obres desperdigados que notificaron todas y cada una de las cuentas por pagar que teníam
atro bloques que me hundan hasta el fo
ados, empecé a ver todo con cierta oscuridad, cierta amargura que no podía asimilar. Una que poco a poco iba redirigida el hombre que apest
o tr
Me llevó a considerar muchas cosas estúpidas. Lastimosamente, no me quedaba tiempo ni de respirar por los dos trabajos en los q
o ni ganas de
ebía esperar por mí o por mamá para hacer lo que siempre hacía: rogar, pedir y largarse. Teníamos un ciclo vicioso, uno horrible. Por ello, me
a la fuerza de su ira, dejó a una comunidad sumergida en las aguas, sin nada de sus pertenecías y con una estela de muertos a su paso, entre el
no salió
ble. Todo fue bien hasta que por las ráfagas de viento, un poste le cayó encima, le golpeó en la cabeza y la corriente violenta de las agua
mos de albergues en albergues en albergues hasta que se nos dio la oportunidad de volver a la zona, en una casa que no era lo que conocía como hogar, sin un hermano, y una crisis econ
e once años, descubrí c
la adolescencia y un hombre discapacitado que al que se le habían apagado las ilusiones. La muje
pida. Sin embargo, jamás perdonaría a mi papá porque se dejó vencer, porque no nos eligió, porque no éramos un
intenté alejar
s opuestos que pude en conseguir en tiempo récord cuando dejé la universidad y me despidieron de mi empleo como camarera. Era un poco j
de una vez por todas
*
e muy pocos tenían. Me recibió de buen humor, y me asignó el área en la que trabajaría ese día: la tercera planta. Respiré profundo y agradecí, las oficinas que ahí funcionaban eran de las sencillas, s
or ella. Así que, con tranquilidad, me puse el uniforme de trabajo, tomé todos los instrumentos de limpieza que necesitaba y subí al ascensor. No era un día de cons
me hizo
lla, por eso dejé de lado todo para menear las caderas bajo el sonido de Take you dance. Nos sincronizamos con facilidad y movernos al
vidiaba un poco su vibra, no era una mujer amargada, en realidad, me gustaba ser espontánea, solo que tenía una mala racha desde que dejé el último año es
ntó una vez que comenz
llega más cansada de lo normal, los dolores de cabe
jero, por lo que sole necesite vitaminas y c
seguramente sería muy costoso. Demasiado para poderlo pag
sacudiendo el polvo de los diplom
oco de ánimo y tal vez una cita. Alguien que te estre
o que
vitar el
na revolcada para que te alineé todos los
es lo que necesito ahora... Es algo para lo que no te
saques vas relajada, aunque lo ideal es que te ponga en todas las posiciones durante todo un fin de semana -dijo subiendo y bajando las cejas con sugerencia-.
todo, sabía dar mamadas, me habían comido el coño, a pesar de que no había sido la mejor experiencia, podía hacer el trabajo manual y hasta dejé que mi exnovio me colocara un c
diferencia de mí, Jenna era abierta a contar sus proezas, yo solía ser completamente discreta.
grac