ra un horario que disfrutara, sabía que debía estar lista. El primer día en Ferrari Hotels no sería como cualquier otro. Era su oportunidad

ahora, por primera vez, tenía la oportunidad de ser algo más que una sombra. Se arregló el cabello castaño claro con pulcritud, poniéndose un vestido negro sen

raba sin cesar, con empleados que se apresuraban hacia adentro, pero ninguno se detenía a mirarla. A Helena no le im

ó profundamente antes de salir y caminar hacia la gran puerta de la oficina de Ricardo. Estaba nerv

ncia era inconfundible: imponente, fría, calculadora. Pero hoy no estaba solo. A su lado, en el escritorio,

Ricardo sin levantar la vis

ficina. Era moderna, lujosa y perfectamente organizada. Todo estaba

evantando los ojos y mirando a Helena con una intensid

lla, intentando control

e forma breve, c

o, Helena. Esto es una prueba. Quiero ver si eres realmente

enzo. Las expectativas de Ricardo Ferrari eran al

todo está interconectado. Si eres capaz de manejar lo sencillo, quizás confíe en ti para lo complicado.

ero no era nueva en ese tipo de situaciones. Había sobreviv

señor -dijo,

s 10:00 am con el equipo de marketing. Te encargarás de coordinar la present

tarea. Sabía que su capacidad para organ

omaba nota en su teléfono móvil, asegurándose de no perder ningún detall

uchas palabras, pero debo ser claro contigo. Aquí no se toleran fallos. No me importa lo que hayas hecho en el p

Él no estaba jugando. Sabía que en este juego, cada movimien

aunque por dentro sentía que

a ordenar algunos papeles. Luego, levantó

Nos vemos a las 2:00 pm para

a la puerta, pero antes de sali

a. Todo lo que hago, lo harás tú también. No hay lugar para equ

se cerró detrás de ella, y por un segundo se permitió respirar. Pero no ha

es a todo lo que había experimentado antes. Y aunque su plan era simple: pasar desapercibida, hacer su trabajo y

keting. Ella, que había sido entrenada para no llamar la atención, ahora debía hacerlo, y de la mejor

icardo se levantó y la mi

Helena no pudo dejar de sentir que esta aprobación tenía un precio. Algo de