n sus piernas desnudas en plena nevada. Corrió hacia el

mblorosa. Apenas acababa de salir del auto y

e abrir la puerta para entrar, pues Annie y Tom

e lanzó a los brazos de Gi

acostumbrada al frío y en esa zona tan ce

qué volviste? -

ó sobre la vía -explicó ella, mientras su hi

Annie con ilusión, pero

má se cambie la ro

my, mientras estiraba su cabeza, intentando v

ntras se abrazaba a sí misma, frotando s

-. Por favor, Gia. Ve a quitarte esa ropa mojada... Ya te alcanzo tu equipaje -le pidió Stephen y ella, aunque

tó y le estiró la mano c

la sala. Cuando Stephen vio hacia donde se dirigía, se quedó callado por un momento,

encio cuando su exesposa se detuvo en el camino, aunque no se giró -. ¡Ya regreso! -ex

baño auxiliar, se dio cuenta de que no tendría más alternativas, pues necesitaba darse un baño

hijos, pero ambos negaron, aunque estaban un poco enred

enfermar -le pidió Annie y men

egres

, apenas contaba con dos habitaciones y un baño mediano, con una tina cómoda, la

do darse un baño en la tina, pero sería muy abusivo de su parte, además no era apropiado seguir mojada por mucho

ano. No era su teléfono y no debía contestarlo, sin embargo, fue tarde cuando se dio cuenta de que estaba mirando el nombre en la panta

as a mami? -preguntó Tom

ntó al ver que sus hijos se habían gastado toda una

Eran muy pocas las vacaciones que habían pasado en la nieve y nunca habían tenido la necesidad de ser l

para cambiar su ropa, subió las escaleras lentamente y caminó por el pequeño pasillo como

estaba con la puerta entrecerrada, sin embargo, no r

ió dejar el morral sobre su cama, así cuando Georgi

do ella saliera de la ducha. Con prisa fue a su armario y del rincón sacó una toalla limpia, dudó por un mome

or lo que, se abría sola y había querido arreglarla antes de la llegada de

relajado tanto dentro de la ducha, que su cerebro se había quedado e

almente, solo era dejarle la toalla a la mano, para que al salir la viera; solo que, no contó con que sus pie

e veía más hermosa de lo que era a sus dieciséis. Stephen tragó saliva, se quedó pasmado por un breve momento, hasta que la mano de Ge

secarse, hizo una mueca y salió de la ducha creyendo que tendría que improvisar, sin embargo, sobre la cisterna rep

verdad esa era la ropa que había echado para volver? Sí, no había pensado en el frío que haría en Montana, pues el hotel contaba con

reguntó Stephen al bajar las escaleras, aleja

a alcanzar a su papá y ayudarlo, además de tener control sob

as, así que, solo tomó su ropa interior, se la puso y volvió a mirar el vestido que había llev

, mientras doblaba sus piernas e intentaba cubrir su cuerpo, p

nta al verla, pero gracias a la presencia de sus

-preguntó y Gia

ropa...

o -dijo Annie. Gia sonrió, a

y después asintió. Ella había tenido toda la intención de ayudar a su m

en y se acercó a ella -. Tommy, estás pendiente de

iéndose más tranquila al no ser observada por él. Podía parecer una bobada que no quisiera ser vi

opa que tenía que no fuera de trabajo, así que,

iramos qué hacer con tu ropa -co

molestar -se ex

abajo con los niños -dijo y s

mal, esa pijama era la misma que Nicolas, su padre, le había regalado a juego para la primera na

olvidado pedir unas pantuflas, pero esta vez sí se tomó el atrevimie

hermosa -la

endo hacia su mamá y la abrazó -. Hueles como papi -com

sus recuerdos, unos recuerdos agridulces que parecían volver en estas vacacione