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y yo fuimos secuestradas, por desgracia, mi madre no tuvo tanta suerte como yo y falleció ese día, desde entonces mi padre tiene sobre mí un control estricto y casi enfermizo que no me deja respirar, tengo veinte años y nunca he podido salir de casa sin un guardaespaldas, o más bien, un séquito completo de ellos. Desde ir a la escuela, hasta salir al jardín, todo, tengo que hacerlo rodeada de h
entre diciendo en su oficina co
untando las manos frente a su cuerpo y agachando la cabeza, este hombre es aterra
incuenta y cinco años, aunque solo aparenta unos cuarenta. Su tez es pálida como la mía y sus ojos azules
ria, estaba sentado tras el buró leyendo unos papeles,
e espectáculo desagradable?- para el todo l
esperando por ti en casa, pero parece que
darte explicaciones sobr
l punto, me refiero a que quiero tene
scucho- se cr
ersidad- hice una pausa p
prepotente- concéntrate en lo que q
no quiero tener más toda esa seguri
bromeand
spero que me to.es en serio. Ya me cansé de ser el ha
mi techo te retiras por mis normas y no pienso ceder en eso. Eso es lo único que te exijo, vi
niego a seguir e
el tema- regreso las gafas a su rost
forma baja, creo que es ni tan siquiera lo es
es nada, pero me sirve para pagar la universidad. Para mantenerme tendría que trabajar, aunque sea difícil, aunque nunca lo haya hecho tengo que intentarlo. El señor Regí Smith sabría
e más, voy a salir de esta casa y no voy a necesitar de sus servicios- ellos me retu
ión, pero que recuerde que esta por su cuenta- me informó el je
que eso lo sé, no
que me da la sensación de libertad, por primera vez