ABEL
o ver el vehículo, rayos sé que con ellos no se juega me van a matar por la tardanza, sac
en c
ga
se te había olvi
paso rápido y observo que nadie que conozca está cerca para verme, en lo que camino le saco el reverso a mi sudadera
e sacar por la fuerza del in
o me va a costar muy caro con este pa
on un tono de amenaz
– dice una voz
uedo contestar, pues mis pe
NIEL
iempo para salir con Bell, hoy la quise acompañar para dejarla a casa, pero se negó, pero para ser ho
me cuando escucho que suen
mu
estuvo Bell t
su mamá, ella nos lo dijo a tod
ni
il a ¿Qué
mu
onfias en Be
ni
te para no
mu
opinión cuando ve
rle a ese tonto o no decido no abrirlas y salgo de mi cuarto y toco la puerta del cuarto de mi hermana, sale
su cama hay muchas fotografías de todos nosotros de las salidas que hemos tenido durante estos años –
qué? – solo pregunta Daniel me digo a m
ce con tono despreocupado y sin
– y sé que se nota todos m
a foto del legajo que tiene en sus manos – ¿quieres saber?, ¿dónde estuvo?
vo con su mamá o ¿no? – le
en su cuello un signo de su runa favorita que
i garganta tiene un nudo y trago par
– esto no va a ningún lado – tu mejor que nadie lo debe de e
largo y cuando estoy a punto
sus ojos son sinceros y su sonrisa es de alegría – ella elegirá el mom
dude demás, pero no quiero ser de esos chicos que a la primera p
tes la había visto vestida de esa forma, ella no viste de esa manera tiene zapatos altos una falda corta el cabello lo tiene re
e mi edad. Siento como toda mi sangre hierve en ira