Sara es una chica de 17 años en unos días alcanzará su mayoría de edad. sus padres murieron en un accidente cuando ella tenía dos años. Vive con sus tíos que nunca la han querido, no sabe lo que es el amor, solo conoce los golpes y la humillación pero todo cambiará el día en que sus tíos la vendan. Él es un joven rico, acostumbrado a tener todo lo que desea ahora solo desea comprar una mujer y convertirla en su esclava. Es algo que quiere probar. Y siempre consigue lo que desea.
Narra Sara
Suena el despertador son la siete de la mañana, me levanto de mi raído colchón, porque duermo en algo parecido a un colchón tirado en el suelo de la habitación de la caldera que se encuentra en el sótano.
Esta es mi habitación, tengo el colchón, el despertador y la ropa vieja o que ya no le vale a mi prima Laura.
Me pongo los jeans, una camisa blanca y las zapatillas. Ojalá se canse de esas blancas tan bonitas que le regalaron el año pasado por su cumpleaños.
Las mías ya están agujeradas.
Aunque mi pie es algo más pequeño .. es mejor eso que pisar descalza.
Subo las escaleras y me dirijo a la cocina, tengo que tener listo el desayuno para cuando estén levantados.
Son las ocho termino de colocar todo sobre la mesa, cuando soy abordada por mi tía. Me coge del pelo tan fuerte que me tira al suelo.
- Eres tonta, no sabes que no puedes estar aquí. Que este no es tu sitio. Vete a limpiar la casa. Dice mientras deja una patada sobre mi espalda.
Otro golpe más o menos que más da. Todos los días son igual, he terminado de limpiar la planta baja, a la planta de arriba tengo prohibido subir. Según mis tíos para que no intente robarles nada.
Escucho como han terminado de desayunar. Me paro en un rincón, agachó mi cabeza. Solo espero que pasen de largo. Mi estómago me juega una mala pasada y comienza a rugir.
Laura mi prima se da vuelta y me suelta una bofetada en la cara. Pero que he hecho ahora? Me pregunto a mi misma.
- ¡¡Eres asquerosa !! Comete las sobras si es que quedan. Ni te se ocurra coger nada de la nevera. Me voy a enterar. Dice lanzándole una sonrisa de superioridad.
Me dirijo a la cocina me duele y me escueze la cara, pero ya no lloro hace años que no lo hago. Cuando lloraba me pegaban mas.
A ver qué me han dejado. Un poquito de jugo, un sorbo de leche hay en una taza. Todos los platos están vacíos menos uno, hay huevos y bacon. Lo cojo para comer y veo que hay una colilla de tabaco apagada en medio. Todo está lleno de ceniza.
Aún así me lo llevo a la boca pero lo tengo que escupir el sabor a ceniza hace que sienta arcadas.
Bueno tendré que esperar a la hora de la comida. Son casi las diez. Tengo media hora para salir al jardín de atrás. Solo puedo sentarme detrás del cobertizo.
Escena retrospectiva
Es un día de verano tengo seis años, llevo un vestido rosa, está algo roto pero me encanta.
Estoy jugando con unas hormigas.
Veo a mi prima salir y dejar una paleta creo que es de helado nunca lo he probado.
No se porque lo hago pero me acerco y cojo el helado. Cuando estoy apunto de probarlo, soy tirada al suelo de un empujón, golpes me caen por todos lados de un momento a otro todo está negro, despierto y estoy sobre mi colchón no me puedo mover me duele todo.
Fin del Flashback
Nunca más volvi a moverme de mi sitio indicado. Estuve más de una semana sin poder moverme de la cama. Desde aquel día arrastró una pequeña cojera.
Un papel llega volando y cae sobre mis pies, lo recojo y lo miro.
Intento leerlo pero ya casi no recuerdo las letras.
-sshh, shhh, e. Esta ya no la recuerdo. Digo mientras guardo el papel en mi bolsillo.
Cuando tenía ocho años mis tíos contrataron una chica se llamaba María ella era muy buena conmigo me enseñó algunas letras una vez me dio a escondidas un dulce, un día me dijo que me llevaría con ella lejos de allí. Pero de repente desapareció ya nunca más la volví a ver.
Es por la tarde ya no tengo más que hacer la cena está lista y sobre la mesa. Mientras bajo a mi habitación veo como mis tíos abrazan a Laura.
Que podría hacer yo para que ellos me tratarán como ella, esa es una pregunta que me atormenta.
- Que haces hay parada? Dice mi tío mientras me mira con rabia.
Yo solo agachó mi cabeza y comienzo a descender a mi habitación. No me está permitido hablar. La última vez que lo hice fue con María.
Tampoco se como soy no me está permitido mirarme en un espejo. Según mi prima soy tan fea que los puedo romper.
Se que tengo el pelo castaño y ondulado, mi piel es clara pero no sé mucho más.
Yo creó que haya pasado el tiempo suficiente para que hayan terminado de cenar, subo sin hacer ruido me asomo y escucho sus voces en el salón.
Recojo la mesa, lavo los platos. Hoy voy a comer por fin, no he comido nada en todo el día.
Hay un trozo de pan, unos trozos de filete, un poco de brócoli y media manzana.
Estoy súper contenta hacía tiempo que no comía tanto.
Salgo al baño al jardín, si! tampoco me está permitido usar los de la casa con mi inmundicia los puedo ensuciar dijo mi tía la primera y última vez que intente utilizar uno.
Para mí no esta mal, tiene un retrete y un grifo para llenar un cubo. Una toalla y un peine, le faltan púas pero está bien.
Ya estoy lista me dirijo a dormir yo no tengo una caja de esas en las que sale gente dentro. Lo que no entiendo es cómo se han podido meter dentro. Eso es algo que me tiene inquieta.
Unas voces atraen mi atención se que no debo escuchar pero esta vez no lo puedo evitar.
Escucho a mis tíos discutir
- En unos días cumple los 18 años ya nos darán más el check por ella, qué vamos a hacer? Dice mi tía alterada.
- no te preocupes, ya lo tengo todo listo, en dos días vienen a por ella. La he vendido y me han pagado más de lo que esperaba por ella. Dice para después comenzar a reír.
Noto como se dirigen hacia la puerta salgo corriendo hacía mi habitación bueno por llamarla de alguna manera.
Me siento sobre el colchón. Trato de asimilar lo que acabo de escuchar.
Como que me ha vendido pero como me ha podido vender. Recuerdo las veces que me han dicho "no vales nada"
Ya no tengo nada más que hacer aquí, nunca había intentado escapar, aguante los golpes, los desprecios, los insultos, esperando que un día me llegarán a querer bueno nose muy bien lo que significa querer. María me dijo un día que me quería y eso me hizo sentir bien.
Suena mi despertador, es la hora de marcharme digo para mí. No tengo nada que llevarme. Así que solo subo las escaleras. No puedo abrir la puerta está cerrada. Empiezo a golpearla pero que pasa, no lo entiendo.
Al otro lado de la puerta escucho una voz que me resulta familiar es la de mi tío.
- De ahí no te mueves, no voy a permitir que lo arruines todo.
Me quedo sentada en un rincón agarro mis rodillas con las manos y por primera vez en años una lágrima recorre mi cara.
Lord William Cárdigan tiene la obligación de casar a sus tres hijas, ha concertado los matrimonios desde su niñez y aunque ellas lo desconocen no es algo a lo que puedan objetar. Ser mujer en esta época no es la mejor de las opciones, Solo sirves para servir, obedecer y criar a tus hijos. Olvídate de pensar y sobre todo de conocer el amor. Con suerte si te toca un buen marido puedas a crear una amistad.
Después de tantos años simplemente dejé de buscarla. Pero aquel día lluvioso un pequeño bulto chocó contra mí. Ella poseía un aroma exquisito, estaba claro, ella era mi mate. Cuando quise mirarla vi que estaba muy mal herida. Y si esto ya era malo lo peor de todo es que ella era humana.
Serenety Moore vive una vida tranquila junto a su abuela hace casi diez años sus padres murieron en el ataque de la manada. Desde entonces vive a las afueras con su abuela. Su vida es tranquila no se relaciona con nadie de su raza, ella estudia y trabaja en un pequeño pueblo habitado por humanos. Pero como no todo puede ser tranquilidad, ni felicidad un día reciben una notificación de la manada, se celebrará un censo y tienen que acudir, no es una invitación más bien es una obligación. Allí descubrirá quien es su mate y no se tratará de uno cualquiera sino de Caleb Lewis, el Alfa más aterrador de toda América. Ella se negará y lo intentará rechazar. Por nada del mundo quiere que su vida cambie y menos al lado de un ser sanguinario y cruel. O al menos eso es lo que ella cree.
Italia 1807 El papa Pío VII tiene un nuevo capricho casar al hijo díscolo de los duques de Milán, con una señorita de intachable virtud. Cuál es su sorpresa al conocer a Francesca hija de su mayor proveedor de vino, ella es la indicada, católica, bella y obediente. El trato es claro o accedé a casar a su hija con el futuro Duque o se quedará sin trabajo. La cosa es simple. Que opinara el joven Alesso Sforza de su pronto matrimonio, nadie nunca ha desobedecido una orden papal. Se atreverá el a desafiar a la mano de Dios en la Tierra. Se avecina tormenta: • Un matrimonio impuesto • Nueva vida • Miedo, desconfianza, celos, traiciones y sobre todo mucho amor.
Alessandra siempre ha cuidado de su familia aunque por su edad no le pertenecierá hacerlo, cuidar de dos hermanas menores y un padre enfermo es lo que le ha tocado vivir. Acaba de cumplir diecinueve años ella tiene ganas de vivir y de volar alto, pero sabe que ese es un sueño que quizás nunca pueda alcanzar. Un día al regresar del mercado, su padre le comunica que la ha prometido, con el dinero que le han ofrecido podrán vivir mejor. Ella no se puede negar sus hermanas tendrán una vida mejor. Su mundo ha cambiado en apenas dos días se marchara de casa y su mundo no volverá a ser igual. Quién será su prometido? Y por qué ella es la elegida? Solo sabe que su futuro esposo es un duque y ella una simple plebeya.
Evangelina así es como me llamo, de todos los nombres posibles en el mundo, mis padres tuvieron que optar por este. No existe ni un día en toda mi vida que no haya sido objeto de burla a causa de mi nombre o de cualquier otra cosa. Nunca he tenido tiempo de hacer amigos, siempre moviendonos de un sitio a otro. Según mis padres este será nuestro último traslado. Aunque el cambio no me hace feliz, estoy emocionada en tres días cumpliré dieciocho años, ese será el día de mi primera transformación. Ya nunca más estaré sola. La tendré a ella, a mi loba. También está la parte de los compañeros, se que seré rechazada, no soy precisamente lo que se dice una belleza, a ver no es que sea fea pero tampoco guapa, soy del montón! Si por casualidad encuentro pronto a mi mate, seré rápida y seré yo la que le rechace. Oh eso espero. Nuevo comienzo, nueva manada, nuevo Alfa. Espero que tenga ya a su Luna. no quiero ser la típica mujer lobo que llega a la ciudad y resulta ser la maté del Alfa. Todo es muy bonito y patatin, patatatan. Sé que los cuentos de hadas no existen, ningún príncipe vendrá liberarme de la bruja malvada, me besara y seremos felices para siempre. Solo pretendo se normal, pasar desapercibida y con suerte conseguir una amiga. Lo del amor es indiferente, ya lo he aceptado, nadie nunca ha querido estar cerca de mí. Solo he sido objeto de burlas y humillaciones.
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.
Loraine era una esposa devota desde que se casó hace tres años. Sin embargo, a su esposo Marco no le importaba nada ella. Nada de lo que ella había hecho ablandó su corazón. Por fin, Loraine se cansó de todo esto. Ella le pidió el divorcio y lo dejó sin pensar. Los demás la miraron como si estuviera loca. "¿Has perdido la cabeza? ¿Por qué estás tan ansiosa por divorciarte?". "Es porque tengo que irme a casa para obtener una fortuna de mil millones de dólares. Además, él ya no me gusta", respondió Loraine con una sonrisa. Todos se rieron de ella; algunos pensaron que el divorcio la había afectado mentalmente. No fue hasta el día siguiente que se dieron cuenta de que no estaba mintiendo, porque una mujer fue declarada repentinamente la multimillonaria más joven del mundo, ¡y era Loraine! Marco se sorprendió mucho con esas peripecias. Cuando volvió a encontrarse con su exesposa, ella ya era una persona diferente. Un grupo de jóvenes guapos la rodearon y ella les sonrió a todos. Esta escena lastimó el corazón de Marco. Dejando a un lado su orgullo, trató de recuperarla. "Hola, mi amor. Veo que eres multimillonaria ahora. No deberías estar con idiotas que solo quieren tu dinero. ¿Tal vez podamos volver a estar juntos? También soy rico. Juntos, podemos construir un imperio fuerte. ¿Qué dices?". Loraine entrecerró los ojos hacia su exmarido, y sus labios se curvaron con disgusto.
Para el público, ella era la secretaria del CEO. A puerta cerrada, era la esposa que él nunca reconocía oficialmente. Jenessa estaba eufórica cuando se enteró de que estaba embarazada. Pero su alegría se vio reemplazada por el temor cuando su marido, Ryan, se reunió con su primer amor. Con el corazón encogido, decidió dejarlo libre y marcharse. Cuando volvieron a encontrarse, Ryan se fijó en el vientre prominente de Jenessa. "¿Quién es el padre del niño?", le preguntó. Pero ella se limitó a burlarse. "¡No es asunto tuyo, mi querido exmarido!".
Acusada de asesinato, la madre de Sylvia Todd fue considerada una traidora por toda la manada, condenando a Sylvia a vivir el resto de su vida sola y humillada como una humilde esclava. Lo único que quería la chica era demostrar la inocencia de su madre de alguna manera, pero el destino nunca parecía estar de su lado. A pesar de todo, Sylvia nunca perdió la esperanza. Como el futuro rey licántropo de todos los hombres lobo, Rufus Duncan poseía un gran poder y estatus, pero tenía una inexplicable reputación de ser cruel, sanguinario y despiadado. Sin que todo el mundo lo supiera, había sido maldecido hacía mucho tiempo y se veía obligado a transformarse en un monstruo asesino cada luna llena. Aunque el destino no siempre favorecía a los dos, unió a Sylvia y Rufus como pareja predestinada. ¿Se hará justicia para la madre de Sylvia? ¿Podrán ella y Rufus desafiar todas las normas sociales y permanecer juntos? ¿Tendrán estas dos almas desafortunadas un final feliz?
Hace dos años, Ricky se vio obligado a casarse con Emma para proteger a la mujer que amaba. Desde el punto de vista de Ricky, Emma era despreciable y recurría a artimañas turbias para asegurar su matrimonio. Por eso mantenía una actitud distante y fría hacia ella, reservando su calidez para otra. Sin embargo, Emma amaba a Ricky de todo corazón durante más de diez años. Cuando ella se cansó y consideró la posibilidad de renunciar a sus esfuerzos, Ricky empezó a tener miedo de perderla. Solo cuando Emma estaba muriendo, embarazada, él se dio cuenta de que el amor de su vida siempre había sido Emma.
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