o

lo que po

e este dios gr

la vida para tener el privilegio

da musculatura, y su rostro. Es simplemente perfecto. Son l

intió el exquisito aroma del perfume que llevaba puesto. La combinación de

e, ella quería tocar a ese hombre, besarlo, verlo sin cam

su última ráfaga

ar que entres sola. En realidad, pensaba ir por ti,

sonaba mejor a confesarle que tenía dudas de que real

poseedor de uno de los mejores recintos de la ciudad, estaba considerado como el hotel más lujoso del país. Isabel

confianza de la chica - No tengo mucha experiencia en T

atrevió a ser honesta con él - Pero quizá t

rma de pensar. ¿

osa de tu b

tuvieron en su mesa una botella de vino blanco. Ella imaginaba lo bien que sabría el vino en la boca de Edward, mientras la obliga

gó a no ahogarse con el vino, este hombre era

o, le faltaba un año para graduarse, pero, técnicamente lo era-

desbordar la misma emoción que Isabe

la haciéndolo reír- Es trabajos

obre anécdotas del trabajo o la universidad. Sus proyectos, campañas y pl

osa, radiante y que era mucho menor que él, y lo único que ha hecho durante la mayor parte

lo era hermoso y atractivo, sino que además tenía la misma pasión que ella por su trabajo. E

e encantaría volver a ver, sin embargo, era consciente de las reglas del ac

animó a que le cuestione sin pena- Sabes mi edad ¿cierto?- ella asintió e intuyó p

i padre, pero, creo que es por las mismas razones

dward era un poco más profunda, e Isabella p

ocionante - respondió ella- Al menos

su mejilla- ¿Puedo besarte?- preguntó mirando los labios de ella- Perdón s

digas eso - susurró antes de que el ma

esó de manera delicada, pero también firme. Sostuvo el rostro de Edward con sus manos para darle más profundida

etamente segura. Mientras Edward la besó sintió pequeñas contracci

or un si

ón? - Volvió a hablar él- No quiero

an tierno y calie

resionada Edward- respondió con fr

ente y ella asintió gustosa

un vistazo rápido a su celular. ¿La una de la mañana? ¿Realmente ha hablado con

es de S

mo

porque no responde

vísame bebé,

revisas tu puto c

der a S

é hora llegaré a casa, per

je de

rra! Disfruta

ercaba a ella. Tomó su mano y se dirigieron hacia el ascensor. Isabella sonrió y lo abrazó. Él se sintió marav

s más que Gaby, piensa.

no

9. Edward pasó la tarjeta por el censor de la puerta y se abrió casi de inmediato. H

suyos. Si esta chica seguía así lograría que termine dentro de sus pantalones, ahor

a, y lo hacía sent

se vería aún mejor sin él. Sus brazos eran fornidos y fuertes, llenos de tatuajes, al igual que su abdomen.

top gris que vestía, permitiéndole ve

ta?- le p

enc

ra ti - ­Isabella s

ward bajando sus manos hasta

n la otra pierna, permitiendo que Edward la cargue, podía sentir su erección apr

esos hasta sus senos, los cuales besó por encima de la tela del brasier, ella arqueó un

ver que la chica tenía un tatuaje d

se preocupó al notar que

es una combinación perfecta

do su pezón, Isabella gemía por todo el placer que este hombre le provocaba. Repitió lo mismo

arse y subió la falda que traía la castaña, era cada vez más increíble, besó cuidadosamente sus m

sta, acompañó el ritmo del movimiento de la lengua de él moviendo sus caderas, hasta que sintió que había metido dos de

rca - le avisó gimiendo

muéstrame lo bien que te hago sentir - le pi

estómago, y en pocos segundos tuvo la sensación de estar en el cielo, Edward pudo sent

dward, tuvo algunos problemas para desabrocharlo, pero finalmente pudo hacerlo. Tenerlo frente a ella, vestido sólo con un

ó y Edward obedeció

ayudó a quitarse el bóxer, cerró ligeramente sus ojos al sentir la lengua de la castañ

an querido hacerlo y que Isabella haya tenido la iniciativa era demasiado excitante para él. Sostenía el cabell

dijo mordiendo su labio - Y todavía tengo

iba a abrir cuando sintió que lo abrazaba

abella quitándole el preservativo

eservativo sin mucho esfuerzo y se acomodó entre sus piernas. Co

mover sus caderas encima de él, aumentando cada vez más la velocidad, E

más rápido mientras besaba el cuello de la castaña quien cada vez gemía más fuerte. Edward ja

, cariño?- le preguntó- Mírame bebé, quiero que me mires, me pone demasiado cuando me miras con esa mirada tan caliente que tienes- Isabella lo obedeció y siente que se acercaba a un segundo orgasmo- Me encanta lo apreta

la haciéndolo reír - Por un mo

na, casi

periencia de tener una pareja sexua

ard antes de besarla- iré a

a sido la mejor experiencia sexual de su vida, pero era sólo sexo, por más maravilloso que Edward sea,

en un momento incómodo. Se levantó de la cama y se vistió

r: se había acostado con una chica que era trece años menor que él. Y le hab

iendo a la castaña tan increíble que lo esperaba en la cama. No perdía nada intent

rte, no sé ¿qué crees tú?- esperó unos segundos por una respuesta- ¿Silvana?- preguntó, al no escuchar nada, camin