rdemos que aquel robo se realizó, exactamente el día 3 de mayo del año 1999, en horas de la mañana; seamos más específicos, fue una acción tipo comando y contó
camente se podría decir, que fue el líder fundamental de aquella acción, fue asesinado de tres disparos. Debemos acotar, que éste individuo antes de morir y en su desesperad
en su fila izquierda, exactamente al final. (Éste espacio era sumamente estrecho y sólo contaba con dos hileras, siendo la más amplia la del lado derecho) Sé ubicaba la celda # 56, la cuál estaba destinada a ser, por sentencia firme de un juez, la residencia obligada. (As
uación de esas, en pisar un espacio tan deprimente. Era más bien el típico hijo de familia, el orgullo de papá y mamá, la esperanza de su casa, todo eso quedó atrás, solo tenía ese extraño presente. ¡Allí frente a él! Y lo tenía que afrontar. Al llegar a la 56, lo primero que observó. (Nada bueno por cierto) Fue el nefa
té llama
stil. Llevaba implícita sin ninguna dud
ández señor, e
aludido; evitando a toda co
un nuevo nombre basura ¿Entiendes?. Vamos
esta vez los otros presos s
ta, soy e
icaba de algún modo, que el hombrecito era fácil, sumiso,
reloj y vacía tus bol
sin poner objeción alguna; su costoso calzado italiano. (De la afamada firma "
a la cárcel? No, no sabes. ¿Verdad que no? Te lo diré, para qué sepas donde estás parado; no te despojaron absolutamen
y se ubica aparte en una de las esquinas de l
ro que le den la b
alquier lugar era bueno, con tal dé hacer daño, de causar dolor, aquella sucia labor, la hacían en cayapa, disfrutando Eso sí, al máximo y con un placer morboso, su cochina acción; como era lógico esperar, el indefenso muchacho cayó al suelo; entregado como estaba al intenso martirio, allí empezaron las patadas, las cuáles fueron menos que los golpes. (Esto porque ya estaban agotados) Luego de éstas, Tres de ellos procedieron a escupirle, sobre todo en el rostro. (Esto era algo así co
tá el maldito cabron? ¿Qui
a qué buscaba; él se hallaba en el pavimento, casi sin sentido, sin
o quiero que sepas algo. Tu vida será un infierno en esta prisión, de eso nos encargaremos nosotros; ya lo verás pedazo dé mierda y qué no sé té
se, con posible fractura de costilla y múltiples moretones, pero no habló, no lo hizo, guardó silencio, selló sus labios, tal y como lo prometiera, esto para protege