ta
an los hermanos Zlemberger cada vez que los veo. Cuando no es Brant
do. Ha sido una jornada extenuante de trabajo y ya quedé con los chicos en vernos esta noche; iremos a un lugar diferente, el cual tenemos tiemp
ro en él. Marco el sótano porque allí es donde se encuentra mi moto, llegamos a la planta baja y cuando to
cucharte justo en est
tanto mi voz te hubiera l
do, para la próxima
, nena. Tú eres m
.. Tú lo eres
ue en pie la sa
r mí a casa? -pregunto justo cuando el ascensor se detiene en el sótano. Salgo y camino h
luego buscaremos a
i
s así -rega
s, Aitana, d
ím
ea te espero a las
fect
bolsillo. Cuando estoy por colocarme
ingo porque no tenía idea de que alguien más estaba
ver a Andreas con su mandíbula cuadrada. Su pregunta me toma por sorpre
extrañez de este encuentro-. Efectivamente, saldré est
rajos le importa a él lo que vaya a hacer o no. Pero como no quiero ser t
y quién para juzgart
que te lo estás tomando personal. Las cosas no son todo el tiempo como las imaginas», comenta mi subconscient
bas?», pienso. Respiro profundo y boto el aire retenido. No dejaré que este momento incómodo y extraño entorpezca mi salida. ¿Cuándo dejará de afect
onamiento con la mente dándome mil vueltas. No entiendo lo que acaba de ocurrir y tampoco creo q
de un vestido corto de color blanco, se verá genial con mis... El sonido de mi móvil
ido -
¿Ya estás en
egue ha
-inquiere e
para salir c
al y, ¿a
club, no l
de regresar temprano, no me gusta
cuidarme sola, no t
ejo para que termines tus
o. Hoy no toleraré malas vibra
para amargarme el rato o incluso incomodarme. Lleva días buscándome la vuelta en todo lo que hago, no entiend
da, Raúl se encuentra en la puerta buscándome. Nos
fotos y subirlas a nuestro estado de WhatsApp. Llegamos al lugar y Raúl
i alrededor, emocionada. ¡No
comento en voz alta
será nuestra primera vez aquí... M
lo que veo -escucho una v
este hombre aquí? Hasta puedo pensar que está siguiéndome, e