rior llegaron como una avalancha a mi mente cuando vi al hombre dormido a mi lado en la cama, su rostro tenía una expresión de completa paz, sentí mis mejillas calentar, ne
xtrañamente salvaje, Caroline iba a pedirme una imagen luego de que le contara lo sucedido... por qué iba a contárselo, era mi mejor amiga... mi hermana en realidad. Saqué mi móvil y le tomé una fotografía rápida, quise tocar su cabello, anoche también había sentido el impulso de tocarlo, pero incluso ahora, me parecía ambicioso. Tome mi enorme mochila de viaje y salí de la car
solo la sede central de la ONU conoce los nombres de los doctores en los equipos- Espero que haya disfrutado el tiempo aquí con nosotros. - dijo con su particular sonrisa- siempre es bueno contar con su ayuda cada año -dijo el hombre, - yo ... -se aclaró
la caridad.- dije tranquilamente, pues era verdad, amaba a Caroline y por eso estaba ahí, pero el resto de mis tiempos libres
a hacia su rostro, sus ojos algo apagados, una sonrisa
uriosidad con la que me miraba siempre. - anoche se metió un hombre herido en mi tienda.- abrió los ojos como platos.- le he pu
avisaste anoche?- pregunt
debido al orgasmo, pero bueno, no pensaba darle esa información, hasta yo entendía
nada de él, algo en mi interior se removió incómodo, tenía el impulso de volver a la tienda y despertarlo solo para saber a
a demasiadas deficiencias emocionales, razón por la cual sigo sin buscar una relación a largo plazo. Erick río y levanté la vista, acarició m
inalmente al coche, el conductor comenzó a andar rumbo al aeropuerto y yo saqué mi t
Ca
ojos, la herida en mi abdomen aún dolía y los puntos tiraban, pero e
r casi me matas del maldito susto. - se quejó -¿Necesi
ser secuestrado por un taxista del hotel. - me queje
, aquel taxi no tenía que ver con el hotel, la recepcionista que te atendió está siend
conocerla más, su sabor aún persistía en mis labios, menta y miel, la suave textura de su carne hacía que mis dedos cosquillaran en su recuerdo. - vamos. - dije finalmente y lentamente me puse de pi
e clavó en él ¿Irse?.. ¿A dónde?... ¿Por qué?...¿Por cuánto tiempo? Todas aquellas preguntas
pedirme de l
ló el doct
ersonales. - dije con tranquilidad, William simplemente me miraba, c
o la directiva de esta campaña sabe los datos reales del personal, por lo cual, Lily ni siquiera podría ser su nombre -señaló con una particular resignación... ¡
olverá?, me gustaría
ayer, hoy se marchaba, la recogieron pasada las cinco de la mañana, viene todos los años desde hace seis años. - señ
seen ninguna forma de contactarla.
una sola palabra más... ¿Por qué se había ido así?, ¿Tan mala impresión le quedó de nuestra noche que se había largado
espués subió Wi
preguntó mi correcto herm
nté, en cambio. Él guardó silencio unos se
ué puedo hacer.
aci