los flotantes, el aire olía a especias, alcohol y cuerpos apretados. Era una de esas noc
ente. Él estaba más suelto que nunca, más encantador, más seguro.
calor de su palma, la firmeza de sus dedos, y algo dentro de ella se encendió. No por
rrastró hasta el centro de la plaza, donde el
jo los faroles rojos, entre el olor a
ngo que hacer -s
s se amoldaron a los de ella como si hubieran sido hechos para encontrarse. Su lengua b
a...
s piernas temblaron ligeramente. Sintió cómo su cuerpo respondía, cómo algo húmedo y eléctrico la
te por eso..
sentido. Era que lo que sintió la desbordó. Y no por Aroon. Sino po
labios entreabiertos
baja, con una seguridad
estaba desbocado, y aún sentía la humed
honestidad brutal-. Solo que
mbaleó apenas, como una v
onm
a. No dijo sí. Per
había visto
char. Se detuvo antes de llegar a la plaza, justo cuando el beso ocurrió. No vio el gesto
tenía nombre, porque ni siquiera había promesas aún. Solo m
. Se fue hacia la p
ó, la brisa era más fr
, los brazos apoyados en las rodilla
sentó junto a él, y por un mom
sin que huyas?
ovió, pero su
il
Aroon... me provocó cosas. Mi cue
o, con los ojos
Pe
zo temblar cuando me a
i en sus palabras se
hacemos
nó lentamente hacia él, con una claridad nue
ecto. Solo un fuego lento, urgente. Y en medio del mar y la arena, ella se afe