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Historia

CapĂ­tulo 7 Bienvenidos...

Palabras:3997    |    Actualizado en: 16/06/2022

ntentando recomponerse del fabuloso p

a sonrisa recostado en el sillĂłn y por unos segu

e. El sitio donde estaban era el living, aunque no podĂ­a determinar porque habĂ­a una tarima en medio

lĂłn en forma de semicĂ­rculo con una gran mesa de vidrio en el que podĂ­an guardarse muchas cosas, por ejemplo un

el medio y modulares con muchas más objetos sexuales. También, se podía apreciar un hermoso y bur

pacio amplio y la verdad

cualquier otro por lo que no en

iesta desagrado en cuan

rendes? – Érik

lugar diferente al que seguramente encontrarĂ­amos en alg

o tenĂ­a nada que ver con lo que tenĂ­an frente a los ojos, por lo que asĂ­ des

da movimiento, mirando su desnudez, deseando volver a tocarla, besa

y por eso está buscando? Y se altera en

gunta desconfiando y asus

– todo p

ezĂł a buscar su ropa que estaba esparcida por todo lo que serĂ­a e

algo? –

. – intento animarse y p

l que hace minutos no más se habían dado un terrible revolcón y como ella no er

unta lo tomo por sorpresa, pero ella no se detendría. - ¡Oh

era una terrib

da pregunta la expresaba con entusiasmo y el que no le respondiera ninguna le hacĂ­a especula

el ojo de los paparazzi y todos los programas de chimentos y Ă©l solo pensar que una grabaciĂłn en un lugar como ese se filtrara a la prensa

almente la tenia, pero para él no contaba ya. - así qué tranquilízate. Simplemente me aterra pens

e todos modos te explico que este sitio en el que estamos

o sabes tanto de este lugar si ni siquiera aparece informaciĂłn

to y pese a tener prohibido contar lo que aquĂ­ dentro suceda, ella lo

¿Y que buscas? –

podría tener algo oculta además de cientos de consoladores en vi

itación, hasta que en la tarima encuentra lo que parece ser un botón que forma parte de la madera y quizás

nta ella sorprendida y

señaló la tarima por lo que inmediatamente se dirig

en detalle el objeto para ver si por casualidad algĂşn otro botĂł

– gritó desbord

como la gran mesa del living se abrieron dejando a dispos

cosa que habĂ­a y podĂ­a usar, en esas un

posiciĂłn una perfecta variedad de productos de Sex Shop nu

una ranura con el costĂł del mismo el cual par

compra usted pasa a

matos tan solo debe pasar las coordenadas impresas en el reverso de la tarjeta de acceso y mediante el lector digital usted va a

orgasmo, les desea el p

tallar en carcajadas por semejante anuncio,. Aunque quié

brazo izquierdo con su mano derecha, cuan

gracia que le habĂ­a provocado que se tuvo que tomar la panza con

lo que podría encontrarse en ese club, jamás imaginó que le ofrecieran filmarse para "recrearse en la intimid

a que se hubieran visto antes, que se hubieran sentido mucho antes de ese momento y no podĂ­a descifrar si, tenĂ­a que ver con aquella desconocida con la cual se acost

os. – no me digas que quieres un vídeo de recuerdo.

? – le pregunta serio y

uzándose de brazos. - ¿Por qué o para qué querrías tener un víde

s noches vacías. – dijo acorta

el amor que aun y se empeña por negar y que se lo crean. Ella sabía que su único motivo de estar ahí era para poder disfrutar, sentir la adrenalina de no estar pensa

aciĂłn le hace una propuesta q

n juguete? – y le mues

da para ver qué le ofrecen allí. En silencio observa todo pensando en c

oestim

pezar con aquel. – dice señ

mmm

primer encuentro propiamente sexual entre su amiga y el esposo y morĂ­a por experimentar algo parecido. Santiago no era experto en el tema, y

as, presionando el aparato en su clĂ­toris y viendo

- le pide y él frunce el ceño ¿Que

ntre el orgasmo que la abraza y la risa que

hacia dentro, en tanto su torso se encorva y hunde su cabeza en la almohada. - Mételo, por favor ¡Ohhh siii! - y confiando en sus palabras

o sin antes escupir su vagina y humedecer

epararse dejándole paso a un oscuro y tan deseado camino, repleto de a

a sintiĂł como las vibraciones golpeaban sacudĂ­an sus pared

STADO TODO ESTE TIEMPO?! ¡AHH

culos le dolĂ­an. Definitivamente querĂ­a volver a llenarla, querĂ­a mover su polla den

II mĂ­ enma

ación una gran comedia y claro que está

oja el vibrador y bañarme la mano. ¡Házlo! Empápa mis ganas de meterlo hasta

e a todo aquello que le expresaba sentĂ­a que aĂşn asĂ­ no le era sufic

o mira a los ojos y antes de deci

bles sucio. - admite. - hábl

ches" pien

netraciones fuertes un poco de jalada de cabellos, un "muévete así que me gusta" o quizá "¿

onfiesa y ella pone

continúa haciéndo

azĂłn se sintiĂł humillado e inexperto, de todos mo

encierra con las paredes de su vagina el obj

h, ah

ez. Desea pasar su hĂşmeda lengua po

. . . Ahhh

ra ser la primera vez, estaba aguantando por mucho las ganas de que la penetre con mucha fue

on unos amigos en una pelĂ­cula condicionada por lo que la dejĂł en la ca

te vayas. – le dice a mod

ir muy lejos. – respon

Ă­ como una prenda interior inferior con algo que sobresalĂ­a lo cual supuso

en la ranura. - ¡qué manera de gastar dinero! – se sorprendía

Ăłn habĂ­a lo que parecĂ­a ser unos broches y por la imagen reconociĂł que efectivamente se

y le mostrĂł los objetos que habĂ­a compr

. – le dijo mord

Ăł amarrarla. Luego se sentĂł sobre su regazo y antes de colocarl

sacar su lengua la mir

de lo que puede generar en su cuerpo y lame muy despacio la aureola de sus pechos. – ahhh.

prenda interior mediante un botoncito en la misma, el cual presionĂł

de su rostro, se agarra de los caños que había en la pared y en cuanto puso su miem

moviéndose como un loco, tocando con la punta

boca en tanto el cuerpo de esa mujer era pura gela

ro, a

ro, a

a, la

lo degusta

umento, el calor los con

de las piernas de ella se podĂ­a ver y sentir cuan mojada habĂ­a dejado no solo la tela fi

ganta ella se lo ha tomado todo, sin dejar una gota fuera, pero otras tantas, a Santiago le gustaba v

Me apasiona que me some

uerpo y dentro de su boca, comienza a desamarrarla para caer rendidos uno al lado del otr

, el solo carcajea. – te gustó dominarme ¿verdad

le hace una pregunta un tanto incómoda que no le irá a responder. - ¿te pu

haber metido la pata con la misma

rutando de su apasionada y caliente compañía lo cierto es que era demasiado tarde y a las 8:00 a.m. Ezequiel le tr

omisos. – y se pone de pie para

pero ÂżdĂłnde vas? - ella sin voltearse le contesta, pe

baña

no podremos vernos cara a cara y podre acariciar tu espalda, besarte el cuello mientras te recorro el cuerpo con mis manos. - Erika sonrĂ­e y acepta, pero siempre y cuando la deje entrar

de terminar la frase, Ă©l ya es

us hombros y ella cierra sus ojos para sentir la suavidad de su

ue podĂ­a olerse era el perfume del jabĂłn que

– dice y be

ué? – está

onríe sin decirle que ella también la pasó muy bi

e nada, en

podĂ­a sentir su tacto en su desnudez y su piel se le estremecĂ­a,

dan en sus posiciones y lugar cuando la

emor Âży si acaso es algĂşn conocido? Âżsi se trata de el amigo de alguien que la conoce? Âżsi es amigo de Santino? No. no tanto por Ă©l, sino por ella que no quiere que sepan

ltima nota y resultas ser alguien importante. – dice iróni

aquí queda todo? –

todo. Tengo q

termines de alistarte –

ro que no estes en la

egio de verte desnuda por

ada al respecto, tan solo le da una nalgueada y s

a que no tengas problema al salir. Espero vol

opa acomodada sobre el sillĂłn y su cartera sobre el mism

dos, le propongo seguir disfrutándonos en el anonimato de nue

y besa el papelito justo antes de

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Contenido

Capítulo 1 Tiempo atrás (Parte 1) Capítulo 2 Tiempo atrás (Parte 2) Capítulo 3 Una invitación interesante. Capítulo 4 Una invitación interesante (Parte 2) Capítulo 5 El evento. Capítulo 6 Extasiados. Capítulo 7 Bienvenidos... Capítulo 8 La desición. Capítulo 9 En su lugar. Capítulo 10 Calientes. Capítulo 11 Entrevista de trabajo.
CapĂ­tulo 12 Bienvenida a mi empresa
CapĂ­tulo 13 Placeres de noche.
CapĂ­tulo 14 Juguemos
CapĂ­tulo 15 Saber de ti.
CapĂ­tulo 16 ÂżCoincidencias
CapĂ­tulo 17 Cuerpos que arden.
CapĂ­tulo 18 La persona menos pensada.
CapĂ­tulo 19 Hablemos.
CapĂ­tulo 20 TĂłmame.
CapĂ­tulo 21 ConfusiĂłn.
CapĂ­tulo 22 El regalo.
CapĂ­tulo 23 Palabras que hieren.
CapĂ­tulo 24 ÂżUna propuesta indecente
CapĂ­tulo 25 Placeres descontrolados (Parte 1)
CapĂ­tulo 26 Placeres descontrolados (Parte 2)
CapĂ­tulo 27 Placeres descontrolados (Parte 3)
CapĂ­tulo 28 Fin del misterio.
CapĂ­tulo 29 La revelaciĂłn. (Parte 1)
CapĂ­tulo 30 La revelaciĂłn (Parte 2)
CapĂ­tulo 31 No puede ser.
CapĂ­tulo 32 Unas disculpas mojadas (Parte 1)
CapĂ­tulo 33 Unas disculpas mojadas (Parte 2)
CapĂ­tulo 34 Celos que matan.
CapĂ­tulo 35 La video llamada caliente.
CapĂ­tulo 36 Lascivos (Parte 1)
CapĂ­tulo 37 Lascivos (Parte 2)
Capítulo 38 Es más que sexo.
Capítulo 39 ¿Qué lugar tengo en tu vida
CapĂ­tulo 40 Tu amante.
CapĂ­tulo 41 Morbosa fantasĂ­a (Parte 1)
CapĂ­tulo 42 Morbosa fantasĂ­a (Parte 2)
CapĂ­tulo 43 Denigrada y Ultrajada.
CapĂ­tulo 44 Culpa
Capítulo 45 Una conexión extraña.
CapĂ­tulo 46 Es tu hijo.
CapĂ­tulo 47 Siendo sincera.
CapĂ­tulo 48 Siendo sincera (Parte 2)
Capítulo 49 ¡ES MÍ HIJO!
Capítulo 50 ¿De qué familia me hablas
Capítulo 51 ¡YO NO TE AMO!
CapĂ­tulo 52 Amenaza.
CapĂ­tulo 53 Necesitas ayuda.
CapĂ­tulo 54 Volver a empezar.
CapĂ­tulo 55 Viciosos.
CapĂ­tulo 56 Que comience la aventura.
CapĂ­tulo 57 Adictos y Perversos 1
CapĂ­tulo 58 En Familia.
CapĂ­tulo 59 TĂłmeme examen, profe.
CapĂ­tulo 60 TĂłmeme examen, profe. (Parte 2)
CapĂ­tulo 61 Esto es una guerra
CapĂ­tulo 62 Esto es incĂłmodo
Capítulo 63 ¡NO ME DAS MI LUGAR!
CapĂ­tulo 64 Por Ăşltima vez.
CapĂ­tulo 65 Ilusiones rotas.
CapĂ­tulo 66 Aquella fotografĂ­a (Parte 1)
CapĂ­tulo 67 Aquella fotografĂ­a (Parte 2)
CapĂ­tulo 68 Siempre he sido la otra para ti. (Parte 1)
CapĂ­tulo 69 Siempre he sido la otra para ti. (Parte 2)
CapĂ­tulo 70 Un completo caos.
CapĂ­tulo 71 Lo nuestro no funcionĂł.
CapĂ­tulo 72 Sin compromisos sentimentales.
Capítulo 73 ¡NO SOY TUYA!
CapĂ­tulo 74 En cama de otra.
CapĂ­tulo 75 Amenazas.
CapĂ­tulo 76 Eres mĂ­a.
CapĂ­tulo 77 Liberame de esta tortura
CapĂ­tulo 78 Sigues siendo mĂ­a.
CapĂ­tulo 79 Pensando en Ă©l
CapĂ­tulo 80 Las cosas como deben ser.
CapĂ­tulo 81 Esa conexiĂłn que no se puede explicar
CapĂ­tulo 82 Hirviendo de ganas.
CapĂ­tulo 83 Al fin libre.
Capítulo 84 A la voluntad de usted, señor.
Capítulo 85 A sus órdenes, mi señor.
Capítulo 86 ¿Te querés casar conmigo
CapĂ­tulo 87 Hasta el fin del mundo contigo.
CapĂ­tulo 88 Un bonito cielo azul.
CapĂ­tulo 89 Abrazando el infinito
CapĂ­tulo 90 En el Sex Shop
CapĂ­tulo 91 . En el Sex Shop (Parte 2)
CapĂ­tulo 92 Consejos.
Capítulo 93 Placer..., placer... y más placer.
CapĂ­tulo 94 ÂżMe eliges
Capítulo 95 Romántico
Capítulo 96 Romántico (Parte 2)
CapĂ­tulo 97 Mini vacaciones.
CapĂ­tulo 98 Noche caliente
CapĂ­tulo 99 Noche caliente (Parte 2)
CapĂ­tulo 100 Repentino deseo.
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