i mente seguía atrapada en la imagen de esa joven maltratada y del hombre misterioso que la había traído.
área de admisiones. Sandra, una de las enfermeras más amabl
un minuto?" pregunté, t
cesitas?" respondió s
as en el rostro y los brazos. Llegó acompañada por
les. "¿Anoche? No recuerdo a nadie con esas caract
la atendieran de inmediato, y luego desapareció.
stros esta mañana, y no hay na
corriendo los pasillos y preguntando a otros compañeros. Nadie sab
ea de pediatría. Luis era un buen tipo, siempre amable y dispuesto a ayudar. Había
ntó mientras se sentaba f
moviendo el puré de
¿Todo bien e
alherida. La trajo un hombre... un hombre bastante imponente. Pero hoy nadie parece sabe
disimularlo, pero su reacción fue evidente. "¿Qué más da? A
Algo extraño pasó. ¿Sa
do los ojos en su bandeja.
arlo? ¿
jor no hablar. Créeme, no quieres meterte en problemas. Po
is, por favor, dime qué sabes. ¿Quién er
berías preguntar. Mary, escúchame bien. Esto no es algo en lo que debas
hacer? ¿Es
o conocía, parecía asustado. "Más de lo que imaginas. Por favor, hazme caso. Ol
ir, pero la seriedad en su voz me hizo dudar. Había algo osc
e, aunque no tenía ninguna
abía atendido esa mañana. Yo fingí escucharlo, pero mi mente estaba en otro lugar.
ica. Y aunque me aterraba descubrirlo, mi curiosid