ro quedarme más tiempo -decía Lucía-. M
ia. Extendida bajo el sol, sin ninguna otra preocupación que no fuera
o que volver. No seas
r a un funeral? No me
erencia -dijo él, sonriendo-. Estás contemp
ullosa de ti. Siempre sup
, Alejandro Rodríguez Grandón, único hijo de Agustina, regresaba luego de meses de viaja
?! Soy mayor que Magnus. Soy más listo, más sim
traste interés en tra
eptar menos que eso. Todos en la junta directiva son unos i
a has terminado
ropia empresa?! Es mi derecho y ahora tendré que conform
lo, casi le dio un infarto. Dios no podía ser tan cruel, si él no l
us le da asco todo! Yo me casaría de inmedi
ía fastidiando a Magnus. Papá tenía
lentas. "Ahora eres todo un hombre, Alejandro", le dijo el infame mientras estaba en el hospital, casi muerto por las picaduras de mosquitos. Él había durado medio día, a Magnus ni siquiera habían logrado bajarlo del barco que los llev
rle una esposa ya
y ya casi no queda tiempo. ¿Dónde vamos
tró Lucía, vistiendo sólo una pequeña to
asier rojo, ¿recuerdas en
les bastaba para decirse mucho. Sonrieron, sabiendo que habían tenido la misma brillante idea.
✿
rá sencillo, sólo debes conquistarl
ertirse en la esposa de otro, nada del
gnus y Ale son muy diferentes. Debes
odos los días
aído del cielo, queri
on un extraño. ¿Tendré
Es un matrimonio de men
salir ganando -agregó Alejandro-. Podrías logr
ermosa, sensual, no le era difícil conseguir el favor de los hombres. El
voy a casarme
futura esposa iba recibiendo adiestramiento expre
l olor. Debes oler a jabón, shampoo, tal vez a algun
, masticando velozmente su goma de ma
rado en el cuarto de lavado abrazando una toalla cuando éramos niños. S
pondrás
un bien mayor, ambos debe
er mi ama
ue sí, p
ente. Agustina los separó g
intenta no reírte tanto y no mastiq
a. Empezaron a reírse. Todavía quedaban dos horas de viaje, eso tendr
on ya estaba
Lucía se apretaba la nariz, i
surero. Miraron para todas partes, incluso bajo los zapatos, buscando la fuente de tal podr
erta, con la más radi
maravillosa -dijo Agustina, respirando
limpieza de Magnus a ve
ena noticia, Agustina. Enco