través de las cortinas blancas del ventanal. Las paredes color crema relucían y los muebles de caoba brillaban a la p
a el viento, perfumaba con una brisa delicada las habitaciones de la residencia O'Donnel, carga
, después de todo, estaba ahí para disfrutar de la tranquilidad, olvidando por una temporada, las tecnologías que ofrece la civilización y aunque
arlett, al verlo, se encogió de hombros, se preguntó si aquel vestido tan escotado podría llamar la atención de Brandon antes de que su madre le llamara para sermonearla, por lo usual,
lanie que él deseara, pero tampoco sospechaba que sus padre lo estuviesen obligando a contraer matrimonio con ella, solo por la fortuna de su familia, ellos no eran así por lo que debia haber otra razón, una que no lograba averiguar por más que lo pensara, así que decidió por sí misma ave
erano al conocer a Melanie, pero aunque era hermoso y apropiado, tal y como le gustaban a su madre, Melanie lo reconocería y al menos hasta averiguar que era lo que estaba sucediendo en Doce Acres, prefería evitarla a toda costa, no solo porque sentía que se
e se vistió, examinó en el espejo su rostro juvenil, casi como si temiera descubrir en él arrugas o una papada. Quería parecer más dulce y juvenil Melanie, q
va, de hecho le gustaban los colores neutros, colores que combinaban con su ingenua expresión y la ropa que le daba un aire de cole
po que hiciera sentirse acomplejada, de hecho era todo lo contrario, Scarlett confiaba en que era la chica
e fuesen de gran tamaño para obtener la atención de un hombre, ella se consideraba verdaderamente hermosa y no había nadie en la tierra que le hiciera creer lo contrario por mucho que la criticaran, puesto que su madre le había dicho que la critica siempre venía de las personas que le tenían envidia
de su hermana Ashley que parecía un arbol andante, no, su cuerpo era delicado y g