gimnasio, una ducha fría para refrescarme y todo antes de las siete y media de la mañana. Subí los peldaños de la residencia de mi hermana de dos en dos, n
piernas largas, sexy y húmeda. Justo mi tipo. Me sonrisa se ladea como si tuviese vida propia, pero cuando miro el reloj veo que no tendré ti
o no por eso podía evitar querer protegerla en todo momento. Así que vivir con ella en la misma casa y tener que ver al tipo que acabase de
die en su cama, aunque eso sería realmente una sorpresa, mi hermana jamás llevaba a ningún chico a su habitación. Megan estaba dormida acurruc
o a su lado y ella s
clases. No, rectifico, tú llegarás tarde al primer día de clases, porque como no estés l
añado me dio risa. Ella era un desastre en las mañanas. La amenacé con
é f
menos conmigo. Después de tantos años compartiendo la misma casa, sabía que era bastante capaz d
r mi teléfono mient
mi mente con victori
sas esperanzas a pesar de que siempre dejaba claro lo que buscaba en ella: buen sexo; y lo que no esp
y le pregunté por ella a Megan. Mi hermana siempre estaba dispuesta a ayudarme
onde quisiera. Megan es mi mejor amiga, así nos criamos y fue lo que nos mantuvo cuerdos durante todo el divorcio de nuestros padres. El
uel golpe que se dio en su frente y de donde manaba el líquido carmesí, que se mezcló con su rubio cabello y
lla estuviese detrás del volante otra vez, no porque fuese mala conductora, sino
como me nacier
que le respondas los men
, cuando se me p
io, no me importa lo que
mó puta
r estando con tantos chicos solo por sexo. No es lo mismo a como
no puede deci
es, Ry -me recordó una vez más,
adre. Para cuando Megs bajó del automóvil ya llevaba dos botones menos sueltos en su camisa y mostraba un poco su s
enviar un mensaje a todos los nuevos. Ella es mi herman
in excepción me miraban de arriba abajo con lasciva. Yo me fijaba era en las presas nuevas, sin embargo a todas les sonreí, no me gustab
e veinte chicos y chicas esperando ser atendidos que me hizo exasperar. Nos colocamos hasta el final pero miraba pasar el segund
o bastante agobiada. Debía reconocerle que tecleaba con rapidez y que no parecía estar perdiendo el tiempo. Algunos d
jodidament
necesitaría también de su ayuda
le susurré mientras yo c
y guiñar con picardía. Mi sonrisa se
is músculos para que lucieran un poco más g
a sonrisa torcida mientras l
eó mientras sus me
pero me urge llegar a clases y esta fila es muy larga.
, era de las que mi cercanía les quitaba
llegar a clases, no son ni las nueve de la mañana y estoy agotado y de verdad te agradecería si
a en su rostro por mi última frase. Se tenía que estar imaginando las for
te
-su cara no podía estar más roja
ome más hacia ella para que mi aliento me
Era atractiva, con rasgos delicados y me apostaba lo que no tenía, que
Alejandro Hott
alzó sus ojos agregué-, te ves linda cua
jas con los horarios y le dediqué unas sinceras gracias con un guiño. Separé el q
o y la arrastré fuera de la oficina mientras miraba el reloj. Podía hacerlo, si Megan corriese un poco más, llegaría a tiempo. Apr
menos que quería era pasar el primer día de clases
ible, si ella había desplegado su magia, imposible que él se resis
Me reí en mi mente por su semblante desconcertado mi
, apenas maquillada y en definitiva nueva. Le hice señas a mi hermana y me volteé a darle la bi
será
inmediata. Cuando terminó la clase de literatura y la de historia, Megan se despidió de mí, iría a la
manos con varios de los chicos de cara conocida, y p
on excesiva fuerza nuestras manos y dándonos un
én ay
asando al lado de Taylor, este giró s
ios records TayTay, cuat
rena responsable se alejaba con grandes zancadas furios
so me lo
ses y ya tienes una conquista y una bofetada en el mismo minuto. -Lo tomé por sus hom
rena que me invitó a pasar las vacaciones
m -a
e lo que hace, que te lo digo yo, practicó gimnasia en el inst
esos detal
obrenombre y me estaba dedicando una s
aché la última noche y desperté en la cama con una d
normal que estas cosas le pasaran a Taylor, o mej
ue hablábamos, que me diera los detalles innecesarios de sus compañeras. Apreciaba mucho a mi amigo, no mentiría lo quería, pero odiaba que no tuviese reparo en cr
se estamparon con los míos mientras unas manos me seguían sujetando con fuerza y posesión de mi camisa. Abrí los ojos y pude ver lo sufic
los descubiertos. Mi desconocida llevaba un vestido bastante corto que me sacó una sonrisa en sus labios. Cuando me dio el primer mordisco comencé a perder los estri
nqué los dientes en su hombro cuand
Ryan!
n
ial idea y como consecuencia se volvió psicópata, buscándome, llamándome, persiguiéndome y ¿cómo no? Asaltándome en medio del pasil
vez con ella desapareció. Gemí en su boca restregándome en su mano y en su muslo. Sus gemidos y suspiros m
rodeaba la cintura con sus piernas. Cuando comencé a subirle el vestido la voz de Ric
ón. Cuando por fin alcancé mi teléfono tenía un mensaje de Megan con dos palabras "S.O.S. Cafetería". Comprobé la hora y era de hace apen
es mi hermana -le
s manos que querían enredarse en mi cuello y sin esper
legar a su lado, con mi corazón martillando con fuer
ue me iba acercando la noté ilesa así que mi tensión desapareció, pero lucía agobiada
, profundicemos en las causales de infartos. En cualquierncia -aseguró
unté comenzando a cont
edó Matemática 1, y ahora
abierta cua
las calificaciones por el portal
materias que me preocupaban. Ma
no revisaste matemáticas s
manos y pude ver como s
an estúpida. Pensé que me habí
cuatro días a la semana matemáticas, creo que ya tendría
des hacer más nada, solo d
mbas con un porcentaje mayor de se
es por lo que repetir
*
era un entrenador certificado, pero todo el tiempo que pasaba en el gimnasio y después de tanto tiempo, me sabía las rutinas que debía ejecutar
ante de mí era solo un valor agrega
entrenar, que ya me estaba
cuarenta, que no lucía de su edad sino mucho menor y se comportaba como una adolescente, e
úmero -Olivia lanzaba otra vez uno de sus múltiples r
na amigas entre sí y más de una vez me habían sugeri
me caía de maravillas, no quería perderlo. Sin embargo, les co
emos con un poco de cardio y l
caminé hasta los baños
i horario ya no me lo permites. ¿Te interesa? -me pr
edo organizar el horar
chica que estaba requiriendo de mis servicios. Era alta, bastante esbelt
embargo ella no se comportaba como una mujer de semejante belleza. La llevé
lo mío, Ryan -Maricela rio fa
antes de r
a tuyo, solo me tiene a mí pa
e recompuso y siguió en sus ejercicios. No
tenezco a ni