s eran importantes para la comunicación. Así que cuando ella empezó hablar en medio de e
s decido que nos c
nriente y feliz. Aunque observe la duda de su rostro, y me
prácticamen
s que vas m
«¿Acaso era la única que se daba cuenta de lo rápido que iba todo?». Creí que iban a casarse en un año, como mínimo. O sea, despu
no le preocupaba esto. Y es que, si nos poníamos a pensar fríamente, era muy poco tiempo. Digo, apenas hace tres me
en sí. No sé, sí eran ellos los que estaban lo
demos...-. empezó a decir mi madre con desilu
uiero mudarme a ningún
futuro hasta que lo mencioné. Mudanza. Fue cuando se mi
Ellos entienden que nosotras estamos más cómodas aquí y como ustedes ya están grandes para cuidarse-su voz se oía aliviada, pero yo estaba de lejos de eso-. Hemo
go, Julián contesto lo c
no somos unos niños. Sabemos cuidarnos bien, y sobre la cas
ldi
to, y no me quedo otra alternativa más que asentir, y no decir nada de lo que pen
costar. -expliqué cuándo me vio c
mportaba ser maleducada, esta
amor. Adelante.
entía la mirada de una persona que no deseaba ver a me
, dos sema
sistir todo ése t
.
, me deshice del estúp
de iba ahí estaba él, y su estúpida sonrisa. Esa qué me daba ganas de golpear hasta el cansancio. Aun así, con to
Horacio, el novio de mi madre, y el mismo que le ha pedido matrimonio esta noche. El segundo que ese evento catastrófico se llevaría acab
acer nada. Algo era seguro, eso iba a ser un desastre
que quería hacer era dormir,
no estaba, pero para mí mala suerte soñé cuando lo
dejaba caer en su casillero. Su sonrisa era de ensueño, co
í div
así que, por lo mismo se consideraba como un evento sorprendente, pues no había muchos chicos nuevos.
gulado. La volteé a ver, extrañada por el sonido que había salido de su boca. Fue cuando me di cuenta de que miraba algo detrás de mí, y su expres
nó y giré lentam
yo misma sabía que estaba. El chico con cabello rubio dio un pasó en mi dirección y mi respiración se atascó. Pues los rumores e Itzel habían tenido razón. Él era atractivo. En demasía. Lo peor de todo era esa mirada ar
rigía mi mejor amiga. Me ruboricé. Pues había una razón para eso. Itzel era la hermana mel
escaro total. Ella colocó una mano en su pecho mientras le decía algo en su oído. Sin embargo, Julián no la volt
apoyada en mi casillero porque
s-comentó él en voz alta, mirándome con
se alejó de él
ario parecía más para mí, que para el chi
rme, y yo no podía dejar de verlo. Fue en ese mom
ir, cuando el chico nuevo
uen rato, búscame. Ni siquiera me
miré irse, sorprendida aun no de lo que hab
una zorr
verla d
? ¿Por
riosa mientras movía sus manos. Lo pensé por un momento y me di cuenta que tal vez tenía razón en lo
, no es mi culpa que ése
er consciente de mi
una puta. - fue lo último que dijo antes de irse f
ue el chico nuevo
habló. Así que cuando me vine a dar cuenta, Louis estaba terminando conmigo. Diciendo que era una puta en voz alta para que todos lo escucharán. Y después alejándose por la entr
escaradas...-su aliento me hizo e
hico
i cuerpo, empecé a sentir eso que no debía de
o de mi oreja, y pude sentir como me saboreaba mi cuello con su lengua. Esto estaba tan mal, pero no evito que
también registré las pal
pósito-afirmé. O
pero sabía que se lo diría a tu ex por venganza. Los celos de u
e alejé de golpe de Julián, para poder girar y darle una cacheta
qué f
a que me mani
lo h
o que lo
as chicas más fáciles del colegio, pero él ni siquiera las
stas eres tú
lestaba, no, todo d
lo h
aré, y gritar
do retando hasta
u consejo
tanto como entender que
sabes mi
gunta, y sonr
ntinuó-. Te lo digo para que puedas usarlo est
l; pero Julián se fue con una sonrisa hacia donde le había indicado ante
ota, sin d
de podría parar un taxi e irme a casa; pero no contaba co
sonrió. Todo eso mientr
ó con su rostro enterrado
iot
e a mi casa. Y en todo el camino, rememore lo que había pasado ese d
a con él. Cada vez que me negaba, me mostraba quien sería mi remplazo.
dispuesta a s
omento, ni