/0/14621/coverbig.jpg?v=473a4516954462e0fdcfb832a16acc5f)
Henry Meraz lo tiene todo para triunfar en la vida, es inteligente, apuesto, rico no necesita nada, excepto quizás las ganas de hacerlo, las ganas de esforzarse por algo. Su vida no le causa ningún anhelo, no le provoca ningún placer y está resignado a vivir el resto de sus días de esta manera, solo pensando en trabajar y ver pasar los meses. Todo cambia cuando un día una intrusa se atreve a colarse en una de las fiestas de su empresa, por primera vez Henry siente curiosidad por algo, le intriga esta mujer y cuáles son sus planes. Cuando por fin decide enfrentarla ella acaba huyendo, pero deja atrás un pequeño dispositivo de espionaje y Henry se propone encontrarla. Keily es una hacker con muchas habilidades que suele vender al mejor postor, tiene una amplia red de contactos y muchos trabajos infiltrada y le suele ir muy bien, hasta que un día se confía y casi es atrapada, afortunadamente consigue escapar, pero no contaba con despertar la curiosidad de cierto empresario que se obsesiona con ella. Pronto comienzan un juego de correr y esconderse, Henry la busca y Keily se escapa, tal vez después de todo Keily termina acostumbrándose a este juego, aunque lo niegue y tal vez la obsesión de Henry por encontrar a su Ceniciente lo lleve a salir de su zona de Confort dándole esa adrenalina que tanto ansiaba. ¿Qué sucederá cuando por fin acabe el juego? ¿De quién más está huyendo Keily? ¿Será solo obsesión lo que siente Henry? Qué sucede cuando el príncipe se obseciona con la chica que tiene más de villana que de princesa? Te invito a leer para descubrirlo.
La noche llegó y cubrió con su manto oscuro toda la ciudad. El invierno por fin se había marchado y los días comenzaba a ser más calurosos, aunque al caer el sol las temperaturas aun continuaban bastante frescas. Era justo el clima favorito de Henry y lo disfrutaba en la terraza con un cigarrillo en la mano. Su elegancia innata y belleza oscura atraía la atención de las mujeres, pero su carácter tosco y seriedad les advertía a no acercarse. Con una mano dentro del bolsillo del pantalón de su traje y en la otra el cigarrillo Henry observaba a la noche desinteresado de su alrededor.
Un joven de cabello rizos y desenfrenados se acercó mientras con un pañuelo secaba el sudor de su frente.
- Señor Meraz la fiesta está a punto de comenzar, ya han llegado todos los invitados, es su turno para comenzar la celebración. – Henry se giró en dirección a la voz, aun con la mano en el bolsillo y el cigarrillo en la boca mientras daba una larga calada, recorrió de arriba abajo con indiferencia al muchacho frente a él, volvió a darle a la espalda mientras apagaba el cigarrillo en un cenicero y dejaba la colilla al tiempo que decía un escueto
- • Voy - cuando pasó por al lado del chico se detuvo un segundo y con la vista fija al frente y sin mirarlo a la cara agregó – tomate un minuto, seca tu frente y recomponte, si vas a trabajar conmigo debes aprender a dejar de lado los nervios e inseguridades. Solo los más fuertes sobreviven en este mundo y se mantienen en pie. – sin esperar respuesta Henry retomó su camino al interior del salón donde se celebraba la fiesta de la cual él sería el anfitrión.
EL chico observo la espalda de su jefe y sonrió con admiración, una vez más se secó el sudor de su frente y apartó los rizos de su cara. Henry era su ídolo y su modelo para seguir, a pesar de ser 2 años menor que él, era un genio de los negocios y a los 22 años había revolucionado toda la industria volviéndose el empresario más importante de toda la cuidad. EL chico se había esforzado para conseguir aquel trabajo y daría lo mejor de sí para mantenerlo y poder seguir al lado de su ídolo
- Vamos, Elías, tú puedes. – se reconforto y luego siguió a su jefe al interior de la sala.
A Henry le gustaba su trabajo, era bueno en ello, ganaba dinero con ello, se sentía en paz haciendo dinero y gastándolo, la parte que no soportaba de su trabajo era esta, dar la cara a las masas, interactuar con sus trabajadores, asistir a eventos y estar rodeado de hipócritas y personas que solo le daban dolor de cabeza. Usualmente no solía asistir a ninguna fiesta o actividad de la empresa, pero sus empleados le habían ayudado a ganar mucho dinero ese último año y les había prometido que si sobre cumplían el plan mensual durante 6 meses les iba a compensar con un gran bono y una fiesta a la que asistiría. Les había puesto un objetivo ridículamente alto, pero de alguna manera ellos habían cumplido, así que sin más opción tuvo que cumplir con su palabra.
De reojo observo al nuevo asistente que secaba el sudor de su frente en la terraza y bufó, era demasiado sensible, no duraría mucho a su lado. Antes de subir al escenario a dar su discurso miró a Robert, su secretario principal, mayordomo, padre y amigo, la única figura adulta que había tenido a su lado toda su vida.
- Podías haberlo hecho mejor, el chico es un manojo de nervios –recriminó en una voz tan baja, que era casi imposible de escuchar, pero Robert escuchó y con la mirada fija en el salón y los invitados respondió
- Estoy seguro de mi elección, dele una oportunidad. – Henry no respondió y subió al escenario donde el director general de la empresa lo esperaba con un micrófono. Su primo Félix había estado entreteniendo a los invitados, ya que su carácter totalmente alegre y animado, (todo lo opuesto de Henry,) solía tener mayor aceptación.
- Bueno y ahora con ustedes el diamante de nuestra empresa, el hombre que hizo posible que engordemos nuestras carteras y las cuentas del banco se llenen de ceros, sin más preámbulos, el Ceo Henry.
- Gracias todos por asistir a esta encantadora velada – saludó Henry con voz monótona una vez que tuvo el micrófono en la mano – quiero felicitarlos a todos por este gran logro que alcanzaron – su vista se pasó por el salón y terminó en Robert que le hizo un discreto gesto indicándole que siguiera adelante con el resto del discurso motivador que le había preparado, pero Henry lo ignoro completamente – creo que la mayor muestra de agradecimiento es el cheque que hoy han recibido todos, así que espero que disfruten la velada y lleguen mañana llenos de energía y hagan un mejor trabajo para que puedan ser merecedores de su tan generoso sueldo. – sin nada más que decir bajó del escenario y luego de un pequeño momento de confusión general todos los empleados rompieron en aplausos.
- Oh, nuestro jefe es el mejor.
- que palabras tan alentadoras.
- Fue conmovedor
- Me dieron ganas de llorar.
- Como puede ser tan guapo, inteligente y encantador. Definitivamente dios tiene sus favoritos.
- Solo nuestro jefe sabe cómo hacernos sentir tan importantes. – los trabajadores llenaron a Henry de halagos y lo bendecían por su generosidad.
- Si al final no va a seguir con todo lo programado y decir los discursos no se para que me esfuerzo en realizarlos. – dijo Robert cuando Henry pasó a su lado.
- Porque ese es tu trabajo. Además, míralos, están satisfechos.
- Pues qué bueno que al fin me voy a retirar.
- Si, se ve que mueres de ganas de hacerlo ni siquiera te tomaste el tiempo de contratar un reemplazo aceptable.
- Le dije que no me pienso marchar hasta que el chico este preparado.
- Entonces no te jubilaras nunca, tal vez no tienes tanta prisa por abandonarme.
Robert no cayó en la provocación, sabía que no tenía sentido volver a caer en la misma discusión. Solo quedaba esperar a que el chico que había elegido pudiera ganarse su lugar al lado de Henry. El joven Ceo necesitaba a alguien de confianza a su lado, alguien capaz de tolerar su carácter, y sabía que, gracias a la devoción del chico era una buena opción además era inteligente y aplicado, solo necesitaba tiempo.
Henry dio una vuelta por la sala, solo necesitaba dejarse ver un rato y luego podría escapar a la tranquilidad de su hogar. Se encontraba extremadamente aburrido, en aquellos eventos no sucede nada interesante, observaba la copa de vino traída por el joven asistente y bebió un sorbo, era bueno, justo de su agrado observó al chico que se retorcía las manos a su lado nervioso; tenía potencial, tal vez después de todo no fuera un total fracaso.
Mientras disfrutaba de su vino una figura paso justo por enfrente suyo y un aroma a jazmín se quedó flotando en el aire, alzó los ojos de la copa y vio una silueta femenina y una larga melena rubia, la chica estaba de espaldas así que era incapaz de ver su rostro, pero había algo en ella, algo que lo atraía.
La chica se acercó a sutilmente a un grupo de personas, poco a poco, sin llamar la atención se fue deslizando hasta quedar al lado de un hombre. Henry no lo reconoció, pero su cara le resultaba conocida. Se giro hacia su nuevo asistente y pregunto.
- ¿Quiénes son esos? – el chico observo hacia donde indicaba su jefe y como si fuera una computadora o algún programa de reconocimiento comenzó a recitar de memoria.
- El hombre del traje azul, David de recursos humanos a su derecha se encuentra su 2da esposa y secretaria Amanda, se casaron hace 6 meses luego de una aventura cuando fueron descubiertos por la primera esposa.
- No te pedí detalles de su vida privada y en todo caso, ¿cómo sabes todas esas cosas,
- Investigue a cada uno de la lista de invitados de hoy señor. – Henry lo observo asombrado. ¿Cómo era posible que se aprendiera todos detalles de cada una de las personas en la sala?
- ¿Quién es moreno de traje blanco?
- Ese es Alan director de marketing.
- ¿Y la mujer con la que conversa? – el chico observo un momento y luego respondió.
- No estaba en la lista de invitados, ni que acompañantes, así que supongo que ha debido de colarse, ahora mismo llamo a seguridad. – Justo cuando Elías se disponía a pedir a la sacaran su jefe lo detuvo.
- Espera. – Henry no le había quitados los ojos de encima a la rubia la vio hacerle un gesto a una mesera y esta última paso a su lado y le dio un ligero choque en el hombro. La rubio derramó su copa de vino sobre el hombre con el cual conversaba y procedió a pedir múltiples disculpas y ofrecerse a limpiar la chaqueta mientras le hacía ojitos al hombre. – déjala un poco más, por fin esto se pone un poco interesante.
¿Cuánto estarías dispuesto a hacer por tener a tu lado a la persona que más quieres? ¿Hasta dónde serias capaz de llegar por tenerla? Davina Cox tenía una vida sencilla, una madre a la que amaba, una amiga en la que confiaba y al chico mas guapo de la banda de su instituto, tenia planes y sueños que estaban a punto de cumplirse, cuando en un abrir y cerrar de ojos lo perdió todo. Siendo tan sola una adolescente la encerraron en la cárcel y no fue solo hasta 10 años después que consigue su libertad. Una vez fuera Davina solo tiene un objetivo, poder estar al lado de la persona por la que lleva suspirando y extrañando una década, pero pronto descubrirá que el mundo siguió su rumbo mientras ella no estaba. Que las traiciones dejan heridas que tardan en cicatrizar. Para poder cumplir su objetivo Davina tendrá que fortalecerse para que nunca nadie se atreva a volver a meterse con ella y sus seres queridos.
Verónica se suicidó a los 24 años después de vivir una vida cargada de abusos y maltratos de parte de sus familiares. Su esposo se aprovechó de ella y luego la traicionó para casarce con su hermana menor. Cansada de todo puso fin a su vida lamentando sus desiciones. Cuando cerró los ojos pensando que podría descansar, descubrió que había regresado en el tiempo 9 años atrás. Verónica aceptó esta nueva oportunidad para por fin poder vengarse de todos los que la lastimaron, pero para eso necesitaría la ayuda del misterioso Ceo Dereck O'Kelly.
Hela Lombardi ejemplo de mujer sumisa, compañera y ayudante de su esposo, buena hija, empresaria. Y el mayor fraude de todo Italia, detrás de esa fachada de buena mujer, se esconde uno de los Capo más importantes de la mafia Italiana, sanguinaria, manipuladora, egoísta, cruel y uno de los delincuentes más buscados. Con ella como Capo di tutti Capi la Cosa Nostra estaba encabezando la lista de las mafias más peligrosas del mundo, sus soldados la llaman la Diosa de la muerte debido a su historial sanguinario. Pero un enemigo regresa a intentar bajar a la Diosa de su altar, el pasado toca su puerta, trayendo un viejo amor que creía perdido. Stefano Rinaldi regresó de entre los muertos con intenciones de acabar con el reinado de la Diosa. ¿Lo conseguirá? ¿Podrá el viejo amor de juventud provocar algo en el frío corazón de la Diosa de la muerte?
Sara es una joven estudiante universitaria que huyó de su casa, conoció al anciano Rafael Moretti y este le brindó su protección a cambio de que se casara con su nieto. Tres años después Sara seguía sin conocer a su esposo y una noche bajo los efectos de una droga terminó durmiendo con un desconocido que resultó ser su propio esposo. Hugo es un joven empresario que ama disfrutar de la vida y las mujeres, solo hay tres tipos con los que no se mete, menores edad, novias de sus amigos y mujeres casadas, Hugo odia a las mujeres infieles, la ironía de la situación es que él siempre que le es imposible es infiel a su esposa. Hasta que conoce por casualidad a una chica poco femenina y de carácter fuerte que termina siendo la mujer con la que lleva tres años de matrimonio. Ambos quieren divorciarse debido a malos entendidos pero el anciano Rafael Moretti no se lo permitirá hasta que pasen un año conociéndose y conviviendo juntos. ¿Qué les depara el destino? ¿Después de 1 año juntos sus planes aún serán los mismos?
Luna era una chica alegre, que había crecido en una familia cariñosa. Siempre había tenido todo lo que necesitaba y más, pero todo esto cambió cuando el día de su cumpleaños número 21 descubrió que todo en su vida era una mentira, sus padres no eran los biológicos y ella ni siquiera era humana. Se vio involucrada en una guerra entre vampiros , hombre lobos, brujas y humanos, un mundo completamente nuevo que ella desconocía y para el que no estaba preparada. Descubrirá que está implicada en una maldición, y que solo ella tiene en sus manos el destino de toda su especie. Numerosos serán los obstáculos que tendrá que afrontar para sobrevivir y salir adelante, pero ella no estará sola, tendrá a su lado su mejor amiga Vicky, y un amor destinado . ¿Podrá Luna acostumbrarse a su nueva vida? ¿Aceptará el destino que le espera? ¿Aceptará su amor destinado? Te invito a que averigües el largo camino que tiene que transitar Luna para cumplir su destino.
Jenny es una chica libre, que disfruta de las aventuras y la vida. Prefiere el sexo casual y no las ataduras; hasta que la vida pone a Dany en su camino, un chico sexy, atrevido y como diría el subconsciente de Jenny (jodidamente riquísimo). Este chico causa nuevas emociones en ella y termina revolucionando toda su vida. Llevándola al límite una y otra vez, enseñándole que el mejor sexo viene con emociones. ¿Surgirá algo más que deseo entre ambos? Acompáñame a ver qué sucede con esta apasionada pareja.
Rhonda era una chica que amaba demaisado. Después de que su novio de varios años perdiera su trabajo, ella no dudó en apoyarlo económicamente. Incluso lo mimó, para que no se sintiera deprimido. ¿Y qué hizo él para devolverle el favor? ¡Engañó a Rhonda con su mejor amiga! Ella estaba tan devastada. Para hacer que su ex infiel pague, aprovechó la oportunidad para casarse con un hombre que nunca ha conocido. Eliam, su esposo, era un hombre tradicional. Él le dijo que él sería responsable de todas las facturas de la casa y que ella no tendría que preocuparse por nada. Rhonda se rio de él y concluyó que era uno de esos hombres a los que les gusta presumir de su habilidad. Pensó que su vida de casada sería un infierno. Al contrario, Eliam resultó ser un esposo cariñoso, comprensivo y hasta un poco pegajoso. Él la animó a ascender en la escala profesional. Además, la ayudaba con las tareas del hogar y le daba carta blanca para decorar su hogar. No pasó mucho tiempo antes de que comenzaran a apoyarse mutuamente como un verdadero equipo. Eliam sabía cómo resolver los problemas de la vida. Nunca dejaba de acudir en ayuda de Rhonda cada vez que ella estaba en un aprieto. A primera vista, parecía un hombre común, por lo que Rhonda no pudo evitar preguntarle cómo podía poseer tantos conocimientos acerca de diferentes áreas. Pero Eliam siempre ha logrado esquivar esta pregunta. En un abrir y cerrar de ojos, Rhonda alcanzó la cima de su carrera gracias a la ayuda de su esposo. La vida les iba bien hasta que un día, Rhonda encontró una revista de negocios global. ¡El hombre de la portada se parecía exactamente a su marido! ¡Qué significaba eso! ¿Eran gemelos? ¿O le estaba ocultando un gran secreto todo este tiempo?
Como simple asistenta, enviar un mensaje al CEO en plena noche para solicitar películas pornográficas fue un movimiento audaz. Como era de esperar, Bethany no recibió ninguna película. Sin embargo, el CEO le respondió que, aunque no tenía películas para compartir, podía ofrecerle una demostración en directo. Tras una noche llena de pasión, Bethany estaba segura de que perdería su trabajo. Pero en lugar de eso, su jefe le propuso: "Cásate conmigo. Por favor, considéralo". "Sr. Bates, está bromeando, ¿verdad?".
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
Carolina Navarro fue obligada por su padre a casarse con un hombre desfigurado para salvar a su familia de la ruina. Maximo Castillo tenía todo lo que cualquiera deseaba, hasta que un accidente aéreo destruyó su cuerpo, su alma y su relación, haciendo su vida desesperada. Sin embargo, independientemente de eso, todavía necesitaba una esposa y un heredero. ¿Podría funcionar un matrimonio entre estas dos personas? ¿Sería solo un matrimonio de conveniencia o crecería el amor entre dos almas heridas?
Elena, antes una heredera mimada, lo perdió todo de repente cuando la verdadera hija le tendió una trampa; su prometido la ridiculizó y sus padres adoptivos la echaron. Todos querían verla caer, pero ella desveló su verdadera identidad: heredera de una inmensa fortuna, famosa hacker, top diseñadora de joyas, autora secreta y doctora talentosa. Horrorizados por su glorioso regreso, sus padres adoptivos le exigieron la mitad de su nueva fortuna. Elena denunció su crueldad y se negó. Su ex le suplicó una segunda oportunidad, pero ella se burló: "¿Crees que te lo mereces?". Entonces, un poderoso magnate le propuso amablemente: "¿Puedes casarte conmigo?".
La felicidad era como un espejismo para Rocío Ouyang, cuando más se acercaba a la felicidad, más se alejaba. Ella acababa de casarse con Edward Mu, pero en su noche de boda todo se derrumbó. Dejando a Rocío embarazada, Edward la abandonó en su noche de boda. Pasados unos años, Rocío renació por completo, cambiando totalmente su personalidad, convertiéndose en la única coronel del ejército. En este momento Rocío comenzó a reflexionar varias preguntas que eran misterios para ella: ¿Por qué los padres de Edward estaban actuando de manera tan extraña? ¿Por qué su padre la odiaba? ¿Y quién estaba tratando de dañar su reputación en el ejército que ella había trabajado tan duro para construir? ¿Y por qué sigues leyendo la sinopsis? ¿Por qué no abres el libro y descúbrelo tú mismo?