VE A MI CUENTA DE IG "RELATOS DE NUNA"
tranquilo ya que los niños estaban dormidos. Eylin se sentía ansiosa, estaba
in fue a la suya y se sentó en el borde de la cama, y con nerviosismo ju
or? ¿Por qué est
poso se diera cuenta de su agonía. Ella aclaró l
á -mintió-... Lo extraño mucho,
iendo, sino que él sabía que de vez en cuando Eylin tenía epis
l brazo de su esposo la rodeaba y l
Estaría orgulloso de la muj
oso, mientras que por su mente pasó una idea m
tás orgulloso de l
a Mario, "¿Por qué me p
res mi mayor orgul
nhelaban tener. Sumisa y dedicada. Lo único que a Mario deseaba cambiar en su esposa, era su físic
por eso que quería ver la ventana de sus almas. Quería que le mintiera a la cara o que le destrozara el
... ¿Serías cap
ra Mario era inverosímil confesar su engaño a su esposa, para él mientras ella no supiera, nada pasaba, no
la mujer más increíble del mundo. -Mario tomó el rostro de su esposa acunándolo con su
as. Quería aferrarse a la poca esperanza que guardaba. Anhelaba encontrar la exp
ra. Fue un beso suave y delicado
o en la tina? -preguntó Mario
baño juntos donde su esposo le demostró de mil y un formas como amar. Pero no se quedó allí, con d
cabeza cualquier indició de una infidelidad. "Es imposible que me haya hecho el amor de esta forma, s
visar un mensaje que se percató que le llegó mientras le hacía el amor a su esposa. Era Naomi. Tomó el celu
ao
e tan apasionado como tú. No veo la hora en que
o. Tener a una mujer tan atractiva como Naomi lo hacía creerse el mayor de los Adonis del mundo. "¿Quién
ar
nque... Podemos tener un ade
estaba creciendo cada día de forma vertiginosa. No va
fuera una pareja de recién casados. Eylin sonreía
e la gaveta. Encima se encontraba justamente el celular de Mario que en un descuido lo dejó desbloqueado. Y como si l
ao
sa puerta, ten la seguridad que te salta
roto en mil pedazos. Sintió que Mario estaba por salir. No estaba preparada para enfrentarlo, así que salió corriendo de la habitac
e lloró por enésima vez. Culpándose y buscando en ella cuál era
erta de ese baño, que era tes
lló mal... Y... Tu entiendes, estoy indispuesta. No creo que vay
un médico? Así po
y bien así. Ve a trabajar
i te sientes muy mal,
tá b
e a
le daban ganas de vomitar. "¿Cómo pue
vas a lle
ue sus ojos rojos no la delataran. Caminó por su casa como zombie. No podía creer qu
esto era un golpe certero a su autoestima, a su amor propio, que ninguna mujer debía matar, y que ella estaba ac
que si ellos hablaban é iban a terapia, podían salvar a su matrimonio. Es por eso que, aboga
a las puertas de la única oficina del lugar, que era la de Mario. Afuera de esta
de Mario y sintió pánico. Incrédula vio el puesto de la asistente y después vio la puerta de la oficina de su marido. Y con pas
iente. Como una masoquista, ella avanzó. Al llegar a la puerta solo tuvo que empujarla un poco para ver que en su interior se encontraba el hom
alguno. Necesitaba drenar todo su dolor. Una playa solitaria y un par de gritos al viento acompañados con un m
Una Eylin más calmada y s
Pero abstente a las consecuencias. Porque no saldrás impune de esto.... Me acabas de destruir Mario. Acabas de matar este matrimonio que con tan
"hogar", que ahora para ella se sentía como un casa de tortura. No sabía c
con muchas verduras, para curar el malestar estomacal que él creía que Eylin t
... Ya
u pequeña Iveth, que siempr
su hija. Cuándo finalizó fue a l
mor. ¿Cóm
o sin mirar
hará bien en el estómago, además de un poco de medicina
lemencia. Las escenas que vio esta mañana se reproducían una y otra vez en su mente y ella se asombraba de lo tan cara d
se limitó a
beso en los labios, que a duras penas ella correspondió. Luego l
nca me enteraré de tu traición. Pero ya es tar
- I'm not
hicimos
ien o p
reer que me
está en la for
ses he teni
o cada
ue esto ter
todavía te
que est
s que yo sepa l
ndo me ll
no soy