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e ayer cuando recibí la llamada de la empresa y justo ahora estoy frente a los malditos hijos del Dios Zeus, p
n ambos hermanos, ¡pero es que hasta empapada estoy de solo verlos! ¡En definitiva, soy una p
ierda! Es cierto, Arturo. Borro rápidamente los pensamientos que posiblemente nublarían mi razón si no los hubier
ue tengo frente a mí. Jamás hubiera imaginado que iba a conocer hoy no a uno, sino a dos
donde Ela al igual que Raúl, hicieron de las suyas ligando con todo aquel que se les cruzaba en la pista d
stoy entusiasmado con tu ingreso porque me encantan tus ideas frescas, eres joven y muy talentosa, así que tengo mucha fe en que harás u
recorrido, papá -se apresu
uedo asombrada. Esto
o en acompañarla, por eso me tomé e
na cálida bienvenida a la persona que ayudará al crecimiento
me apresur
no que existen personas capaces de hacer mejores cosas que yo y además que forman parte de un pilar fundamental dentro de la organiza
as con ello. Andreas, ¿gustas a
placer
n, enton
por su lado y me dirija a la puerta, mie
mpresa anterior era el personal de captación, estaba encargado de hacer los recorridos y presentaciones, no el C.E.O., al
fono interrumpe la conversación que estába
bo atender -co
y lo vemos apartarse un po
moto, ¿eh? -i
nr
iento que son versátiles y có
subido a un
si te animas. Juro que manejo muy bien. -rio
mos el recorrido para despu
trata? -preg
cúpate de esto y lu
eo mejor me doy cuenta de que Brant es mucho más alto que Andreas. Ciertamente, el par
to podamos conocernos un poco más. -comenta, al m
mismo digo -susurro en voz
ensor y marca
e la subida en moto -ro
a estar de bocazas. Es imposible que un sujeto como él se suba a mi moto, creo que no podría manejar. Su cercanía
*
an los hermanos Zlemberger cada vez que los veo. Cuando no es Brant
do. Ha sido una jornada extenuante de trabajo y ya quedé con los chicos en vernos esta noche; iremos a un lugar diferente, el cual tenemos tiemp
ro en él. Marco el sótano porque allí es donde se encuentra mi moto, llegamos a la planta baja y cuando to