jos mojados. tal v
s nos quedamos calladas. Yo y Adina mirándonos a los ojos, como si en cualquier momento fuéramos a saltar la una a la otra - Sara...-ella continú
y ya vimos que nos delató, dijo que Sara era virgen e hizo las cosas aún peor para ella. Podríamos arreglarlo abajo, no
ntar este plan ridículo. La primera noche de ustedes será subastada, lo que pone el precio más alto lleva. Usted será más caro -dice tod
entonces? - ¿Debería darte las gr
r el mínimo respeto de ellos aquí. Su virginidad revelada no es nada
o imaginar que todo lo que ustedes han pasa
tina con una mirada mortal-Usted no es capaz de al menos imaginar - ell
amiga cuando llegamos,de quien nos va a ayudar,hace diversas preguntas porque fue lo que le enseñaron a hacer, dado que ellos saben que si ellos mismos nos pre
te el patrón de belleza de los hombres aquí de México. Con cejas gruesas y barba cerrada. Pero no parecía una buena persona, y estaba usando los ojos
que tenemos aquí - él nos analiza a mí y a Sara de pies a cabeza. - Bellas novatas. -
onde a la
quieren cambiar nuestro nombre, tal vez alguno que tiene más que ver
o que es un hombre peligroso en este negocio de tráfico humano, tal vez más que l
con ojos Mals. No necesito fingir que me
ta mirándome con libertinaje. - Ese tenemos que cambiar con certeza absoluta. Las santas son sagradas para los mexicanos, tal ve
con libertinaje , claro. - Ya que aquí no so
uillándome con mi demostración de amabilidad y simpatía toda mi repugnancia por ese hombre. - ¿Cómo q
n mucha
más fácil. - volvió a analizar a todas las chicas. La mirada de Alejandro estaba en Carmen, y no lo sé, pero creo que había algo en sus ojos. Estábam
nta, de nuevo con una sonrisa t
upe: C
y firme. Yo traigo a seco el tiempo en que me quedo retraída. la quietud incómoda de todas las chicas era aún más desagr
- me pongo muy puta, muy puta porque eso es algo que realmente él tiene razón y me molesta,mis tetas más parecen de los limones y yo no sigo ni un poco el patrón de belleza de las italianas. Que estas además de altas y bien delgadas, se compone también de pecho
a aún no deja de reírse de sus chistes tontos en el momento en que yo me estaba agarrando al máximo para no ofenderlo igualme