Mi nombre es Helena Dorian vivo en Borealer Schild, Canadá. Nuestra comunidad vive prácticamente escondida de la civilización. Si os preguntáis porqué? La respuesta es simple, no somos personas normales, nosotros escondemos un secreto. Nos transformamos en lobos al alcanzar nuestra madurez. Está llega sobre los dieciséis años. En ese momento un mecanismo interno se pone en marcha, encontramos a nuestra pareja, compañero, mate, alma gemela, por su olor! Esa pareja es nuestro mate, no siempre se encuentra pero dicen que si lo haces y no te rechaza, estarás completa a todos los niveles. Pero aquí hay un problema, si te rechaza tu lobo interno puede morir por el dolor del rechazo. Desde que descubrí esa parte, no quiero de ninguna de las maneras que aparezca. Puedo ser feliz sin él. Es más ya lo soy. Pero todo esto va a cambiar el día que vuelvan a casa los hijos del Alfa y el Beta de la Manada.
Me despierta el canto de los pájaros, hace poco que ha amanecido, llevo aquí tres meses y aún me cuesta acostumbrarme a tanta paz.
Después de tres años en la ciudad, me cuesta volver a sentir este lugar como mío.
Es verdad que aquí he pasado casi toda mi vida, me fui con dieciocho a estudiar y he vuelto con veintiuno.
Al principio odie, la ciudad, el ruido, la falta de empatía de la gente. Pero poco me enamore de sus calles, de sus bares y de sus gentes tan diferentes.
Mis padres me mandaron a casa de unos familiares, así no me desconectaría de mi parte loba. Palabras exactas del sobreprotector de mi padre.
Estoy terminando de desayunar, he cogido mi portátil y mi bolsa. Aunque parezca raro aquí en medio de la nada disponemos de internet.
- Mamá, me voy no quiero llegar tarde y menos que los niños tengan que esperarme.
Porque está claro, soy la nueva maestra de la Manada y digo Manada porque los únicos que viven aquí son como yo.
El trabajo está bien pagado aunque lo mío es vocación podría hacerlo gratis, pero gracias al dinero que recibo quiero comprar un terreno y hacerme mi propia casa.
Llegó al colegio saludo a cada niño de una manera especial, cada uno puede hacer lo que desee. Unos me abrazan, otros me besan, otros bailan y otros hacen saludos divertidos con las manos.
La mañana pasa volando, me encantan oír sus risas, sus preguntas curiosas y hasta sus rabietas.
He quedado a comer con Eva una de mis mejores amigas, hemos estado separadas pero nunca hemos perdido la chispa, seguimos tan unidas como en primaria..
Llegó a la cafetería, es la única cafetería del pueblo, aunque es bastante grande y la comida es muy buena.
Busco una mesa libre, me siento al lado de la ventana, miró el trasiego de la gente mientras espero a Eva.
- Helena!! Helena... Tierra llamando a Helena estás ahí? Pregunta mi amiga golpeando mi brazo.
- Lo siento estaba distraída, por cierto llegas tarde? Le digo levantando una ceja y poniendo media sonrisa.
- Que es media hora más o menos en una vida. Dice y se sienta en frente de mi.
No se como la sigo queriendo, lleva usando la misma frase desde los siete años.
- Cuéntame qué tal con los niños? No se como eres capaz de soportar, gritos, lloros, mocos... Dice Eva poniendo cara de asco.
Yo simplemente me río, creo que su trabajo es mucho peor, es la farmacéutica del pueblo, yo lidio con niños pero ella con adultos que es mucho peor. Jajajaja..
- Sabes Dick me pidió matrimonio ayer!! Dice para después enseñarme un bonito anillo con una piedra verde.
- Sii, soy muy feliz por ti, y para cuándo es la boda? Digo entusiasmada.
- Este verano, ya sabes que eres mi dama de honor, la principal, también se lo pediré a Lydia y a Mayra. Ojalá tu también encuentres a tu mate pronto.
Me ahogo, se me ha ido el refrescó por otro lado, el ataque de tos es considerable.
- Estás bien Helena, creía que te morías.
- Nada trague deprisa y se fue por otro lado. Digo en modo de excusa.
Me niego no quiero encontrar a mi mate y menos que me encuentre, tengo miedo al rechazo y sobre todo a que mi loba pueda morir.
Desde que mi abuela me explico todo lo relativo a los mates, he evitado estar cerca de hombres de mi especie.
Nunca he tenido una relación, por lo menos algo que implique tener sexo.
Aunque si he besado y me han besado a mi.
Ya, ya lo se soy única en mi especie!! hasta ahora no he necesitado intimar más con nadie.
- Te han llamado Mayra o Lydia? Me pregunta Eva.
- Noo, ese par de gemelas locas deben estar ocupadas con sus nuevos amiguitos.
Eva comienza a reír, tiene una risa característica y muy pero muy escandalosa, toda la cafetería nos está mirando en este mismo instante.
Cuando se calma y deja de emitir esos sonidos tan desagradables empieza a contarme:
- Ya sabes que su padre es el Beta de la Manada, su padre las ha mandado a la cuidad a buscar a su hermano y al hijo del Alfa, por lo visto llevan cinco años fuera del país, han estado formándose y recibiendo una buena educación. Así que supongo que mañana las veremos.
- Con dinero todo es más fácil. Digo entre dientes.
- Me encanta que no hayas cambiado, sigues tan gruñona como siempre. Dice Eva sonriendo.
Después de una comida un tanto peculiar, nos despedimos Eva tiene que volver al trabajo, hoy le ha dado el día libre a su empleada y tiene que abrir ya que es la única farmacia del pueblo.
He visto un pequeño terreno cerca de casa pero no tanto como para estar ahí en dos minutos.
Me doy la vuelta y me dirijo a casa del Alfa, espero conseguir audiencia antes de cumplir los treinta.
Llegó a la puerta y lo primero que veo es como un guardia se abalanza sobre mi, lo esquivo pero no sé cómo he podido hacer eso!!
- Solo quiero una audiencia, soy la maestra, por favor cálmate... Digo gritando.
- Una mujer muy bonita y elegante sale al oír el escándalo. Debe de tener unos cuarenta y pocos años.
- Owen que ocurre, que está pasando. Dice la mujer regañando al guardia.
- Ella, ella quería entrar sin permiso..
Lo interumpo y no le dejo terminar.
- Lo siento señora pero no es cierto, ni siquiera me ha dejado preguntar, cuando ya lo tenía casi encima.
Ella manda al guardia que se marche, se acerca un poco más a mí, me observa detenidamente.
- Señora siento todo lo que ha pasado, me presento soy Helena Dorian, la nueva maestra, he venido porque quería comprar un pequeño terreno para poder hacerme una casa.
- Encantada Helena yo soy Gabriela Jhonson, la Luna de esta Manada. Dice mientras me tiende una mano.
Que rechazo para agachar inmediatamente mi cabeza ante ella, de verdad que soy estúpida, como no he podido darme cuenta de que ella podría ser la Luna, solo espero no haberla ofendido.
Ella comienza a reír, levanta mi cabeza con sus manos y me dice:
- Prefiero a la Helena de antes, la que sabe lo que quiere y no le importa decirlo.
No me sale ni una palabra , lo único que puedo hacer ahora mismo es sonreír como una tonta.
- Helena, ven mañana en la tarde y solucionaremos lo del terreno, además hay unas cosas sobre la escuela que me gustaría comentarte. No te preocupes por Owen aveces se toma la protección de la casa demasiado en serio. Me vuelve a tender la mano y está vez si que acepto el saludo.
Saldo del jardín y puedo ver como el tal Owen me observa escondido detrás de un árbol.
Este hombre si que es raro!! Pienso mientras camino hacia la casa de mis padres.
Próximamente la mia!!
Lord William Cárdigan tiene la obligación de casar a sus tres hijas, ha concertado los matrimonios desde su niñez y aunque ellas lo desconocen no es algo a lo que puedan objetar. Ser mujer en esta época no es la mejor de las opciones, Solo sirves para servir, obedecer y criar a tus hijos. Olvídate de pensar y sobre todo de conocer el amor. Con suerte si te toca un buen marido puedas a crear una amistad.
Después de tantos años simplemente dejé de buscarla. Pero aquel día lluvioso un pequeño bulto chocó contra mí. Ella poseía un aroma exquisito, estaba claro, ella era mi mate. Cuando quise mirarla vi que estaba muy mal herida. Y si esto ya era malo lo peor de todo es que ella era humana.
Serenety Moore vive una vida tranquila junto a su abuela hace casi diez años sus padres murieron en el ataque de la manada. Desde entonces vive a las afueras con su abuela. Su vida es tranquila no se relaciona con nadie de su raza, ella estudia y trabaja en un pequeño pueblo habitado por humanos. Pero como no todo puede ser tranquilidad, ni felicidad un día reciben una notificación de la manada, se celebrará un censo y tienen que acudir, no es una invitación más bien es una obligación. Allí descubrirá quien es su mate y no se tratará de uno cualquiera sino de Caleb Lewis, el Alfa más aterrador de toda América. Ella se negará y lo intentará rechazar. Por nada del mundo quiere que su vida cambie y menos al lado de un ser sanguinario y cruel. O al menos eso es lo que ella cree.
Italia 1807 El papa Pío VII tiene un nuevo capricho casar al hijo díscolo de los duques de Milán, con una señorita de intachable virtud. Cuál es su sorpresa al conocer a Francesca hija de su mayor proveedor de vino, ella es la indicada, católica, bella y obediente. El trato es claro o accedé a casar a su hija con el futuro Duque o se quedará sin trabajo. La cosa es simple. Que opinara el joven Alesso Sforza de su pronto matrimonio, nadie nunca ha desobedecido una orden papal. Se atreverá el a desafiar a la mano de Dios en la Tierra. Se avecina tormenta: • Un matrimonio impuesto • Nueva vida • Miedo, desconfianza, celos, traiciones y sobre todo mucho amor.
Alessandra siempre ha cuidado de su familia aunque por su edad no le pertenecierá hacerlo, cuidar de dos hermanas menores y un padre enfermo es lo que le ha tocado vivir. Acaba de cumplir diecinueve años ella tiene ganas de vivir y de volar alto, pero sabe que ese es un sueño que quizás nunca pueda alcanzar. Un día al regresar del mercado, su padre le comunica que la ha prometido, con el dinero que le han ofrecido podrán vivir mejor. Ella no se puede negar sus hermanas tendrán una vida mejor. Su mundo ha cambiado en apenas dos días se marchara de casa y su mundo no volverá a ser igual. Quién será su prometido? Y por qué ella es la elegida? Solo sabe que su futuro esposo es un duque y ella una simple plebeya.
Evangelina así es como me llamo, de todos los nombres posibles en el mundo, mis padres tuvieron que optar por este. No existe ni un día en toda mi vida que no haya sido objeto de burla a causa de mi nombre o de cualquier otra cosa. Nunca he tenido tiempo de hacer amigos, siempre moviendonos de un sitio a otro. Según mis padres este será nuestro último traslado. Aunque el cambio no me hace feliz, estoy emocionada en tres días cumpliré dieciocho años, ese será el día de mi primera transformación. Ya nunca más estaré sola. La tendré a ella, a mi loba. También está la parte de los compañeros, se que seré rechazada, no soy precisamente lo que se dice una belleza, a ver no es que sea fea pero tampoco guapa, soy del montón! Si por casualidad encuentro pronto a mi mate, seré rápida y seré yo la que le rechace. Oh eso espero. Nuevo comienzo, nueva manada, nuevo Alfa. Espero que tenga ya a su Luna. no quiero ser la típica mujer lobo que llega a la ciudad y resulta ser la maté del Alfa. Todo es muy bonito y patatin, patatatan. Sé que los cuentos de hadas no existen, ningún príncipe vendrá liberarme de la bruja malvada, me besara y seremos felices para siempre. Solo pretendo se normal, pasar desapercibida y con suerte conseguir una amiga. Lo del amor es indiferente, ya lo he aceptado, nadie nunca ha querido estar cerca de mí. Solo he sido objeto de burlas y humillaciones.
Un matrimonio ligado por un contrato, y ella estaba obligada a aceptarlo. Él era su jefe y ella su secretaria. Ella le dio todo lo que él quería, pero su amor fue desatendido, pero cuando ella decidió irse, él le ofreció un contrato de matrimonio para que se quedara. Pero alguien ocupaba su corazón y no podía ofrecerle nada excepto su talento en la cama. Después de su matrimonio, soportó el dolor, pero esquema tras esquema destruyó su tolerancia. Finalmente, estaba lista para dejarlo, pero de repente él se negó a dejarla ir. Charles pareció sentir su dolor, la abrazó de repente y susurró: "Sarah, puedes confiar en mí. Nunca estaré con ella. Eres diferente de todas esas otras mujeres. Realmente quiero estar contigo. Si no lo hubiera hecho, entonces no habría cortado las relaciones con todas las demás mujeres. ¿No me crees ahora? Sarah sollozó suavemente: "Si has aceptado que se acabó con ella, ¿por qué todavía tienes su foto en tu billetera? ¿Por qué todavía la extrañas? ¿No ves cómo me duele? Charles la miró, "¡Ella es solo otra mujer de mi pasado!" La atmósfera entre ellos se volvió sofocante y Charles dijo en voz baja: "Sarah, ¿te dije que podías irte? Recuerda, soy tu jefe. ¡Eres mi secretaria y mi esposa! Enfadado, Charles volvió a gritar: "¡Sarah, soy tu hombre!". "¿Oh? ¿Mi hombre?" Sarah se rió y lo miró fijamente. Las lágrimas comenzaron a deslizarse por sus mejillas, "¿Eres tú, mi hombre? ¡Señor presidente, solo soy una mera posesión suya y nunca me convertiré en su esposa! ¡Libérame, te lo ruego!
Kaitlin se enamoró de Alan a primera vista, pero no consiguió conquistar su corazón ni siquiera después de tres años de matrimonio. Cuando su vida estaba en juego, él lloraba ante la tumba de su amada. Eso fue la gota que colmó el vaso. "Divorciémonos, Alan", dijo Kaitlin. Después del divorcio, Kaitlin prosperó en su nueva vida, ganando fama internacional como diseñadora. Recuperó la memoria y reivindicó su legítima identidad como heredera de un imperio joyero, al tiempo que asumía su nuevo papel como madre de dos preciosos gemelos. El pánico se apoderó de Alan cuando vio a los pretendientes alrededor de su exesposa. "Me equivoqué, cariño. Por favor, déjame ver a nuestros hijos", le suplicó Alan.
Se suponía que era un matrimonio de conveniencia, pero Carrie cometió el error de enamorarse de Kristopher. Cuando llegó el momento en que más lo necesitaba, su marido estaba en compañía de otra mujer. Carrie ya estaba harta. Decidió divorciarse de Kristopher y seguir adelante con su vida. Sin embargo, solo cuando ella se marchó, Kristopher se dio cuenta de lo importante que era ella para él. Ante los innumerables admiradores de su exesposa, Kristopher le ofreció 20 millones de dólares y le propuso de nuevo: "Casémonos de nuevo".
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Eden McBride pasó toda su vida siguiendo las pautas de la sociedad. Pero cuando su prometido la dejó un mes antes de su boda, Eden deja de seguir las reglas. Una furia insaciable es justo lo que recomienda el médico para su corazón roto. No, en realidad no era así. Sin embargo, era lo que necesitaba Eden. Liam Anderson, el heredero de la empresa de logística más grande de Rock Union, era el tipo perfecto. Apodado el Príncipe de los Tres Meses porque nunca estaba con la misma chica por más de tres meses, Liam había tenido una buena cantidad de aventuras de una noche y no espera que Eden sea nada más que eso. Cuando se despertó y la encontró con su camisa de mezclilla favorita, Liam comenzó a estar irritado, pero extrañamente intrigado. Ninguna mujer había abandonado su cama voluntariamente ni le había robado. Eden había hecho ambas cosas. Necesitaba encontrarla y arreglar las cuentas. Pero en una ciudad de más de cinco millones de habitantes, encontrar a una persona era como buscar una aguja en un paja. No se vieron hasta que el destino los volvió a reunir dos años después. Eden ya no era la chica ingenua que era cuando saltó a la cama de Liam; en ese momento tenía un secreto que proteger a toda costa. Liam estaba decidido a conseguir todo lo que Eden le robó, y no fue solo su camisa.
Todo el mundo pensaba que Lorenzo quería de verdad a Gracie, hasta el día de la operación de corazón de su hija. Para sorpresa de Gracie, Lorenzo donó el preciado órgano que necesitaba su hija a otra mujer. Desolada, Gracie optó por el divorcio. Impulsada por su necesidad de venganza, Gracie se unió al tío de Lorenzo, Waylon, y orquestó la caída de Lorenzo. Al final, este se quedó sin nada. Consumido por el remordimiento, él suplicó por una reconciliación. Gracie pensó que era libre de seguir adelante con su vida, pero Waylon la retuvo con un abrazo. "¿Pensaste que podías abandonarme?".