/0/10218/coverbig.jpg?v=5d2bd98cf80cef67431d42235078642e)
Caden fue traicionado por su novia a sus veinte años. Con el corazón roto, tosió sangre y se desmayó. Una gota de sangre manchó el anillo que había usado desde la infancia. Como por arte de magia, el detector de línea de sangre que había estado inactivo durante veinte años finalmente se activó. El sistema mostró a Caden muchas cosas sorprendentes sobre su origen. En un abrir y cerrar de ojos, pasó de ser un estudiante pobre a un gran jefe que poseía varias compañías. Rápidamente se convirtió en el joven más rico del mundo. Todos los que lo habían humillado en el pasado, incluido su ex que lo había traicionado, vinieron arrastrándose a sus pies. ¿Debería pagarles con la misma moneda?
En el campo de deportes de la universidad Singve.
"Tristan, hasta aquí llega nuestra relación", dijo Ellie Harrison, cruzándose de brazos mientras miraba fríamente al hombre que tenía delante.
"¡¿Qué?! ¿Por qué? Ellie, ¿qué hice mal? ¿Por qué me haces esto?". Tristan Stanfield se pasó los dedos por su cabello desordenado con angustia.
Después de todo, ellos estaban juntos desde el colegio. Tras graduarse, ambos fueron aceptados en la universidad Singve, y a los ojos de sus compañeros y profesores, eran la pareja perfecta.
Por eso, Tristan había pensado que aquello era solo el principio de su feliz vida juntos; pero, inesperadamente, ¡Ellie rompió con él en el día de su cumpleaños!
"Tristan, ya no siento nada por ti. Vete de una vez. ¡No quiero volver a verte!". Con una mueca de disgusto, ella agitó su mano como si intentara ahuyentar a una molesta mosca.
"Ellie, dime la verdad. ¿Estás saliendo con Kevin Vance? ¿Se trata de eso?". Los ojos de Tristan enrojecieron de ira.
Resultaba que, hacía tres días, él la había visto subir al auto de aquel hombre. En ese momento, creyó que sus ojos lo engañaban y se convenció diciendo que una chica pura como ella no lo traicionaría. Sin embargo, la realidad lo golpeó con fuerza.
"¿Y qué si es así? Tristan, compórtate como un hombre y deja de molestarme. Kevin llegará pronto, y no quiero que piense que seguimos juntos". Mientras Ellie hablaba, retrocedió unos pasos, como si temiera que la vieran con Tristan.
"¡Kevin no es más que un mujeriego que no te va a valorar como yo! ¡Solo quiere jugar contigo! ¡Yo soy el único que te ama de verdad! Ellie, por favor, no rompas conmigo. ¡Podemos solucionarlo!". Mientras él hablaba, extendió la mano para tomar la de la chica.
Sin embargo, ella se retiró y lo miró con disgusto. "¡No me toques! Tristan, yo nunca quise estar contigo, ¡simplemente ha sido una pérdida de tiempo! ¡Mírate, no tienes casa ni auto! Incluso después de graduarte, solo podrás trabajar para otros y luchar por sobrevivir. Yo no quiero sufrir a tu lado. Y Kevin... Mira el collar que me regaló, ¡vale ciento veinte mil dólares! ¡A ti te llevaría años de trabajo para poder comprarlo! Claramente, él puede darme la vida que quiero. ¿Tú puedes? No, ¡porque no eres más que un perdedor sin dinero!".
"¡Dinero, dinero, dinero! ¿De verdad es tan importante para ti?", exclamó Tristan lleno de ira.
"¡Eres un idiota si no puedes ver que el dinero lo es todo!", intervino una voz detrás de ellos.
Vestido con su traje de diseñador y luciendo un lujoso reloj, Kevin se acercó con una sonrisa burlona.
"Kevin, ¿no te dije que me esperaras en el auto? Iría a verte en cuanto rompiera con este perdedor". Apenas diciendo eso, Ellie rodeó el cuello de este con los brazos y lo miró coquetamente.
En respuesta, Kevin la tomó por la cintura, acariciándole el trasero mientras lo hacía.
Ellie no rehuyó su contacto. En cambio, gimió de placer, animándolo a que la tocara un poco más.
Al ver esto, Tristan sintió como si su corazón se hubiera hecho pedazos. Furioso, cerró la mano en un puño y se dispuso a golpear a Kevin.
Sin embargo, reaccionando con rapidez, este último levantó la pierna y lo pateó en el pecho, haciéndolo chocar contra el suelo. Antes de que Tristan pudiera levantarse, Kevin le dio un golpe en la cara y un pisotón en el pecho.
"Tristan Stanfield, escucha. Ahora Ellie es mía. Voy a llevarla a almorzar al hotel Breezy, y luego a una lujosa habitación por la noche. Quisiera que veas cómo gime como una puta debajo de mí, perdedor".
Al oír sus palabras, Tristan se retorció para liberarse, pero fue en vano.
Kevin solo lo miró con condescendencia como si fuera una hormiga. Entonces, atrajo a Ellie a sus brazos y le sonrió obscenamente. "Nena, te compré unas bragas sexys para más tarde. ¡Vamos a divertirnos mucho! Este perdedor nunca podría satisfacerte, ¡pero yo sí!".
Después de decir eso, Kevin se lamió los labios con deseo. Sin previo aviso, metió la mano bajo la camisa de Ellie y le frotó los senos.
La respiración de ella se aceleró, y sus mejillas se sonrojaron mientras lo miraba con lujuria.
Entretanto, todavía luchando en el suelo, Tristan sintió una oleada de ira, angustia y asco. La sensación era tan abrumadora que se sintió mareado.
Él llevaba tres años con Ellie, pero nunca la había tomado ni siquiera de la mano.
A sus ojos, ella era tan pura y santa como una diosa.
Pero, inesperadamente, resultó ser una zorra, lo que realmente lo enfurecía. Apretando los puños, Tristan golpeó el suelo mientras veía a la pareja alejarse. Luego gritó: "¡Dinero, dinero, dinero! ¡Si algún día me hago rico, les haré pagar por esto!".
De repente, un sabor metálico le llenó la boca, no pudo evitar escupir sangre. Al segundo siguiente, su visión se nubló y se desmayó en el campo de deportes.
Con eso, el líquido manchó el anillo en su dedo, que pareció absorberlo.
En realidad, este pertenecía a los padres de Tristan, quien lo llevaba desde niño.
Ahora que habían pasado veinte años, por primera vez el anillo de bronce emitió una luz extraña.
Al cabo de un rato, Tristan volvió en sí.
Abriendo los ojos lentamente, se encontró acostado en una cama de la enfermería de la universidad.
Justo cuando intentó levantarse, su dedo tocó accidentalmente el anillo y, de repente, un sonido metálico resonó en su cerebro.
"¡Has activado el sistema Magnate!
Primera tarea de novato activada: ¡gastar un millón de dólares! Una vez cumplida la misión, se activarán los logros ocultos y serás recompensado.
Duración de la tarea: 24 horas.
Activación del crédito monetario en el sistema en curso...".
Al oír la extraña voz robótica en su cerebro, Tristan se quedó atónito. Mirando a su alrededor sin comprender, se preguntó si alguien le estaba gastando alguna broma.
En ese momento, su celular vibró. Cuando miró la pantalla, vio que era una notificación del banco.
"Su cuenta ha recibido una transferencia de 1.000.000 dólares. Su saldo actual es de $1.000.078".
Asombrado, la mano de Tristan se entumeció, por lo que el celular cayó sobre la cama. "¿Estoy soñando? ¡¿Soy millonario?!".
Lascivia. Lujuria y Deseo Las vacaciones acabaron y Rachel debe volver a su puesto como teniente en el ejército de la FEMF, encontrándose con que la central de Londres no es lo mismo. Llegó un nuevo coronel, soberbio y con una belleza que no parece humana. Hombre que no tiene ojos sino dagas de acero que la ponen entre la espada y la pared al sentirse tentada por su superior. Ella sabe que no es sano, bueno, ni correcto sencillamente porque quien incita deseos impuros es el mejor amigo de su novio; Bratt Lewis. Christopher Morgan no es solo el coronel, verdugo y dictador del ejército más importante del mundo, tambien es el terror de la mafia italiana y a futuro el arma que dañara al que predica ser su hermano. Él tenía claro a lo que iba, pero Rachel despertó tentaciones sexuales regidas por aquel pecado desconocido llamado lascivia, demostrando que en cuestiones de pasión no hay amigos, alianzas ni compromisos. Él esta casado y ella sueña con lo mismo, pero la tentación desencadenará entre ellos un torbellino de pasiones, lujurias y deseos que solo viven aquellos que se hacen llamar amantes. "Sus actitudes son las de un desalmado sin sentimientos, pero su físico... Joder, su físico me humedece las bragas." Mafias, ejércitos secretos, infieles, adicciones y engaños. ¿Complicado? No, complicado es convivir con la tentación hecha hombre.
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.
Dos años después de su boda, Ximena perdió el conocimiento en un charco de sangre durante un parto difícil, olvidando que su exmarido se iba a casar con otra persona ese día. "Nos vamos a divorciar, pero el bebé se queda conmigo". Estas palabras resonaron en su mente. Sabía que él no estaba allí para ayudarla, sino para quitarle a su hijo. Ximena preferiría morir antes que ver a su hijo llamar madre a otra mujer. Posteriormente perdió la vida en la mesa de operaciones con dos bebés en su vientre. Pero ese no fue el final para ella... Años más tarde volvió a encontrarse con Ramon, que ha cambiado mucho. Quería quedársela para él a pesar de que ya era madre de dos hijos. Y cuando supo que ella se iba a casar de nuevo, irrumpió como un loco. "Ramon, ya morí una vez antes, así que no me importa volver a morir. Pero esta vez, quiero que muramos juntos", gritó ella, mirándolo con angustia en sus ojos. Ximena pensó que él no la amaba y estaba feliz de estar fuera de su vida. Pero lo que ella no sabía era que la noticia de su inesperada muerte le había roto el corazón. Durante mucho tiempo lloró de dolor y agonía. Siempre deseó poder retroceder en el tiempo o ver su hermoso rostro una vez más. Todo esto fue demasiado para Ximena, cuya vida estuvo llena de idas y venidas. No sabía si debía volver al lado de su exmarido o seguir adelante con su vida. ¿Cuál elegiría ella?
¿Qué esperas de tu cumpleaños? ¿Dinero? ¿Joyería? ¿U otras cosas? Lo que sea, pero por lo menos debe ser un día maravilloso. Lola Li, una mujer linda, encantadora e inteligente, graduada en la comunicación audiovisual a una edad muy temprana. Todo el mundo pensaba que Lola tendría un futuro muy prometedor pero las cosas no salieron como se esperaba. Su fiesta de cumpleaños de 22 años fue una pesadilla para ella. Cuando terminó su fiesta de cumpleaños, su mejor amiga la traicionó, su novio la abandonó y su familia se arruinó por completo. Cuando se despertó al día siguiente, Lola se encontraba tumbada en la cama de una habitación de hotel. Con el corazón acelerado, solo podía recordar vagamente a un hombre extraño con el que estaba anoche. ¿Había venido para salvarla? O, ¿era un demonio que lo estaba persiguiendo?
Tras una noche apasionada, Verena dejó algo de dinero y quiso marcharse, pero fue retenida por su acompañante: "¿No te toca a ti hacerme feliz?". Verena, siempre disfrazada de fea, se acostó con el tío de su prometido, Darren, para escapar de su compromiso con su infiel prometido. Darren gozaba de respeto y admiración, todos creía que era frío y temible. Corría el rumor de que lo habían visto besando a una dama contra la pared, pero muchos no lo creyeron. Después de todo, ¿quién podría conquistar el corazón de Darren? Entonces, sorprendentemente, Darren fue sorprendido agachándose para ayudar a Verena con sus zapatos, ¡todo para conseguir un beso de ella!
Tras ser expulsada de su casa, Harlee se enteró de que no era hija biológica de su familia. Se rumoreaba que su empobrecida familia biológica favorecía a los hijos varones y planeaba sacar provecho de su regreso. Inesperadamente, su verdadero padre era multimillonario, lo que la catapultó a una inmensa riqueza y la convirtió en el miembro más apreciado de la familia. Mientras esperaban su desgracia, Harlee poseía en secreto patentes de diseño valoradas en miles de millones. Por su brillantez, fue invitada como mentora a un grupo nacional de aviación, atrajo el interés de varios pretendientes adinerados y llamó la atención de un misterioso personaje, ascendiendo a la cima del mundo.