no me había dado la oportunidad de que surgieran inseguridades. No me había dado ninguna razó
era sólo un ape
echó al hombro y me subió
, acentuados con reflejos dorados, lo hacían sentir íntimo y
Empezó a apartarse, y yo solté el bolso y le rodeé el
e presionaba, el no me apresuró. Su beso fue lento y sensual. Me encantaba su atrevimiento, pero estaba demostrando que
ropa-, dijo, mientras sus
, igual de deseosa de ver a su cuer
patos. Observé, mordiéndome el labio, cómo se desabrochaba la
reguntó con voz sugerente
antes de que pudiera preocuparme por si estaba siendo demasiado
e y bajaba tentadoramente hasta sus pantalones. Su camisa se u
os y los bajó con los pantalones al mismo tiempo. Dejando
mirándome con un d
escubierto mis pequeños y rosados pechos. Las manos de Oliver estaban sobre mí antes de que mi sujetador
Me besó los pechos, prodigándome atenciones. Le cogí la nuca, e
tar segura de lo que pedía,
la cabeza y me
tensidad entre nosotros se
o a la cama y cogió un preservativo del
je, cogiendo el p
con la boca, tomándome mi tiempo para asegurarme de que estaba bien puesto, y excitándolo un poco más. L
o. La conexión entre nosotros se
ilizó la mano por encima de la cabeza, con los dedos aún enlazados. Su otra
n?-, me sus
con la mano libre suje
nando dentro de mí. Sus ojos no se apartaban de los míos, escudriñando
tre nosotros. Me sentía conectada a él de una forma que iba mucho más allá del sexo. Me sentía bien al esta
is caderas se balanceaban para encontrarse
dijo cuando sintió que me acerc
chó. Los dos respirábamos con dificultad y las embestidas de Ol
rimirme. Grite libremente, dejando que la felicidad fluy
s de mi clímax y reteniendo su propio p
Le acerqué con mi pierna, deseando que descargara su euforia sobre mí. Se acurrucó
corta distancia que nos separaba, mientras el se bajab
s gelatinosos y encontrando una posición cómoda. Observé cómo Oliver abandonaba la cama y s
entía como un extraño. Habíamos conectado al instante en el bar y la energía entre nosotros era potente. Mientras