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que lamentarse no soluciona nada. La vida es como es y no puedo cambiar el pasad
años, mi madre quedó devastada, prometió que nunca pondría a su hija en peligro, que si mi padre se comportó como un cobarde al irse y dejarnos, ella velaba por mí en todos momento y lo hizo, al menos hasta que
e podía sentir segura ni en mi propia casa, ya de por sí la vida es difícil, el mu
decidí caminar, hasta llegar a una estación de metro, y tomar el primer boleto que tengan ¿A dó
orita? -Escucho como la
alga, a donde vaya. -Pido con desesper
verdad, es de lo único que est
, era esto. O quién sab
pago en efectivo, y me fijo a donde se supone que
MARFA, pero era mi lugar, me gustaba mi espacio, y mi madre, ella era mi persona. Aquí conocí
nte a ver cómo s
mana d
llegué a un pequeño hotel barato, decidí que quedarme aquí no sería mala idea, así que pagué dos semanas por adelantado, gracias al ciel
preguntando se
te, a ver a como nos toca. Seguí las instrucciones del señor y llegué al edificio, efectivamente decían que buscaban una secretaria, aunque me sorprende que una empresa tan grande como se veía esta, buscar
la puerta y llegar a roma (o eso quería creer). Veo pasar una señorita muy el
le ayudó? -Se mostr
secretaria, vengo por la entrevista. -le
me sonrió - .Voy a acompañarla a ver el jefe
r su jefe? -No soy la mas lista, pero si estoy
en lugar de llevarla a recursos humanos, el jefe quiere entrevistarlas personalmente
tan viva, no debe de tener más de 22 o 23 años de edad. Pe
-Me atrevo a preguntar, siempre pensé que e
me puedes decir Angie, ¿Y tú eres? -Iba a r
para la entrevista del puesto de secretaria. Nec
ero bueno. Aquí vamos -. No te preocupes, te cuidaré -lo dice sonriendo, la verdad sí que es guapo el chico, parece que sus padres l
o que a la era de mi nacimiento, porque no sé qué r
e me ocurre, era el nombre de mi abue
dre dentro? -Pregunta tendiendo su mano en dirección a
era
on el hijo del dueño de la editorial, v
sponde mi pregunta sin que darme chance a hacerla, porque sí, ¿qué le diría?, ¿Qué si no tiene más nada que ha
nde esperamos? -respondo trata
stá bien. -Me gu
u oficina, cuando llegamos veo en la
dre se había desocupado, que ya podía pasar a verlo. Él decide acompañarme, ya que no sé hacia d
s? -Ingresa a la oficina conmi
-Una voz fuerte, y gruesa le respon
nstante se hace a un lado para dejarme ser vista por su padre -. Te dej
un poco difícil, mientras que ello se ven tan alegres y campantes. Lo veo salir de
serio, concéntrate y no lo arruines Sydney. No lo hagas, mi subcon
, debo cambiar de actitud nerviosa a un
y el señor Patricio San
hijo era Patricio. -No
r. Ya lo dije antes, aquí todos parecen felices -. Pero continuemos con la entrevista. ¿Sabes que
xperimentado, pero aun así estoy yo aqu
iscrimino por eso -Su amabilidad me pone un poco nostálgica, además solo quiero un trabajo más fácil de conseguir, ya que no tengo n
ámbito laboral, pero sé que me va a pedirme documentos, títulos y todo lo qu
de mis labios, y la verdad este señor me da confianz
ucho puedes...
pero me tocó hacerlo, y ahora debo ser sincera -. Lo siento, lamento mucho haber llegado hasta aquí, inventar cosas, pero no podía ser sincera al ciento por cie
so de su pedido, me siento de golpe esperando su reacción o más
omento tocan la puerta, de inm
e me había atendido en la entrada, con una disculpa se
Angélica? -
esperando fuera para la en
e yo solo la veo, con la cara que lo único que dice es. No sé qué pasa. La chica muy eficientemente, se di
ntiras -Por un instante hay un gran silencio