¡Ly
latidos golpetear con violencia su prisión de huesos y músculos, me siento en la cama y miro a mi alrededor con par
loroso cuerpo mientras bajo a la cocina, la cual se encuentra en el segundo piso, yo estoy en el tercero junto a un extraño chico al que he vis
nio o pe
spensador de agua empotrado en la nevera, tomo un vaso en m
som
stante y termino mi bebida. Me despido con un ademán de manos de ambos individuos y salgo
nzo el ceño, extrañada, y estiro la mano, donde
Gra
a suya, miro el trocito de chocolate, me encojo de hombros y lo como, cierro los ojos c
mi cabeza toca la almohada mis párpados se cierran y m
.
mi alrededor de temas de poco interés para mí, mastico con lentitud y trago, al tiempo que Scott pierde la
a a separarlos junto a Jagger, diez minutos después logran su cometido y yo mi desayuno, por lo que tomo mi plato vacío, y sucio, y voy a lavarlo, a
a en el techo de mi habitación y cuento mis respiracio
dia
lentamente y entrecierro los ojos tras el cristal de mis gafas para ver mejor, mi corazón se salt
yúd
o de cristal reforzado y polarizado, ocasionando que el aire escape de mis pulmones mientras la sobra queda estática sobre mí y grita mi nombre, deformando el rostro de mi tí
lvidé las gafa
entro del bosque, observando a mi tío y hermano cargar sus hachas sobre sus h
ue anochezca. -Ordena mi tío, Adán asiente y desaparec
os sollozos salen de mis labios al observarlos de nuevo, así sea por medio de este sueño. Llevo mi mirada al cielo y palidezco al v
tras mi tío, dejando a Adán plantando
ilachada manta, ambos nos giramos al unísono al escuchar el grito de mi hermano y echamos a correr en esa dirección, pero una masa marrón y gigante se interpone
trarme con dos gigantescos lobos marrones, quienes comparten una mirada antes de correr tras él, lo sigo lo más rápido que puedo y caigo sobre
vo, y entero, de mi tío, él me mira fijamente y después suspira, posa una mano sobre mi hombro
qué h
atención desde arriba, cierro los ojos con fuerza y estiro ambos brazos, un par de manos toman las mías y tiran de mí con d
n seriedad y preocupación K
bajo al sentir dolor ante mi toque y me apresuro a llegar a una de las
ravés del reflejo del cristal y niego, comparte una mirad
to, conmigo. -Ordena Kristoff, todos asienten y se ponen
la habitación, recargo mi espalda contra la pared de cristal y miro a Tanner,
está
camos al
Por
oletas en mi cuello, sus ojos se encienden. -Por lo que haremos pagar a quien sea que te haya hecho daño. -Me quedo sin
.
dando, entonces. -Salimos de mi habitación y bajamos hasta llegar al garaje, donde hay varios artefactos se encuentran cubiertos
, Tanner es una
l casco que Judhead me pasa, después subo a su espalda en el a
muy agudo escape de mí, nos adentramos en el bosque y minutos d
y entro en la casa sin necesidad de mis llaves, n
mes, y pesadas, puertas de roble blanco, encontrando ropa, abrigos y zapatos de mis padres, mis ojos se cristalizan ante ello, cosa que no me detiene
papá. -Susurro, derramando unas cuantas lágrim
mis brazos se llenan miro a mi alrededor y tomo una caja de madera rojiza, me arrodillo y comienzo a guardar todo en ella, dejando las cos
os y alertas a nuestro alrededor, carraspeo, llamando su atención, y obser
an a guardar todo en los compartimentos de sus motoci
o de que Tanner lo hace, diez minutos después estamos entrando en la casa d
ablaremo
s él sostenía, y olía, resbala de su mano y se estrella
ar los ojos, pálidos, y caer inconscientes, logro atrapar al causante de todo antes de que caiga y destroce
lloso,