tate. Gracias por venir a ver cómo estoy. Iba a llamart

ó con precisión practicada y lo colocó en su regazo mientra

Elizabeth e inspirar a sus alumnos convirtió sus clases en una opción sumamente

ura, convirtiendo el acto en sí en una performance artís

a, y Amelia admitió para sí misma que agradecía el apoyo. No

yando las manos sobre el

mpimos hace un tiempo. Todo el fiasco en Nigeria fue prácticamente nuestro fin. É

zabeth, luciendo comp

a hecho ahora. Le di crédito como coinvestigador, por Dios, así que era lógico pensar que no querría hundir algo que lleva su nombre. Además, tie

ibí una oferta de compra de una corporación muy popular. No quería venderla. Su reputación va en contra de todo lo que creo. Obligan a los agricultores a pagarles por el beneficio de cultivar 'sus' cultivos, usan

n que te había ido. Y, lo admito, me alegré de que hubieras roto con ese imbécil dominante. Luego todo se quedó en silenc

«No te preocupes. N

ero Elizabeth no tenía la culpa. Amelia aún no estaba preparada para compartir la

recuencia en los asuntos de Amelia. Elizabeth rara vez se contenía al ofrecer consejos y al presionar a Amelia para qu

entras observaba a Amelia. Tras un largo momento de silencio

n. Ni de lejos. Era controlador, desdeñoso, arrogante, insensible... y, para ser sincera, en r

e lo tiene desborda

ero sí de 35 o 40 años, con experiencia y que sepan lo que quieren. Supongo que tendré que

cir algo pero mantuvo sus l

iera y dividiera las ganancias con él. Incluso involucró al decano Anderson, quien me a

el mundo sobre lo que pasó durante los ensayos. Tengo todo debidamente documentado, pero nadie lo mira. Muestras del producto, análisis de sangre a

lizabeth". ¿Cómo puede El

r prestado más atención a los patrocinadores de su trabajo anterior. Asociarse con grandes empresas agrícolas te da todas las subvenciones que puedas necesitar, pero

una cosa: las ganan

discretamente, el muy cabrón. Ahora que lo pienso, es perfecto para ese tipo de

es un hombre de gran habla y

intento de su amiga de explicar

no tengo ningún problema en vengarme de él. Se lo merece. Listo para la guerra, a

ensa cuando más lo necesitaba. "Oh, eso sería divertido, ¿verdad

n pequeño 'accidente' con mis cubos de pintura la próxima vez que