender los
e le digo lo mismo, pero él sigue con la ponedera de apodos, puede sonar hipócrita de mi parte, porq
dad, -No has escuchado que para los padres los hijos nun
r qué lo estoy llamando, le resumo mi día lo más breve posible, desde todo lo que paso con los
pel, con cara de agraviada le digo: -¿Me crees?, sabe que sería incapaz de hacer algo como eso apropósi
o que tiene cuando no sabe si creerme, después de un rato empieza a cuestionarme, -¿Estás segura de q
de que la hija que criaste no es una ninguna mentirosa, ni tampoc
uerdas de lo que paso aquella vez con la maestra, y lo que sucedió en a
nca he dañado a nadie que no se lo merezca-, le digo sin titubear, -Sabes lo que paso con lo de la
ré a tu madre en su hora de descanso, luego de debatirlo con ella te haremos saber nuestra decisión, ¿qué pi
razón le dije la verdad, que era porque no quería ir donde los vecinos, así soy yo, puede que suavice los hechos y solo les digo s
por parte de mi padre, solo me