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los documentos rompió el silencio, y
en que le compro las telas a los demás proveedores, no sé cuál sea la irregularidad aquí pero no quiero ser pa
o se puso en pie-. No se crean que porque soy amable, sea un ingenuo que me deje envolver
buena calidad, además de ello somos nuevos en el mercado por tal motivo le ofrecemos nuestros productos a bajo costo, todo co
mi empresa, está reunión ha terminado -
izo aquella mujer a Donato me dejó bastante sorprendida, no fui capaz de decir palabra alguna mientra
llegaron a ti? -fue lo único que le
así que llegué a imaginar que se trataba de nuestra hija -con aquella respue
rzo, notaba que se encontraba preocupado, al verle el alto grado de estrés que reflejaba su rostro; por lo cual decidí
ecto al parqueadero, subimos al auto y di
o de Celeste; la quiero ver, ya que han pasado varios meses desde la última vez que la vimos, no tengo el corazón tan duro como para corre
sacó su arma y respondía contra aquellos malhechores; el tiempo se detuvo, todo transcurría en mi cabeza de manera lenta, levanté la c
sta la altura del pecho de él, el cual brotaba sangre sin parar, entre en shock; mis manos temblaban y con el
e su ayuda a Donato, colocó sus dedos sobre su cue
ros han sido certeros, los cuales no le han dado oportunidad algun
el cuerpo del hombre con el que acababa de entablar una conversación; tomé mi teléfono móvil en mi temblorosa man
upada, solo espero que lo que me vayas a decir sea realmente importante como para haberme hecho per
ia. -Tuve que hacer una pausa, debido a que el nudo que tenía en
tiempo contigo -su manera petulante de hablar me hace romper en llanto, es
edes hacer es venir a despedirte de él. -Hubo un sil
ejado, recuerda que ese imperio es y será tan solo mio, el cual no lo compa
io hija? -Obtuve por respu
de mi padre, hay más cosas que tengo que hacer y no tengo tiempo para despedirme de un frío cadáver. Si no es más adiós, habl
o y organizar su sepelio, es increíble cómo habían acabado
aba en mí que se eriza todo el cuerpo, no lograba entender quien había sido capaz de acabar con la vida de un h
enorme casa me senté en el sofá; me sentí tan sola que no fui capaz de estar un solo momento más en est
ola, es decir sin aquel enorme vacío que provocaba la pérdid
cuantas propiedades de Donato, quizá un air
do a mis pulmones acompañado de aquel olor del césped recién cortado me