sta que la fecha del viaje estuvo a solo cuarenta y ocho horas, las cosas en el hospital no habían estado mucho mejor, pero al menos, y estoy casi segura de que fue gracias a James, mis turnos no topa
no tenía problema en cumplir las órdenes de mis superiores, finalmente, la je
No era que mi madre tuviera escasez financiera y que no pudiera alquilar un piso o que no pudiera viajar en primera clase, pero la idea era, "pasar desapercibida" y L´Aquila no era una ciudad grande
claramente escéptica.- Por favor dime que es una coar
na
pre había sido igual, sin miedo a decir
o sí, quiero ir de vuelta
o y carrera de mamma, pero Chiara... ¿No había otro lu
alo L´Aquila? -P
casi pude ver el ceño fruncido en
, Anna, voy a completar
a Paris, Latinoamérica, roma o... Oh... -aquel fue
evar, mientras ya había terminado la maleta, ahora llenaba un
"Enfermedades del s
un tono cargado de picardía.- ¿Sigues enamorada
s golpearon
de lo que debía para quien aseguraba, no tenía ningún int
amos que no es as
irle a mi madre, pero era i
ber...-mordí mi
o. No necesitaba explicarme para qu
nuestro único padre es Pappa, aunque sus obligaciones no l
los regalos enviados por Pappa, muchos ni siquiera los había abierto. Yo sabía por qué Anna no respondía, porque para ella, Pappa no había desaparecido, ella, luego de que se mudó a Moscú, cuando tuvo su primera presentación... P
o uno piensa Chiara, tal vez
- Advertí.- Tú puedes tener un padre Anna, y no te juzgo por eso,
iar
re.- Zanjé y corté la llamada an
ente acalambradas, la comida era horrenda y tuve que compartir fila con un enorme sujeto que roncaba y otro que sufría espasmos durante el sueño, finalmente cuando
esentarme directamente al hostal asignado por el programa de intercambio, revisé nuevamente cada uno de los pasos que tenía que seguir y el horario que me habían asignado aquella primera semana de residencia, l
nta de que una persona se acercaba por el costado, hasta que cuando estiré la mano hacía mi equipaje, mi costado chocó con una pared, haciéndome tambalearme hacía atrás, salvo que no era una pared, cuando levanté la vista después de recuperar el equilibrio, me encontré con la enorme presencia, debía medir so
n de la misma forma sobre sus ante