ítu

n nuevo cambio -Le aclaro -. Permítame contarle -Lo veo moverse sobre su asiento, como si fuera a escuchar al mismo presidente

te escucho -Dice

l llevó a vivir a casa con nosotras, pero nunca me sentí segura de lo que pasaba con él en casa, hasta que un día intentó abusar de mí -Las lágrimas empiezan a rodar por mis mejillas sin que pueda evitarlo, pero el remord

tus padres? -Es lo

adre, no quiso creerme cuando se lo dije -Más rem

ser sincera, no puedo, no quiero

eyó, y pensaste que tu padrastro podía cumpli

die lo iba a hacer. Me cambié el nombre porque no quería ser encontrada por ellos -Lo veo analizar cada palabra que yo

é sabes hacer? ¿Si te doy el empleo, que puedes hacer? -Pr

discreta ¿Sí? -Me emociono tanto que hablo tan rápido, qué aún no se puede entender de lo acelerada que lo hice. No obstante, no sé por qué me emocioné más de l

marca un número para comunicarse co

cucha un poco autoritario, eso logra asustarme un poco, y me h

la misma chica de antes, cre

ige hacia el señor sentado

donde estoy, abro los ojos a más no poder, no puede ser cierto lo que escucho, la chica a mi lado me mira, son

sando. ¿Acaso no quiere el puesto po

entir Se lo puedo prometer-Me apresuro a responder una vez muy rápido,

estar más feliz. Como se demuestra que siendo sincera se puede lograr más, aunque no lo haya

de nuevo... M

gradecerle nunca de

que voy perdida en mis pensamientos, y choco con alguien en la salida. Es demasiado sorpresivo y cuando levanto el rostro lo veo, esos ojos avellana que hab

disculpa, no te vi yo... -Me di

en sé que a veces puedo ser bien distraída hasta torpe -. ¿Vienes de la oficina de mi padre? -Pregunta y asiento -. Wow esa entrevista si fue larga. Debes

resión de total asombro en ellos, donde refleja que le sorprende lo que dije. Aunque no sabría el porqué, en cambio, si hubiese escuchado todo lo

de un poco, porque eres joven y bonita. Bastante diría yo... -Eso último lo dijo solo para é

e sea joven y bonita? -N

n aquella rubia despampanante de la cual provenía esa voz. Tiene las manos en la cintura, esperando respuestas

se mueve para ponerse ahora delante

? -Se dirige a mí, ignorando por completo la

ción que esta ya planeaba hacerlo -. ¿Yo? No soy nadie; No perdón, sí lo soy, solo que no creo que te interese -Le doy m