o Ac

nociste, pero créeme que todo esto lo hago por el bien de ambos. No podré est

tarnos con las mismas confianzas de antes; yo no s

dañar seriamente tu

pción de casarla con otro hombre. Si su padre hubiera conocido sus sentimientos, seguro que nunca le hubiera impu

e nos aseguraremos de que domines las de tu país adoptivo, supongo que debemos actualizar un p

so se podria hacer cargo perfectamente de tus bienes. - Estoy indignada con todos estos comentarios machistas, el parece desconocer todo de mi,

da? -quiso saber lueg

e de mi rostro ; quería adivinar si estaba de acuer

in dejar ver la rabia contenida, la sangre se me volvió lava dentro de mis venas literalment

tiene ningún lazo sanguíneo. -A pesar de que sentía desilusionada ante su cobardía, sofocó su dolor y con la fortaleza que la caracterizaba se mantuvo estoica, lista

eridos y mis amigos .- no puedo evitar que en estas alturas mi voz se quiebre, me ha dicho que soy una carga de la cual quiere deshacer

duele, ¡y mucho! porque con ello he perdido a la última persona que pensé que me quería. -A pesar d

para observar por la ventana el exterior de lo que ahora sentía como una pris

eo se acercaban y con rapidez seque las lágrim

iró los brazos para alcanzar mis manos, pero estoy mas que decidida a cumplir con su ridícula petición de g

o y no te fallaré, ni a tu padre tampoco. - Soltaba Mateo pensando que hiz

as personas de su edad y se integrara a l

que me esforzaré por cumplir con todas sus expectativas. -Respo

iaje. - Le digo con cara de poker sin dejar ver lo sola y herida que me siento por todo lo que acabamos de hablar, no tengo a nadie en el mundo que me ame, pensé que el lo hacia, pero que

de sonrisa. ¡sensata tengo las nalgas!, pienso dentro de mi, esta muy equivocado si piensa que el va a imponer su voluntad

las lágrimas consigan llevarse todo el dolor y la frustración que estoy sintiendo en este momento, literalmente

puerta-Adelante -Respondí hecha un ovillo en la cama luego de que los discretos golpes a la puer

a viendo todo a mi alrededor, v

dor para acompañarlo a comer. -Dice una de las servicios de la casa de la

gustaría comer con mi nana - Hoy no quiero verle la cara

joven y se marcho por donde vino, s

s no cuando estamos solas ¿Cómo te llamas tu? -

y estoy a tus ordenes para lo que p

enas amigas.- Le respondo dándole la mano,

señorita tan importante como usted.-Me dice

n mis manos y no hecha un desastre y con un futuro incierto.- Me quejo con ex

onas a sus servicio, muchos lloran en las calles y tienen hambre.- Me dice ella, viéndome

la chica ella se despide con la

se preguntó a si misma- ¿Acaso no pi

o vería como encaminaba su vida no me convertiré en el eco de la voz d

prichos de algún maldito ricachón que sería, si

visualizaba su triste futuro s

aria para mi, en ese tiempo compartí con muy pocas ve

coincidía con Mateo en el comedor, o en la casa, ya que el