es tienen un blanco indefenso. Cuando se les
qués d
staba dispuesta a olvidarse de su padre. Él era un hombre maravilloso, ella lo recuerda de aquel modo,
imonial, ella estaba recostada de la baranda de la escalera y al ver el rostro de su madre,
ieron hacer nada
uel momento, le dolía su ausencia, no ver su s
una mujer distante y críptica. Y algo en el fondo le decía que su padre habí
su hija, por más que ella hiciera todo lo que estaba en sus manos para brind
el retrato de Anthony,
ro d
rdad eres... -hace una pausa, su móvil suena y ella
e debe regresar al hospital. Toca la puerta un par d
-señala la cama sobre la cual está
e la guardia a una de las enfermeras que no podrá ir hoy. En la nevera dejé
dre en esos instantes, la ha
má! -la abraz
cariño. Nu
. Mientras escucha la puerta de la sala principal cerrarse, se
lix el chico que trabajaba como vigilante en el instituto donde ella estaba estudiando,
ndo estuvieron instalados en aquel lugar y a solas, sin testigos que los observaran, el apuesto joven comenzó a besarla y acariciarla de manera poco sutil; ella
, mi reina. -ella apar
que haces? -preg
no te gust
una semana conversando, es nuestra p
a invitación del chico que te gusta es
o. No soy como el resto
es que hacerte la interesante conmigo, tu
n repulsión, su propia compañera, la qu
lla, yo no pienso esta
o y a pesar de la insistencia de Felix pidiendo qu
s, el destino las había puesto nuevamente juntas, debían estar en la misma empresa y quisieran o no, tenían que olvida
cuyo contenido se iba volviendo cada vez más excitante y explícito en cada cap
ce en uno de sus labios y el anular en el otro, mientras con el dedo medio tanteaba aquel punto rojo especificado en la imagen. Movimientos circulares y lentos com
. Sin darse cuenta ni proponérselo la imagen de su jefe apareció en su mente. Ella apretó sus ojo
le jefe justo cuando estaba masturbándose? ¿Qué era aque