gko
ces... ¿lo pongo?- la pequeña Sunny asintió, kook tomó l
a de mejillas rosas corrió hasta el siguiente pasillo. -!Pap
tel en tu moqueta?- pregunt
S
idió la moqueta en dos unidades. -Ahora... ¿que dices de ir a come
por lo que haría pero no tenía
e oyuelos se adelantó y tomó el carrito algo apresurado. -Buenas tard
con tan estúpido motivo, para qué? solo para llevarla a comer- susurró a los oídos del pelinegro, mientras este mi
l de pelo castaño le observó con cierta impotencia de no poder contradecirle. -Sube cariño... en un reato los alcanzo- l
a que lo podía solucionar despues, lo que si no sabí si
a una mansion y resulta que Jimin a no hacía parte de ninguno de esos lugares... los haía dej
a hacerlo por muy difícil