GG
s de las cortinas colgadas en mi habitación. Me doy la vuelta en la cama, c
de
s y me apresuro hacia el baño conectado a mi
a-, b
ara abrir el agua de mi ducha. El sonido de los
tanto. Miro fijamente mi reflejo y me fijo en la alta pelirroja que
erta para tu trabajo. Es tu primer d
no irradiaba más que paz y confort. Tenía que ser la persona más cariñosa y sin prejuicios del mundo. También
cupo la pasta de dientes de mi boca en el fregadero,
sacude y me dice buena suerte
o que me agobia. Me siento culpable por haberle mentido sobre lo que hacía para ganarme la vida, pero es lo mejor. Lo único que sabe de este trabajo
or hueso que deja ver mis curvas sin ser demasiado escandaloso, ya que trabajo en u
por la frustración. Sin embargo, no tengo la oportunidad de hacerlo porque mi teléfono vuelve a vibrar en la madera. Me tom
en el altavoz para poder planch
el Starbucks, Maggie-, despotrica. Pude esc
y cogiendo mis lla
iezo a maquillarme. Algo sencillo, sombra de ojos marrón
pude escuchar cóm
Mierda.
Vuelvo a mirar la hora en mi teléfono y me quedan veinte minutos
e abofetea en la cara en cuanto abro la puerta de mi complejo de apartame
suspiro mientras me apres
la ayudé a asistir. No salió tan bien como estaba previsto pero lo solucionamos y desde e
las múltiples ventanas alrededor iluminaban toda la zona, el suelo es de un p
e en mi antiguo trabajo, pero este era un lugar nuevo con gente nueva a la que te
onfianza coincidiera con la mía, era genial ver que las mujeres se valoraban a sí m
oleta Smith, estamos aquí para conocer al agente T
a la pantalla de su ordenador. Los chasquidos proce
sa apretada como la perra amar
ta treinta. La llamaré para avisarle de que pronto est
os dirigimos por el pasi
se cierran las puertas del ascensor. Miro fija
én-, resp
mi antiguo jefe. Estaba llena de informa
cayó cuando el ascensor se niveló y pude escuchar nuestra