ero sigo mareada, por lo que cuando Kristoff entra
tiende un pañuelo, limpio mis labios y me
primo derramó un poco de la misma sustancia en la habitación de mi hermano, a ambos les ocurrió lo mismo que a ellos. -Señalo a quienes están inconscientes sin dejar de buscar,
rse y poco a poco un olor dulzón se apodera de la estancia, apago el cerillo y me acerco a Artie, el más próximo a mí, dejo que el humo inunde sus fo
vanecerme en la segunda vuelta, Kristoff se apresura a quitarme la ra
uía fuera de la casa de cristal e inspiro u
urlón en su voz, pero su rostro se mantiene serio e impasible, a
es después, me levanto con lentitud y v
a calentar agua, tiene mejor sabor en té con miel. -Paso al lado de Tanner y no me detengo mi
sobresalto y me giro con rapidez, encontrando a mi compa
ro, recogiendo la taza, a la
el cual es del color de la plata sin pulir, y sale de
.
rándome por encima del periódico que se e
rer un rat
se levanta de su asiento, dejando el periódico a u
leo la noticia. -Amanda Blem. -Murmuro al observar el rostro en la nota y hago una mueca. -Tenía solo 14 años. -Sigo leyendo y
a la segunda. -Hago una mueca y dej
Los demás lo saben?-Frunzo el ceño cuando asiente
án en el bosque, ¿podrías
iente, lo imito. -
des quedarte con un
y un ademán a Judhead al pasar por su lado y salgo de la casa, me adentr
n con los emparedados dentro a Shane, qui
estirar, comienzo a trotar por el bosque, dejándome inundar por su silencio y calidez. Corro por todo el luga
quisieron proporcionarme un ataúd, por lo que, cuando el forense me devolvió el cuerpo una semana después de la muerte, ya estaba en e
d verde, tomo la botella de agua y bebo de ella mientras observo a mi alrededor, todo está en calma y solo, perfecto. Dejo a un lado
rascos y rocío el lugar donde vi a mi tío perecer, consagrando su muerte. Suelto las hierbas a consumidas por el fuego y caigo de rodillas, vierto el conten
ien me observa con atención, suelto un grito agudo y le tiro encima los restos de la arena, cosa que le arra
elocidad, una rama impacta en mi rostro, causando un corte en mi pómulo y mandando a volar mis gafas, sin embar
o a una parvada de pájaros y el lobo gris se detiene a mi costado, observando con atención la casa, antes de entrar en tensión y abalanzarse sobre mí, suelto un alarido mientras roda
u cuerpo hasta estar detrás de él, observo horrorizada su lomo, el cual se encuentra a carne viva, me inclino hacia él y poso mi mano sobre el pelaje chamuscado y la sangre. Par
radual, levanto lentamente la mirada y me encuentro con un feroz lobo marrón, mi corazón co
lo que voltean y aprovecho eso para levantarme y echar a correr de nuevo, ig
cucho al lobo acercarse a mí, tomo la ruta que lleva hasta el risco y fuerzo a mis piernas a moverse,
hombro, centrándome en la altura del risco,
hasta la punta del risco y, sin pensarlo dos veces, salto con todas mis fuerzas, miro con
del lago y cierro los ojos, contengo la respir