I
¿Qué iba a estar rogando por una follada de él? Estaba idiota si lo creía. No es como si estuviera tan desesperada de su pene. En realidad...Demonios, ¿Por qué tenía que responder mi cuerpo al único tipo que no me deseaba? Lo
mi profesor, y no a otro chico de mi edad. Claro que no era por sus increíbles ojos verdes o por ese cuerpo de infarto que tenía. N
calor en mi rostro. Quizás necesitaba agua fría para despejar la furia y la lujuria. Demonios
omentáneo. Y casi estuve tentada d
n la superficie, alcé la vista y perforé mi reflejó-. Se
un cuando decían que era guapísimo. Dejé que dijeran lo que quisieran. Aunque eso no evitaba sentir curiosidad y un poco de envidia. Porque no quería
o sentía una presión en el pecho, pero no importaba eso, era michí, yo no rogaba por
mi ira. Ese idiota no sabía con quién se metía, le iba a demo
o de Jacky-. Lo siento por eso. Sé lo mucho que te gusta esa clase-finalizó con una mirada de comprensión, y como ella sabía lo mucho qu
l jardín favorito de Mayte que se encontraba un costado del colegio. Para mi mala suerte, no me calmó mucho como a ella, pero no podía hacer nada, tenía que vivir con la frustración. Además, de que tenía otras clases y n
n embargo, Joha tuvo que devolver el favor de forma inmediata cuando Connor apareció de repente y asustó a Albi, y terminó tropezando con sus propi
abía dado a mi profesor de inglés. Estaba por responder, pero me distraje cuando vi a mi profesor de inglés ap
i caminar delante del equipo de futbol rumbo a su auto. Toda u
, ¿nos espera
as? -preguntó Mayte a Jo
hombre al otro lado del estacionamiento. No pude evitar morder mi labio para después chupar de form
r de inglés ni siquiera lo hubiera visto. Pero lo vi, y noté que se detuvo y volteó a ver alrededor del estacionamiento, buscándome tan pronto oyó mi
mas, Michí-amonestó Albina preocupada al ser vista por
a Albina de manera inocente, que no la e
a y me eché a reír. Albi siempre era tan malhumorada, era tan divertido molestarla y decidí continuar con mi de
volteé a ver, retándolas a decir algo que quitará mi diversión. Nadie habló, como sospechaba, y cuando estaba p
no saben que estás jugando y van a pensar que estás dándole la bienvenida a sus atenci
era sido regañada-. Además, el sexo es lo más natural q
en específico. La mayoría de los padres creían que podían moldear a los demás para hacer lo que les plazcan cuando ellos eran unos viles traidores y se acostaban con la hermana de su esposa d
a Joha y asen
mi hombre me está follando duro, no tendría que asustar a nadie. ¿Por qué al hacerlo se ve
nosotras, pero los chicos no te conocen y lo van a tomar de otra
o detuvo la réplica que estaba prep
diverti
de evitarlo, me eché a reír. Y con eso, las chicas
rada indicaba que acababa de hacer alguna traves
a rubia mirándome con diversión ape
gí de h
ho algo-sonreí abiertamente-
ndo sus palabras, y volteó a ver a Joha-. Tu chic
o molesta. Nadie creía su mierda. Pero, aun
é le d
culoso y rubio te recogiera en su auto-Jacky se echó a
te daría l
scará al suicida que t
a preocupada. Todas vimos a Jacky, esperando el remate de
án solo asumió que estaba hablando de otros
hacer Jacky, así que tuve que interve
e diera cuenta de sus propios sentimientos, necesitaba ponerla furiosa y muy celosa-. Me imagino que Julián sabe desvirgar a una chica..
dose de brazos, queriendo no ver al chico que estaba viéndola desde el otro lado
bservé a cierto chico rubio y musc
ga pelinegra había llegado a su límite con mi pro
omenzó a dirigirse a la puerta del copiloto en el auto de Jacky, y cuando vio que nadie
se veía que estaba moles
icas-dije con una son
do distraído viendo a Joha. La cual tamb
ar? -preguntó Mayte a mi lado,
do acepté
ealmente
s obvio que se le mojan
. Pero tampoco puedo decir
s eran demasiado transparentes. Y si podía ser
Jacky cuando Albi se chocó co
tionó la morena casi al borde del pánico. La miré sorprendida y mi atención fue directamente al hombre que me dejaba en el l
r de prisa. No por miedo
y desde adentro del auto, y viéndono
erta y me obligó
ayte viniendo detrás de
o a ese profesor como si lo quisieras...? -Albina se detuvo
Es por qui
cando, es un maestro? -Albina no podía oírse más horrori
larlo-volv
n. No estaba pensando de forma racional, pero cuando el sexo lo habí
lo
stá pr
or
me con seriedad-. Es posible que a él no le digan nada, pero a ti expul
s tan
ré cansada de la conversación. Lo que se sintió extraño, ya que siempre tenía energía para seguir molestando a las chicas. Otra cosa que había cambiado ese
zca-murmuré desanimada-. Además, es demasiado
alir con Matías-sug
a sonrisa maliciosa, y volteando a verla-. Nadie lo sab
tarías metida en
entusiasmo-. Sé que no entiendes lo que siento...espera quizás si lo sientes.
podía ver el sonrojo en sus mejillas, y era tan gracioso, ya que era
ior, sin importarme la mirada irritada de Albina-. El punto es que ese hom
ar tantos detalles-cens
n estar pensando en mis palabras. Buscando los contras. Yo no veía ninguno. Solo los pros. O quizás solo estaba demasiado caliente para pensar en cosas negati
uy mal por
y hablando tan bajo como si hubiera micrófonos en el auto. Se sentía como si fuera un pact
manera t
iso? -pregunté con entusi
te a los ojos-. Pero si sientes que se pone demasiado intenso y necesitas nuestra ayuda, nunca olvides
no podía se
o sabía que no había nada que temer, me había dado cuenta en las dos ocasione