Amber Weys es una chica con curvas prominente, pero lo que es una cruda realidad en el mundo actual es que la chica es considerada una chica gorda, a raíz de eso el acoso escolar se agrava hasta el punto de ser golpeada en grandes grupos de estudiantes. Uno de los causantes de que esto sucediera es Adam Raymond, jugador de Futbol americano, quaterback del equipo y estúpidamente guapo. Pero no todo lo que brilla es oro, el pasado del chico lo hacen vivir una pesadilla dándose cuenta que daño a la persona equivocada. Una hermosa chica con curvas prominentes lo ayuda a salir del hoyo que lo consumía llevándolo a luz.
Un nuevo día comienza, el despertador que está junto a mi mesa de noche está sonando sin parar; me levanto de la cama con la pereza más grande de este mundo, me adentro en el baño y me doy una ducha de unos cuantos minutos, lavo mis dientes y seco mi cabello con la secadora. Regreso a mi cuarto por algo de ponerme y salir a desayunar.
Mi casa está habitada por mis dos padres y mi hermano mayor Jackson. Bajo hasta la cocina donde se puede escuchar murmullos.
- Buenos días familia- entró a la cocina y saludo a mi hermano con un zape y a mi padre con un beso en la mejilla.
- Hola princesa ¿Cómo amaneciste? - mi madre se encuentra también en la cocina haciendo panqueques para todo.
- Muy bien gracias- tomo mi teléfono para verificar que hora es y cuánto me falta para el nuevo año de escuela.
- Amber hoy no poder llevarte, me voy con unos amigos. - dice mi hermano tecleando su teléfono, mi hermano es uno de los titulares del equipo de fútbol americano, él y yo no socializamos en el colegio porque según él su imagen debe permanecer por lo alto. Pero cuando es necesario el me defiende a capa y espada.
- Está bien, yo podré tomar el autobús.
- Aquí están sus panqueques- mama coloca dos panqueques en cada uno de los platos que se encuentran en la mesa, tomó algo de miel y lo echó encima de estos, con un tenedor y un cuchillo parto un trozo y lo meto a mi boca saboreando con deleite.
Los platos de la mesa ya se encuentran totalmente vacío, afuera se escucha la bocina de un auto, Jackson toma su mochila y sale de la casa, al cabo de unos minutos tomo mi mochila con destino a la parada de autobuses. El autobús no tardó en llegar, subo a este y me siento en el último puesto.
El trayecto fue totalmente tranquilo, todo iba en silencio era muy obvio ya que las vacaciones ya habían acabado, el chofer del bus se estaciona en la zona de buses y abre las puertas para que todos salgan; yo espero que todos salgan por inseguridad.
Camino hasta la entrada de la escuela con la cabeza hacia abajo, me dirijo hasta mi casillero que se encuentra junto al baño de hombres, guardo todos mis útiles y solo tomo la materia que me toca a primera hora.
- Pero miren a quien tenemos aquí- detrás de mí se escucha la voz de Mandy Stand, la chica más popular de toda la escuela, es famosamente conocida por su novio, el capitán de fútbol americano y amigo de mi hermano Adam Raymond- a la ballena Willy. - cierro la puerta de mi casillero y me largo sin prestarle atención a aquella chica, siento como mi cuerpo es tirado contra los casilleros.
- ¿No la escuchaste Willy? - me encuentro en el piso mirando a Stan cómplice de Mandy, toda la escuela está en silencio, escucho uno " con permiso" varias veces, aquella voz se va acercando, al estar frente mí me mira y luego mira a Stan. Jackson le da un gran golpe a Stan.
- ¡Deja a Amber en paz, si te vuelvo a ver junto a ello te juro que la paliza que recibirás será grande! - mi hermano tiene a Stan en el piso- ¡Y ustedes que ven, vayan a clases! mi hermano tiene ese efecto de miedo en las personas, ocasionado que lo obedezcan. Jackson se acerca a mí y me da su mano, puede que en la escuela no quiera verme, pero cuando se trata de mi seguridad es el más sobreprotector.
- Deja a tu hermana la gorda ahí tirada- la mano de Mandy golpea la de mi hermano con tanta brusquedad que Jackson me suelta y yo vuelvo a caer.
- Mira Mandy tú puedes ser novia de mi amigo- lo señala con el dedo. - pero tú no me mandas. - Jackson vuelve a darme la mano y yo la vuelvo a tomar y él con tanta fuerza me levanta. - Vamos a clases. - me coloco delante de, él me sigue como si fuera un escolta. - Amber debes aprender a defenderte, yo todo el tiempo no voy a estar junto a ti.
- Tú sabes que no soy una persona violenta
- Si, lo sé, pero te tienes que defender ellos pueden llegar a ser muy duros y no voy a estar ahí todo el tiempo, entiende que debes tomar algunas clases de defensa personal o algo por el estilo. - me detengo en la puerta de mi aula, aún no ha llegado el profesor, miró a mi hermano y este me mira con cara de preocupado.
- Gracias- le doy un abrazo y este lo acepta. - nos vemos en casa.
- Mmm... Con respecto a eso, no voy a estar toda la tarde. - responde rascando su nuca
- Está bien, no te preocupes- me despido de Jack y entro a mi aula, al entrar todos me quedan mirando como el bicho raro que todos dicen que soy, bajo mi cabeza y me siento en el último puesto. Sacó una libreta, lápiz y empiezó a dibujar mándalas. En menos de dos minutos el salón se encuentra totalmente lleno.
- ¡Buenos días alumnos! - el profesor de matemáticas entra y todos colocan mala cara- espero que sus vacaciones hayan sido muy buenas, pero desde hoy vamos comenzar con la clase- todos hacen sus berrinches de primer día- Ya callen ya vamos a comenzar.
- ¿puedo pasar? - todos volteamos a la puerta reconociendo aquella voz.
- Señor Raymond llega tarde- el profesor le reclama, pero es para fingir, porque ese hombre es fan de Adam Raymond y el equipo, se acerca a Adam y le da la mano- ¿Cómo está para el partido de inicio? - colocó los ojos en blanco y miró para la ventana.
- Muy bien señor- este le recibe la mano con mucho gusto; delante de mí puedo escuchar los murmullos de aquellas chicas con las hormonas por los aires, Adam mira a todos lados buscando un puesto, un grupo de chicas delante de mí dejando un puesto en medio.
- Adam puedes sentarte aquí- este asiente coqueto, se acerca y antes de sentarse me mira, este voltea los ojos y se sienta.
La clase del profesor Warren sigue durante dos horas, unos les presta atención, otros no se dedican a prestar atención y por último los que se encuentran durmiendo, llevo por lo menos dos hojas con el dibujo que hago, pintar hace que me relaje y me pierda del mundo real.
- Miren nada más, la ballena dibuja- escucho la voz de Adam y las risillas de aquellas chicas, no les prestó atención y sigo trazando mi dibujo. De un tirón retiran mi libreta de mi escritorio, por reflejo me levanto para poder tomarla.
- De... devu... devuélveme el cuaderno- digo con la mira baja.
- No- Adam cierra el cuaderno y se lo coloca debajo de su trasero, indignada tomo mi bolso y salgo del salón sin pedir permiso.
Mis lágrimas están a punto de salir, odiaba enojarme y llorar, me voy al baño y me encierro en este, las gotas de agua salen de mis ojos una tras otra, salgo del cubículo para lavarme la cara, pero se me es impedido por un cuerpo que está enfrente.
- Pobre ballenita, no se sabe defender sin su hermanito.
- Este baño es de mujeres.
- Ya lo conozco, ya entré con Mandy- alza sus hombros sin importancia. - desearía no hacer esto, pero como eres nuestro títere lo voy hacer- Adam se acerca a mi lentamente intimidándome con su estatura y su gran cuerpo, me encuentro recostada en la pared del baño tiritando de miedo, las luces del baño se apagan y se prenden y titilan, de los demás cubículos salen más personas con máscaras; en mi cabeza se van formulando preguntas ¿Cómo llegaron sin que yo los notara? ¿Por qué yo?, estas personas se encuentran al rededor de Adam, me voy haciendo bolita por lo que va a pasar. El primer golpe lo recibo en las piernas, chillo de dolor, luego de eso llovieron más golpes.
- ¡Oigan! Que hacen par de brutos- la voz de una chica que levante la cabeza para mirarla con mis ojos empapados de lágrimas- aléjense de ella, aquellas personas incluyendo a Adam se van como si no hubieran hecho nada. - sé que no estás bien pero igual ¿te encuentras bien para ir a la enfermería?
- Me voy a casa.
- Te acompaño, mucho gusto soy Rebeca Gutiérrez. - la chica extiende su brazo y yo lo tomo con un poco de duda
- Amber Weys. - le digo al estar completamente de pie
ADVERTENCIA. Esta novela no es apta para todo público, contiene escenas +21 lenguaje soez y violencia. Clarie Smith es una las diseñadora de interiores más famosa de toda la ciudad, pero también es conocida, por ser hermosa, tener un cuerpo curvilíneo y un hermoso cabello rojizo que llama la atención de todos. Y eso la llevó a tener un acosador, cuya vida gira en torno a ella y a su negocio, él la quiere para sí mismo, no quiere que nadie más la toque y todo aquel que se atreva a tocar a su chica perderá la vida.
Estaba tan desesperada que haría lo que fuera por conseguir lo que tanto anhelaba, así que decidí invocarlo, un cúmulo de neblina oscura inundó mi habitación, y entre esa neblina logre verlo, era alto, vestía de traje,y su sonrisa era encantadoramente perfecta, y sus ojos… rojos como el infierno. Aquellos malditos ojos rojos me volvieron malditamente loca de placer por tenerlos todos los días a mi lado. Invoque al diablo para evitar que mi novio me dejara por otra mujer y ahora estoy obsesionada con el hermoso ángel caído.
5 MILLONES DE DÓLARES. Es lo que ganaré si logró conquistar a Steve Montler. Luego de la muerte de mi hermana gemela y su novio en un accidente automovilístico, la última persona que pensé que se aparecería en mi puerta era Henry Montler, un importante empresario y sobre todo uno de los hombres más ricos de todo el país. El cual vino a mi con una propuesta que solo una persona idiota rechazaria. Debo conquistar a Steve Montler en menos de un año y 5 millones de dólares serán míos de inmediato. Pero nadie me advirtió de los riesgos que correría estando en una casa campestre alejada de toda la ciudad junto a un padre y su hijo. Steve es una persona tosca, peligrosa y posesiva, Henry está roto, pero siempre está dispuesto a donar parte de su felicidad si eso contenta a su hijo. Los tres estamos completamente rotos y nos convertiremos en una bomba tóxica de tiempo. Pero cuando las reglas se rompen esa delgada línea del pudor se borra y ahora estoy envuelta en un trío del cual saldre dañada, pero sé perfectamente que pertenezco a ellos dos.
Esther Bell es vendida a la Bratva, mafia rusa en la ciudad de Nueva York, siendo Artem Petrov el principal heredero de Pakhan y su comprador. Artem necesitaba casarse para ser el siguiente jefe y para él fue fácil comprar a una chica y Esther fue la principal ganadora, sin embargo en sus planes nunca estuvo tocarla debido a que Esther es virgen y a Artem no le gustan las chicas virgenes. Pero pronto los celos, pasión, lujuria y posesión invadieron a Artem, aquella mujer debe ser únicamente para él, y asesinará a todo aquel que decida atravesarse en su camino.
Una noche de copas me llevó a conocer al hombre más frío y sanguinario de toda la ciudad, y desde el primer momento en que me vio advirtió que yo sería suya. Y desde ese momento surgieron una serie de eventos que me llevaron a conocer la pasión y la lujuria, pero sobre todo alimentar la obsesión que tiene él por mi. Alec Leinster, es un controlador, posesivo, celoso, pero sobre todo un semental en la cama.
Quizás ya conozcas la historia de la bella y la bestia, pero todo este tiempo te la han contado mal. Maurice vendió a su hija al mejor postor, sin embargo Bella no estaba dispuesta a ser utilizada como moneda de cambio. Pero él no se iba a quedar con las ganas de probarla, la bestia tiene tantas ganas de su cuerpo que asesinará a todo aquel que se cruce en su camino.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Alfonso Durán descubre que su cáncer está muy avanzado y antes de morir, decide encontrarle la pareja ideal a sus cuatro hijos.
Clara Goodman, es la primogénita de la familia Goodman, una familia de empresarios de Nueva Zelanda, su madre murió cuando ella tenía seis años, y su padre volvió a casarse poco después con una mujer que la odiaba, más aún cuando nació su hija, y hermana de Clara, Karen, a la que su madrastra consideraba la verdadera heredera de la fortuna Goodman. Justo por eso hace que la vida de Clara durante su infancia un auténtico infierno. Los años más felices de la heredera, fueron cuando fue enviada por su padre, que desconocía lo que verdaderamente pasaba en su casa, a los Estados Unidos, exactamente a Washington, para estudiar en la Universidad, cumpliendo así la promesa que le hizo a la madre de Clara. Una noche que una compañera de la universidad le hicieron una jugada, tras emborracharla, Clara acabó pasando la noche con un desconocido, que resulto ser el multimillonario turco más poderoso de Asía, Azize Osman, Dueño del grupo Osman. A la mañana siguiente, Clara huyó, avergonzada sin dejar rastro de quién era ella, por el contario Azize pensó, en un principio, que ella era mujer de la noche, hasta que descubrió unas manchas rojas entre las sábanas, y supo que él había sido su primer hombre, y eso él nunca lo olvidaría. Pero lo peor estaba por llegar, cuando dos meses después Clara descubrió que estaba embarazada. Ella quiso pedir ayuda a su padre, pero eso nunca llegó, gracias a la manipulación de su madrastra, que le ofreció una cantidad de dinero enorme para que pudiera vivir, a cambio de que ella rechazara su herencia, todo lo que Clara conocía acabó, fue así como Clara se encontró embarazada, y expulsada de su familia. Pero todo cambio siete años después, cuando el inteligente hijo de Clara, Mack Goodman, quiso saber quién era su padre biológico, y gracias a su excepcional inteligencia, y a sus habilidades informáticas de genio, sin que su trabajadora y famosa arquitecta madre lo supiera, no sólo descubrió quien era, sino que, además, ideo un plan para que ambos estuvieran juntos para siempre. ¿Saldrá el plan como quiere este pequeño genio? ¿Es ya demasiado tarde? ¿Podrá Clara vengarse de quiénes le hicieron tanto daño? Muchas preguntas por responder, en mi próxima novela.
Lenny era el hombre más rico de la capital. Estaba casado, pero su matrimonio no tenía amor. Accidentalmente tuvo una aventura de una noche con una extraña, por lo que decidió divorciarse de su esposa y buscar a la chica con la que se acostó. Juró casarse con ella. Meses después del divorcio, descubrió que su esposa estaba embarazada de siete meses. ¿La mujer lo engañó? Scarlet estaba buscando a su esposo, pero, por error, los dos pasaron una noche apasionada. Sin saber qué hacer, se escapó presa del pánico, pero luego descubrió que estaba embarazada. Justo cuando estaba lista para explicar lo que le había sucedido a su esposo, este le pidió el divorcio. ¿Descubriría Lenny que la extraña chica con la que se había acostado era en realidad su esposa? Más importante aún, ¿su matrimonio sin amor mejoraría o empeoraría?
Tras una noche apasionada, Verena dejó algo de dinero y quiso marcharse, pero fue retenida por su acompañante: "¿No te toca a ti hacerme feliz?". Verena, siempre disfrazada de fea, se acostó con el tío de su prometido, Darren, para escapar de su compromiso con su infiel prometido. Darren gozaba de respeto y admiración, todos creía que era frío y temible. Corría el rumor de que lo habían visto besando a una dama contra la pared, pero muchos no lo creyeron. Después de todo, ¿quién podría conquistar el corazón de Darren? Entonces, sorprendentemente, Darren fue sorprendido agachándose para ayudar a Verena con sus zapatos, ¡todo para conseguir un beso de ella!
Alexander Whitmore se ve forzado a casarse con Lauren Green para asegurar su herencia en la empresa familiar. Aunque al principio se desprecian mutuamente, la atracción entre ellos se convierte en un conflicto emocional cuando Alexander empieza a enamorarse de Lauren. Sin embargo, un embarazo inesperado lleva a Lauren a huir y buscar el divorcio. Años después, regresa como exesposa con un hijo, y Alexander, lleno de arrepentimiento, le suplica una segunda oportunidad.