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Ella, callada y respetuosa Él, grosero y altanero Ella, no se deja humillar Él, le encanta humillar Ella, es de bajos recursos Él, es rico y de alta sociedad Ella solo es la chica de la limpieza y la niñera de la familia de los Johnson Él, es el niño rico hijo de los Johnson. Dos polos opuestos y mundo diferentes. ¿Qué podría salir mal? Esta historia tiene escenas subida de tono y esta que arde.
Escucho un sonido a lo lejos y es muy escandaloso, se que es la alarma.
Estiro mi mano hasta la mesita de noche y tumbo todo le que toco, ya cuando siento la bendita alarma lo apago.
-No me quiero parar-Murmuró con pesadez.
"Pero te toca pararte, así que parate" dice mi conciencia y me paro.
Ya despierta como es debido me levanto y hago unos ejercicios que siempre hago en mi rutina mañanera.
Son las 5:20 de la madrugada y me pongo hacer calentamiento, sentadillas, estiramiento y todo tipo de ejercicios, después de un largo rato ya casi suena la alarma de la 6:00 y ya estoy sudando y oliendo a mono.
Me voy a mi pequeño baño a bañarme.
Se me olvidaba me presento, soy Olivia Harrison y soy una de las sirvientas de la casa de los Johnson.
No me gusta esa palabra, así que soy la chica de limpieza y también niñera de las pequeñas Johnson.
Salgo del baño y voy a mi armario, me pongo un Jeans negro que se le está quitando el color ya que ese es el que uso para hacer los quehaceres de la gran casa, un suéter que es dos tallas más grande que mi talla.
Me encanta vestirme con ropa grande, aunque si, también me gusta ponerme algo más pegado a mi cuerpo.
Me siento más cómoda para limpiar una casa grande con algo más suelto, no me da calor porque la casa tiene aire acondicionado.
Me pongo mis zapatos negros y suena otra vez la alarma.
Me intica que son las 6:00 de la mañana y a las 7:00 entra Valeria a clases. Así que mientras me hago una cola alta en mi cabello castaño claro voy a la habitación de la niña.
Bueno ya no es tan niña porque acaba de cumplir los 12 años esta empezando su etapa en la adolescencia.
Abro la puerta de su habitación y la veo acostada boca abajo, voy a las cortinas y las abro para que entre claridad a su habitación, ella se remueve.
-Ya estoy despierta ¿Sabes?-me dice ella sentándose en la cama.
-Lo se, pero me encanta fastidiarte con la luz y mira que es un lindo día- Le digo con toda la confianza del mundo.
-¿Como que un lindo día? ¡si es lunes! Odio los lunes y me ponen de mal humor liv-Me dice ella levantándose de la cama y con su cara de molestia como todos los lunes.
-No, estas de mal humor porque quieres, eso solo esta en tu mente, ya que es un día como cualquier otro-Le digo y le paso una toalla-¿Porque no te paras de mal humor los Marte? O los otro día de la semana y solo los lunes si igual es un día cualquiera-Le digo yo mientras la empujo al baño.
-Bueno si, tienes razón, por eso es que te quiero-Me dice abrazándome.
-Si,si, yo también, pero vete a bañar que se te puede hacer tarde y tienes que desayunar-Le digo mientras se mete al baño.
Cierro la puerta para salir de su habitación Dejándo el uniforme arreglado en su cama.
Valeria es una gran niña es educada y muy cariñosa, me trata como si yo fuera su hermana mayor aunque le e dicho que no me trate así porque yo solo soy la chica de la limpieza, pero ella me dice que no importaba.
Me asomo a la puerta de la habitación de la pequeña Emma y verifico que sigue dormida.
Bajo y me voy a la cocina en donde encuentro a la nana Martha haciendo el desayuno.
Ella siempre es buena conmigo desde que llegué aquí.
-Buen día nana Martha-Le digo mientras me le acerco y le doy un beso en la mejilla.
Ella tiene años trabajando aquí así que conoces a todos de las famila Johnson.
-¡Hola niña liv! Toma asiento aquí esta tu desayuno-Me dice ella con todo el cariño que siempre me a dado.
Yo trabajo aqui desde los 18 años ya que con lo que me pagan puedo pagar mi universidad en la cual estudió en las noches ya que en el día como sabrán estoy ocupada.
Soy de bajos recursos pero eso no me impide hacer lo que más me gusta, estudiar fotografía.
La nana Martha tiene cincuenta años y no pareciera, conoces a todos los integrantes de la familia.
Yo conozco a toda la familia Johnson, mis jefes, sus padres y a sus hijos.
Bueno, a casi todos.
Al único que aún no conozco es a Liam Johnson.
Ya cuando ingresé aquí él no estaba, se había ido a recorrer el mundo, pues tienen dinero esa familia.. que les puedo decir.
Todos me tratan súper bien mis jefes me dicen que soy una hija para ellos.
Maximiliano dice que soy una hermana pequeña para él y la esposa me dice hasta cuñada.
Los abuelos que yo soy una nieta más y las pequeñas que soy su hermana mayor.
Yo le e dicho a todos que no me digan cosas así que yo solo soy la chica de servicio.
Pero no, no me hacen caso me acostumbré a que me digan así, pero se que solo soy el personal de limpieza y me mantengo a raya.
Se cual es mi puesto en esta casa.
-Ya estoy lista, quiero comida Rica de la nana Martha-dice Valeria.
Llega lista ya con su uniforme de colegio dándole un abrazo a Martha y sacándome a mi de mis pensamientos.
-Claro niña Valeria, te hice lo que más te gusta huevos revueltos con tocineta y pan tostado-Dice Martha poniéndole el plato en la encimera de la cocina-¿Y eso que no esta de mal humor niña Valeria?-Le pregunta.
-Porque una persona por ahí-Me mira Valeria-Me hizo entender que pararme los lunes de mal humor esta en mi mente, ya que es un día como cualquier otro-Termina.
Comienza a comer y yo le guiño el ojo cuando me mira.
Llevo mi plato a lavar y lo lavo, lo seco y lo pongo donde corresponde.
Veo la hora y ya son las 6:40 y va entrando Carlos el chófer de la casa ya arreglado y terminado su café.
Valeria termina de comer sube a limpiarce los dientes y buscar su bolso y se despide de nosotros y se va con Carlos, como los Señores de la casa se paran :7:30 y se van a las 8:30.
Me despido de Martha y me voy a limpiar mi pequeña habitación mientras los jefes siguen dormidos.
Ya después de un rato termine de limpiar mi habitación y voy a la habitación de la pequeña Emma para despertarla y vaya al preescolar, cuando entro la veo ya sentada en la cama.
-¡Hola bebé hermosa!-la saludos con un beso en el cachete y ella ríe-Vamos a bañarte para que vayas a la escuelita.
-¡¡¡Siii‼!-Dice Emma saltando de la cama y corriendo al baño.
Quisiera yo despertar con esa emoción.
Me dispongo a bañarla y mientras ella juega un rato en el agua voy a su armario a buscar su uniforme que consiste en un mono azul marino y una camisa manga corta amarilla con el logo de la escuelita.
Ya cuando esta tengo a la pequeña Emma lista bajamos a la cocina donde están mis jefes y la pequeña sale corriendo a saludar a sus padres.
Emma es una niña muy encantadora tiene seis añitos y habla más que un loro.
-Hola niña liv-Me dice la señora Vanessa.
-Hola señora Vanessa-Contestó yo dándole una sonrisa.
-¿Que te e dicho liv? Que no me digas señora, sabes que me puedes decir Vanessa, tú para mi eres una hija más-Me dice ella y yo solo asiento.
-¿Como estas liv? Como vas en las clases de fotografía?-Me dice el señor Emilio.
-Estoy bien seño...-Me da una mirada entre cerrando los ojos- Emilio y las clases me van bien complicadas pero bien-Le contestó yo y el me sonríe.
Ya cuando mis jefes termina de comer y yo me acerco para agarrar los platos y ponerme a lavarlos.
-Nana Martha quiero que me haga una rica cena, porque después de cinco años viene mi hijo Liam de su gran viaje-Dice Vanessa con una gran sonrisa y martha sonríe y asiente.
-Te vas a llevar muy bien con el liv, él es muy amigable-Me dice el señor Emilio.
-Si eso espero-Contesto yo.
Por fin voy a conocer al ese tal Liam.
"Espero nos llevemos bien"
Dice mi conciencia.
Le doy toda la la razón como Emilio me lo describe tiene que ser un buen chico.
Liam Johnson espero que nos llevemos bien..
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